♡ : CAPÍTULO XXXVIII

159 15 0
                                    

A la mañana siguiente, Jeongin se despierta con los dulces besos de su alfa, quien estaba abrazándolo fuertemente con todas sus extremidades.

Aunque a esa hora de la mañana, los besos no eran considerados del todo dulces, sino más bien molestos.

Su humor no era el mejor de todos y empuja su rostro mientras gruñe para que deje de molestarlo, dándole la espalda.

—Tenemos que levantarnos.— le murmura Hyunjin tratando de voltearlo nuevamente, pero Jeongin se resiste.

—Si...— le dice Jeongin para que se vaya, sin embargo, no se mueve ni un poco para levantarse de la cama.

Hyunjin se ríe y toma a Jeongin por la cintura obligándolo a que este se levantara.

—Te dejé dormir más de la cuenta. Si no te apresuras no vas a desayunar y llegáramos tarde.

Eso despierta a Jeongin inmediatamente, ya que recuerda que quería ir temprano al instituto para hablar con Félix sobre lo que sea que quería contarle el día anterior.

Obliga a Hyunjin a soltarlo y toma el teléfono para ver la hora. Nota que tenía que estar en el instituto en quince minutos si quería tener tiempo antes de su primera clase.

—No puedo desayunar. Tengo que ir con Félix.— dice Jeongin comenzando a juntar su ropa rápidamente para irse.

—¿En serio?— pregunta preocupado el alfa —me hubieras dicho así no te dejaba dormir tanto. No puedes ir sin desayunar.

—Tranquilo, me compro un banana milk y galletas en el camino.

El alfa no muy convencido asiente y deja a Jeongin cambiarse y arreglarse.

Jeongin obliga a Hyunjin a acelerar los pasos de camino al instituto, tan solo tendrían unos minutos para hablar con Félix y lamentaba mucho no haber puesto una alarma más temprano.

El día anterior en su casa había estado un poco con la mente ausente y Jeongin se dijo a si mismo que al día siguiente escucharía todo lo que su amigo le contara por más tontería que fuera.

Se despide de Hyunjin en la entrada y Jeongin corre hasta el aula donde debería estar Félix.

Se detiene en la puerta del aula tratando de calmar un poco la respiración y antes de dar un paso en el interior.

Escucha unos sonidos raros y cuando se asoma nota que Félix y Chan estaban comiéndose la boca nuevamente.

Jeongin resopla, debió imaginarse que sería el único preocupado por Félix. Seguro estaba todo bien y solo quería contarle algún chisme como se lo dijo. Decide quedarse junto a la puerta para vigilar que nadie se aproximará mientras aprovecha en tomar su banana milk.

Tiene que ignorar lo máximo que puede los sonidos extraños que provenían de los dos alfas allí dentro, además de la mezcla de aromas y el claro ambiente a excitación que se sentía en el aire.

—Lix, muero por vivir contigo—escucha a Chan decir.

Eso lo hace sonreír enternecido, disfrutaba mucho saber que se querían así de mucho y que pronto estarían mejor.

—Falta menos...— ambos vuelven a besarse y a hacer sus cosas y Jeongin con un poco mejor humor se dedica a terminar su leche.

Suponía que el chisme sería bueno, viendo lo bien que ambos se encontraban.

El que hayan compartido tienda y vivido juntos por todo el fin de semana les había asentado bien y Jeongin de verdad, desde el fondo de su corazón deseaba que siempre fuese así entre ellos. Sabía lo mucho que su amigo amaba a ese alfa.

—Solo queda un mes. Un mes y seremos libres

—Si... ¿tú ya reservaste el departamento?

—Si amor. Igual, si quieres esperar un poco...

—No, en un mes terminamos el instituto y está bien si nos mudamos ya. Así nos acomodamos bien antes de la universidad.

Jeongin estaba sonriendo y casi saltando de emoción. Así que ese era el chisme, se moría por escucharlo desde la emoción de Félix.

—¿Estás bien con eso? Con empezar la universidad en otro lugar.

—Claro que sí. Solo que todavía no hablé con Jeongin...

—Jeongin entenderá, no es el fin del mundo que vayas a una universidad distinta.

—Si...

Jeongin no sabía si intervenir en ese momento o esperar un poco más. Por supuesto que no se molestaría. Félix y Jeongin siempre hablaron de ir juntos, pero si no era así, ¿qué importaba? Ambos tenían pareja ahora, era más claro para Jeongin pensar que sus caminos no siempre estarían así de juntos.

Quizás no se verían todos los días como ahora, pero seguirían así de juntos, podrían verse los fines de semana o entre semana las veces que podían. Félix podría seguir pasando por su casa y durmiendo con él cada vez que quisiera.

—Si... Jeongin tiene a Hyunjin ahora. Él lo cuidará.

—Claro que sí, Hyunjin lo quiere mucho y cuidará bien a nuestro pequeño.

Sentía que iba a llorar de la emoción en ese momento. Que sus amigos hablen así de él y Hyunjin... era increíble.

—¿Estás bien Lix? Pareces que quieres llorar.

Escucha un sollozo de parte de Félix y luego este comienza a hablar con la voz cortada —No te imaginas cuanto me duele pensar en que no voy a tener a Jeongin cerca.

El omega moría de ternura desde la puerta. ¿En serio era tan dramático? Aunque tenía que admitir que en ese momento moría de ganas de abrazarlo y de llorar como bebé también por lo mucho que lo quería.

—Lo sé amor, lo sé. Lamento mucho eso, pero piensa en Hong Kong, allá el matrimonio entre alfas es legal, podremos casarnos, podremos ser libres ¿entiendes?

¿Hong Kong?

—Si...— Félix continuaba llorando y lo escucha suspirar —eso será increíble. Jeongin entenderá.

Jeongin sintió un golpe muy fuerte en su pecho. Su lobo aulló de dolor y se retorcía en su interior.

Nunca había sentido un dolor tan grande, ni cuando su padre se había ido.

—¿Le dirás hoy?

—Si. Le voy a preguntar si puedo dormir con él esta noche y ahí se lo voy a decir. Solo espero no llorar, quiero que me vea bien y entienda por qué quiero esto.

—Lo entenderá.

Por supuesto que no lo entendía, Félix y él son inseparables, no podrían vivir solamente viéndose una o dos veces al año con suerte.

No podía, no podía ser cierto.

Se aleja lo máximo posible de allí, tratando de respirar como podía, debido a que la presión en el pecho no lo dejaba concentrarse siquiera en caminar.

No quería seguir escuchando.

No podía, no podía...

—Jeongin— siente el aroma de Hyunjin y sabe que es él quien lo toma por los hombros sin levantar la cabeza —¿qué pasó?

Jeongin solo negaba con la cabeza, no podía, no iba a decírselo.

—No pasó nada.

—Sé que pasó algo, lo sentí. Por favor, dime que...

—Quiero estar solo Hyunjin.

El alfa toma su rostro para unir sus miradas y luego de unos segundos asiente. —te amo, avísame cualquier cosa.

Jeongin suspira y asiente, para luego irse junto al árbol.

Cute and clumsy alpha ❁ HyunInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora