𝑯𝑼𝑵𝑻𝑬𝑹 𝑮𝑨𝑵𝑮 😎| 𝚡𝚒𝚔𝚎𝚛𝚜

𝟖𝟑: 𝑚𝑦 𝑒𝑣𝑒𝑟𝑦𝑡ℎ𝑖𝑛𝑔

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Hunter, Ye Chan, Min Jae y Yu Jun acompañaron a Jin Sik hasta la entrada del centro artístico en el que solía tomar clases de música cuando aún estaba en la escuela.

―Te esperaremos aquí ―dijo Hunter.

Jin Sik asintió con la cabeza.

―Gracias, chicos ―murmuró, nervioso.

―No hay de qué ―respondió Ye Chan―. ¡Ahora ve!

Se acercó a su amigo y lo empujó hacia el interior del recinto. Jin Sik rió tímidamente y obedeció la orden de Ye Chan.

―¿Creen que sea una buena idea que nuestro amigo se reúna a solas con un vampiro? ―inquirió Min Jae, después de que Jin Sik se fuera.

―No había pensado en eso... ―musitó Hunter.

―Podríamos seguirlo ―sugirió Ye Chan―. Ya saben, para asegurarnos de que no le suceda nada malo...

Min Jae entrecerró los ojos y miró a Ye Chan con suspicacia. 

―Lo que tú quieres es espiar a Jin Sik para luego ir a contar el chisme a los demás ―le espetó.

Ye Chan se rió y abrazó a Min Jae.

―Me alegro de que me conozcas tan bien.

♢❀♢

El interior de la institución no había cambiado mucho desde que Jin Sik y Niran habían estudiado allí.

Jin Sik fue directo a la sala en la que se guardaban los instrumentos, puesto que Niran le había dicho a Hunter que estaría esperando ahí. Sin embargo, cuando Jin Sik entró, el lugar estaba vacío.

―Soy un estúpido ―murmuró Jin Sik, negando con la cabeza―. Era imposible que fuera cierto. ¿Cómo he caído en ...?

―Perdón por llegar tarde ―dijo una voz masculina a sus espaldas.

Jin Sik se calló abruptamente, paralizado. Aquella voz era muy parecida a la de Niran.

―¿De verdad eres tú? ―susurró, sin atreverse a mirar hacia atrás. Apenas podía pensar con claridad. 

―No lo sé... ―respondió Niran, inseguro―. Yo... no soy el chico que recuerdas. He cambiado... mucho ―admitió, notoriamente avergonzado―. Incluso ahora puedo ver (*) ―añadió, arrepintiéndose al instante.

―¿Qué? ―exclamó Jin Sik, dándose vuelta de inmediato.

Era verdad. El aspecto de Niran había cambiado, pero no cabía duda de que era él. Su Niran.

Durante un minuto, ambos se miraron a los ojos. Niran estaba asustado; Jin Sik también. Ninguno de los dos fue capaz de pronunciar palabra. El paso del tiempo, y las experiencias que cada uno había vivido, flotaban entre ellos, separándolos aún más.

♢❀♢

Niran prefirió mantener la distancia, y creyó que Jin Sik había decidido hacer lo mismo.

"Es mejor así", pensó Niran con tristeza.

Sin embargo, Jin Sik, sobrepasado por sus emociones, finalmente rompió a llorar y fue directo hacia Niran para darle un abrazo.

Al principio, Niran no supo cómo reaccionar. Estar tan cerca de Jin Sik le parecía irreal. Había soñado con un momento como aquel durante tanto tiempo, que le resultaba difícil creer que verdaderamente estuviera sucediendo. Pero, luego de la sorpresa inicial, se dejó llevar y abrazó a Jin Sik.

―Lo único que he querido hacer durante los últimos dos años es esto―murmuró Niran, emocionado.

Se quedaron un buen rato abrazados, y Jin Sik continuó llorando, con el rostro oculto en el hombro de su amigo. No quería separarse de él porque temía que volviera a desaparecer de su vida.

♢❀♢

―¿Estás enfadado conmigo? ―preguntó Niran. 

Jin Sik y él todavía estaban abrazados. 

―¿Cómo podría estar enfadado? ―exclamó Jin Sik, sin parar de llorar―. Eres un milagro. Dios mío, si supieras lo mucho que te he echado de menos no harías preguntas tan estúpidas.

―Eh... gracias ―dijo Niran, conmovido―, pero, si lo piensas detenidamente, yo...

―No hay nada que pensar―lo interrumpió Jin Sik. Su voz sonaba extraña a causa del llanto―. Has vuelto. Estás vivo. Y estás aquí, conmigo. Me estás abrazando. ¡Eres real! ¿Qué importa lo demás?

―¿De verdad me perdonarás por haberme escondido de ti durante dos años?―inquirió Niran.

―Supongo que tenías tus razones... ―respondió Jin Sik.

Niran no daba crédito a lo que oía.

―¿No te importa que ahora sea un vampiro?

―Por supuesto que no. Humano o vampiro, sigues siendo Niran ―afirmó Jin Sik, totalmente seguro de sus palabras―, y no puedo dejar de quererte. Simplemente no puedo. Nunca he podido. Ni siquiera lo intenté porque sabía que era imposible. 

Niran tuvo que hacer un enorme esfuerzo para no llorar. No sabía qué decir. No estaba preparado para la intensidad de las palabras de Jin Sik. Nunca alguien le había hablado de esa manera. No pudo evitar preguntarse otra vez si aquello era un sueño. 

―Por cierto..., ―añadió Jin Sik, sin sospechar lo que Niran estaba sintiendo en ese preciso momento―, gracias por cuidar de mí cuando estuve..., ya sabes, enfermo.

Niran dejó a un lado su confusión y se concentró en Jin Sik. 

―Jamás hubiera permitido que te sucediera algo malo.

Jin Sik se separó de Niran para mirarlo a los ojos. Era la primera vez desde que se conocían que estaban tan cerca el uno del otro.

―Gracias ―repitió, emocionado.

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(*) 2 años atrás, Niran padecía discapacidad visual. La hipótesis es que recuperó la vista al convertirse en vampiro.

Coloqué el asterisco porque puede que no todos los lectores/as hayan leído "SAVE YOU".