Todo comenzó aquella mañana de agosto, cuando el señor y la señora Granger habían tomado una decisión que cambiaría la vida de Hermione no sólo para evitar dejar de sentirse sola y excluida del resto de los niños, sino que también habían adoptado a...
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Casa Granger-
-Llegar a casa fue más divertido para Alarik y para Hermione, habían descubierto un nuevo juego de mesas para jugar apenas terminará la cena y eso las había hecho querer ir a sus habitaciones para poder darse una ducha mientras Jean preparaba aquella cena y Wendell terminaba de poner la mesa.
Hermione iba a lo que iba, un baño, pijama y al comedor; pero Alarik se tentó recordando aquella revista para dejar de ser perdedora. Así que una vez termino de bañarse, se colocó su pijama; aquella que consistía de un pantalón pijama de cuadrados rojos y negros, junto a una playera roja con líneas horizontales negras.
Era básico, pero sería aquella con la que entraría en su cama con aquella revista aún con la envoltura sobre ella; justo como Fred y George le habían indicado hace un año, se tapó con su sábana para abrir el envoltorio y mirar por primera vez lo que era aquella revista.
Apenas lo hizo observó la primera plana, era una... ¿mujer? ¡Si, una mujer adulta! Aquel retrato de la cara de una mujer con vestido rojo y mirada rara la hizo confundirse. ¿Acaso ella había escrito la revista?
Pero apenas la abrió, deseó con toda su alma nunca haberle comprado nada a aquellos dos fotocopias, deseó nunca haberle hecho caso a Ron, deseó nunca haber abierto la primera página; aquella donde mostraba literalmente la fotografía de varias mujeres denudas.
Sin dudarlo gritó asustada, aventando la revista al suelo, pero en aquel momento también la puerta fue abierta-
Jean: Alarik, la cena esta...
-Al ver la cara de terror de Alarik, Jean se confundió, no fue hasta que vio su mirada al frente y la mujer llevo su vista a lo único que había tirado en aquella zona-
Alarik: ¡No¡ ¡Jean, eso...
-Pero fue muy tarde, Jean ya había agarrado la revista y se sorprendió al mirar de que se trataba. Alarik anhelaba en ese momento que el calamar gigante de Hogwarts llegará por la tubería de su baño y la llevara lejos-
Jean: Alarik. -murmuró-
Alarik: ¡Te juro que no las vi!
Jean: Por Dios. -suspiro en shock-
-Para Jean, aquello era aquella señal verde que esperaba nunca llegará a pasar. Para Jean, Alarik empezaba a mirar a las niñas de otra forma, su cuerpo estaba cambiando al igual que su mente y entonces en su mente solo estaba Wendell, él debía ayudar con aquella situación a Alarik, darle aquella platica.
