Casa Granger-
-Que todo mundo hablará sobre la relación de Alarik y Hermione tenían es algo que sin duda no les preocupó a aquella pareja, y menos después de saber que al día siguiente debían volver a casa.Después estarían dos meses sin saber de Hogwarts, así que... ¿para qué preocuparse? Preferían pasar el rato como habían querido desde invierno, juntas, como dos tórtolas que tenían años sin verse, y así lo hicieron.
Cuando abordaron aquel Expreso de Hogwarts que las regresaría a Londres, estuvieron junto a Ginny y Harry, quienes no dejaban de molestarlas al darse cuenta de que el señor y la señora Granger serían padres y suegros a la vez, era raro, pero así era.
Hermione solo reía al saber que era cierto, mientras que Alarik solo decía que al menos el tema de los suegros no era algo de lo que debía preocuparse, al final de cuentas eran sus padres adoptivos y ya se conocían.
Todo el viaje, Hermione y Alarik se dispusieron a abrazarse o a leer, aunque al final de cuenta fue Alarik quien se terminó durmiendo en el hombro de la castaña.
Y al llegar a casa, ambas estaban tan emocionadas por mencionarles a Wendell y a Jane sobre su relación, pero por obra del destino, ambos padres las mandaron a tomar una ducha, ponerse sus pijamas y bajar apenas terminaran para cenar en familia.
Y así lo hicieron, cada una en su baño y a su tiempo. Cuando Hermione bajo las escaleras se dio cuenta de que Alarik ya estaba junto a sus padres, quienes estaban sirviendo la cena en el comedor-
Alarik: Pulgita, hasta que bajas. -sonrió divertida-
Hermione: Perdón, me puse a leer un poco y perdí la noción del tiempo. -sonrió avergonzada-
Alarik: ¿Por qué no me sorprende? -rió bajo-
Jane: Alarik, deja de molestar a mi pequeña Hermione. -sonrió llegando a ellas- Y tu, Hermione, ayuda a mi bebé con las tazas.
Hermione: Con esa actitud es difícil saber a quien prefieres, mamá. -sonrió divertida-
Jane: Las quiero por igual, hija. Siempre será así.
-Hermione asintió mientras veía a su madre regresar una vez más al interior de la cocina. Eso mientras Alarik se acercaba a su lado con una sonrisa burlona-
Alarik: Me dijo bebé, es obvio que me prefiere más a mi que a ti. -le susurró-
Hermione: Ya quisieras, Black. -sonrió burlona- Yo soy su pequeña.
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A MIS OJOS, TU ERES - G!P
FanfictionTodo comenzó aquella mañana de agosto, cuando el señor y la señora Granger habían tomado una decisión que cambiaría la vida de Hermione no sólo para evitar dejar de sentirse sola y excluida del resto de los niños, sino que también habían adoptado a...