Cute and clumsy alpha ❁ HyunIn

♡ : CAPÍTULO XXIII

Esa, había sido la semana más larga desde que Hyunjin tiene memoria.

No había día en que no intentara hablar con Jeongin. Este siempre lo esquivaba o no se separaba de Félix ni de Chan, quienes lo fulminaban con la mirada de solo intentar acercarse.

No tenía idea de lo que había pasado y se sentía pésimo, trataba de encontrar alguna lógica a por qué Jeongin se comportaba así y no la había. Hasta donde él tenía entendido un día estaban muy bien, Jeongin estuvo muy cariñoso y le dijo que se alegraba de tenerlo cerca y al otro ya no le hablaba.

En ese momento, Hyunjin se encontraba revisando que todo estuviera en su bolso, ya que ese fin de semana lo iban a pasar junto al lago 192 en una especie de campamento.

Hyunjin odiaba los campamentos, odiaba la naturaleza, la humedad, los mosquitos, acampar. Sentía que para algo se avanzó con la tecnología y no entendía la razón para querer volver al bosque donde sus antepasados lobunos se habían criado.

Minho y Seungmin estuvieron muy cerca de él esos días. El primero haciéndole entender que quizás Jeongin no estaba pasando por un buen momento o estaba intentando procesar algo alejado de él. Y el segundo, diciéndole que lo mejor sería avanzar y dejar atrás sus sentimientos por el omega.

Para Hyunjin esa ni siquiera era una opción, no sin antes intentar hablarlo al menos. Pero había que admitir que se encontraba cada vez más triste y su lobo se sentía cada vez más miserable, haciéndolo sentir mal físicamente.

Minho pasó por él ese día como le había prometido para ambos ir al instituto, donde esperarían al autobús que los llevaría hasta el lago que estaba a un par de horas de la ciudad.

Era un viernes muy temprano, aún ni siquiera salía el sol, por lo que Hyunjin se despidió de sus madres aún dormidas y tomó su bolso para irse al instituto junto al alfa.

Al llegar al instituto, había varios estudiantes de último año esperando a que el autobús llegase. Hyunjin vio a Félix y Jeongin charlando a la distancia y se alegró cuando Minho dijo para ir con ellos.

Nuevamente tuvo la esperanza de al menos poder cruzar algunas palabras con el omega, con quien no compartía nada desde hace días. Comenzó a caminar un poco emocionado hacia ellos, pero Jeongin en el instante en que vio a Hyunjin acercarse se alejó rápidamente en dirección contraria.

El lobo de Hyunjin lloraba, le insistía en que hiciera algo y no deje a su omega estar así de distanciado.

Para el alfa era insoportable estar tanto tiempo lejos de aquel aroma que tan loco lo volvía. Necesitaba tanto sentir a Jeongin cerca, era como si una vez que pudo tocarlo y abrazarlo, ya se había vuelto automáticamente como una droga para él, se hizo dependiente y necesitaba tenerlo cerca todo el tiempo.

Y Jeongin no se lo permitía. No podía acercarse en contra de la voluntad del omega tampoco, por lo que se mantendría al margen siempre y cuando así él lo quisiese. Simplemente respiraba el aire que algo del aroma del omega guardaba y se esforzaba en que eso traiga algo de alivio a su lobo.

—Hola Hyunjinnie, ¿traes tu carpa?— pregunta Jisung sacándolo de su ensoñación.

—¿Qué? ¿No la iba a traer Min hyung?— pregunta alarmado y tanto Minho como Jisung se ríen.

—Si, tranquilo. Solo quería cambiar tu mirada triste.

—Ya... —dice Hyunjin haciendo una mueca y mira desde la distancia a Jeongin, quien estaba solo a un costado sin siquiera mirar en su dirección.

—Escucha, todo va a mejorar ¿sí? Tendrás muchas oportunidades para hablar con él.

Hyunjin solo asiente, aunque para ser sincero, no le creía. Toda la semana Jisung estuvo tratando de hacerle creer que pronto hablarían y tendría tiempo de decirle a Jeongin lo que sentía. Pero no pasaba, el omega se alejaba más y más y Hyunjin ya no creía que le correspondería algún día.