C. 24 : Odiar
-H-Hola...-musité, sin dar crédito a mis ojos.-Hola-respondió ella sin dejar de sonreír-. ¿Qué hacés acá? ¿Viniste con Franc...
-No.
¿De dónde había salido aquel no? ¿Por qué había sentido tal inmediatez para informarle que no había venido acompañado?
-Eh, en realidad ella no está en la ciudad. Se fue a La Plata a recoger un par de papeles y documentos, no regresa hasta mañana.
Violetta asintió a esto. Y yo no podía despegar la mirada de las cicatrices delineadas en sus muslos.
-¿Y-y tú?-indagué, deseando también saber si ella venía con compañía.
-También estoy sola...-ésta agachó la mirada, sonrojada por mi presencia-Cada mes tomo una noche para salir, dejo a Ariana con mi papá, me olvido de mis problemas...En fin, pensaba invitar a alguien también, pero...simplemente no se dio.
-¿No se dio?
-No-enunció, mirándome por el rabillo del ojo.
-Entonces-sonreí yo-, ¿estaría bien si te invito un trago?
Violetta levantó la mirada.
No esperaba tal invitación.-Sí, estaría bien-sonrió ella ampliamente, con la vista perdida-. ¿Estaría bien si yo lo acepto?
***
-Vaya, me sorprende como aquellos cuarenta y cinco minutos se tornaron en tres horas...Extraje mi celular del bolsillo, las trece para las dos. Era tarde.
La chica se me adelantó al paso, y justo ahí, en medio de una solitaria calle, contemplé la belleza de una mujer perdiendo el equilibrio con sus propios zapatos altos.
-Deja que te ayude...-mencioné, tomándola de los hombros, evitando que azotara contra el suelo-¿No prefieres quitarte los tacos? Podrías torcerte el tobillo.
-No me importa-rió ella con genuinidad. El alcohol corría con toda presión dentro de sus venas. Y era hermosa la simplicidad que le causaba esto.
-¿Tienes frío?-tartamudeé, yo tampoco estaba del todo bien. Pero me parecía que la toxicidad le afectaba más a ella que a mí.
-Sí...-vaciló, hablando entre el hipo. Esto último le causó más gracia aún y comenzó a reír incontrolablemente.
Me desprendí del abrigo largo y marrón que tenía puesto, y se lo coloqué a ella en la espalda. Parecía todo sacado de una escena romántica de una película de los sesenta.
La noche arrullándonos.
La luna resplandeciendo.
Y dos individuos confundidos y desorientados que sentían cariño mutuo.-Vilu, ¿puedo hacerte una pregunta?-esbocé irrumpiendo nuestro silencio, sosteniéndole del brazo para que no perdiera el rumbo.
-Ya me hiciste una.
-Vaaale, ¿puedo hacerte otra pregunta?
-Acabas de hacerla también...
-Basta.
-Bueno-sonrió con afabilidad-. Desde ahora tienes permiso para hacerme las preguntas que desees.
-Que alegría-entorné los ojos. Me estaba volviendo loco, de todas las maneras posibles-. Bueno, lo que quería preguntarte era...¿por qué dudaste sobre estar nosotros dos en el bar?
-¿Eh?-masculló, volviéndose a mí y perdiendo el equilibrio nuevamente.
-Sí, cuando saliste del baño...
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Novela Diego - Ser quien soy 2da Temporada
FanfictionDiego y Francesca, juntos desde hace 3 años, su vida no podría ser más maravillosa. Pero cuando Violetta Castillo regresa a la vida de ambos, es capaz de destruir todo su futuro como pareja. Y Diego sabe que aún no ha dejado de pensar en ella. Diele...