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Betty

Juggie me ama.

Estabamos los dos sentados con papi, uno en cada pierna de él, coloreando un libro de Mini Einsteins.

Juggie me dio el crayon rojo, y eché un vistazo a su lado de la página. No se había salido ni un poquito de ninguna línea, y yo sí. Yo me salgo mucho. Eso me puso un poco triste, desearía colorear tan bien como él.

Mi rostro debe haber mostrado como me sentía, porque él intentó consolarme.

-Eres muy buena pintando, Betty.

-No lo soy, soy desprolija.

-No digas eso -insistió- pintas muy bonito.

-No me mientas. Tú pintas muy lindo y nunca te sales de las líneas, y yo sí. Intento pero no me sale.

-Quizá no te sale porque debes practicar un poquito más y ya. Todos aprendemos distinto.

-Mi otro papá me decía que si me salgo de la línea está mal.

Papi interrumpió.

-Tu otro papá no tiene idea de la increíble artista que eres ahora. Mira -señaló mi dibujo que estaba pegado en la nevera- eres la mejor haciendo autoretratos. Estoy seguro de Frida Kahlo se sentiría celosa.

-¿Quién es ella?

-Una señora que hacía autoretratos -respondió Juggie- porque no podía caminar.

Papi asintió poco convencido.

-Sí, mas o menos.

-¿Qué es autoretrato?

-Un dibujo de ti misma.

-Yo hice eso -sonreí-

-Si, mi princesa -dijo papi acariciando mi cabello- y te ves preciosa en él.

-Gracias -dije moviendo mis pies adelante y atrás-

Olvidé por qué estaba triste, y en ese instante el teléfono sonó.

-Cariño ¿Puedes ir? -Papi llamó a mamá-

Ella entró a la cocina y atendió el teléfono.

Su rostro cambió, como si tuviera miedo, o estuviera enojada.

Tal vez ambas.

-FP, es para tí.

-Abajo, pequeños.

Nos separamos de él, parándonos, y fue hasta el teléfono para tomar la llamada tras dejar un beso en la mejilla de mami.

-Un segundo. Chicos, vayan a arriba, porfavor.

Mami nos llevó con ella al cuarto de Juggie, en donde nos sentamos en la cama en silencio.

Algo era raro.

-¿De que habla papi?

-No lo sé, Betty.

-¿Por qué?

-Porque no lo sé.

Bufé, y nos quedamos ahí hasta que papi entró.

-Jug, ven conmigo, necesito que hablemos de algo.

-¿De qué?

-Ven.

-Pero dime de qué.

-Es sobre tu mamá.

-¿Por qué?

-Porque debo decirte algo importante.

-¿Qué cosa?

Él suspiró.

-Campeón, vamos.

Juggie se paróy caminó hasta él.

-Cariño -mamá lo llamó- ¿Está todo bien?

Él negó con la cabeza.

Juggie y papi se fueron, y pude ver la preocupación en el rostro de mi mamá.

-¿Qué está pasando, mami?

-No lo sé, mi amor.

-Tengo miedo.

-Tranquila -me calmó, abrazándome- nada malo va a pasar. De seguro Juggie y su mamá tienen que hablar sobre algo.

-No quiero que ella lo ponga triste de nuevo.

-No lo hará, de seguro ya pensó un poco mejor en lo que hizo, y se arrepiente.

-¿Eso crees?

-Sí.

-Ok. Te creo.

𝑾𝒉𝒆𝒏 𝑰 𝑮𝒓𝒐𝒘 𝑼𝒑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora