mirror ー p. chanyeol

twelve

Una vez llegamos a la casa, Chanyeol se dirigió al baño de mi habitación sin siquiera y se sentó en la tapa del baño. Colocando todo lo que había comprado sobre la mesa de mi lavabo. Me asomé a la puerta para ver lo que hacía,

—¿Puedo ayudar en algo? —Le pregunté con preocupación.

—Estoy bien... —Dijo el, mientras hacía una mueca cada vez que movía el brazo. Era obvio que le dolía, y también que no podía hacerlo solo,

Pero aún así me quedé parada, mirándolo. El tomó los bordes de su suéter color gris y con un poco de trabajo, pudo quitárselo así podía ver sus heridas. Dejando solo a la vista su torso desnudo. Madre santa. Sus brazos eran fuertes, su pecho estaba bien definido y el abdomen estaba trabajado. No era que me importara el físico, porque viéndome a mi, no tengo gran cosa. Pero, no veía a Chanyeol como ese tipo de chico que portaba ese cuerpo.

—Así es, disfruta de la vista mientras es gratis. —Se quejó mientras se reía. Tomó el anti-inflamatorio en aerosol para rociarlo sobre todo su hombro—. Mierda... —Jadeó con irritación, mientras cerraba los ojos.

Me sonrojé y deliberadamente iba a dar la vuelta para irme de allí.

—Sora. —Llamó Chanyeol dando un suspiro.

—¿Si? —Dije volteando a verlo.

—¿Puedes ayudarme? —Preguntó el mirándome a los ojos.

—¿Y-yo? —Pregunté, confundida y nerviosa.

—Al menos que haya otra persona en este baño. —Dijo el siendo obvio.

—Claro, supongo. —Dije mientras me acercaba y tomaba las gasas y vendas. Empecé a colocar las gasas sobre las heridas, luego de revisar de que estuvieran limpias. Tomé la venda y empecé a rodar el hombro y espalda de Chanyeol, justo cómo me habían enseñado en mi clase de primeros auxilios—. Por salvarme de aquel accidente... —Dije mientras había terminado—. Gracias.

—De nada. —Dijo el mientras me miraba dando una sonrisa. Sonreí devuelta, pero se escuchó una puerta cerrar, que transformó mi rostro al pánico.

—¿Sora? —La voz de Baekhyun se escuchó en el pasillo.

Quería salir del baño, y así poder aparentar de que nada sucedía pero la puerta se estrello delante de mis ojos. Volteé a mirar a Chanyeol quien me dio una mirada divertida, mientras me veía entrar en pánico. El agarró mi brazo y me hizo estar cerca de el, pude entonces escuchar cómo la ducha se abría empezando a caer agua de esta.

—¿Qué estas haciendo? —Pregunté algo aterrada, y en un susurro.

—Estoy tomando un poco de diversión. —Dijo él mientras daba una sonrisa.

—Qué? —Dije con confusión.

—Oh mi Dios, Sora. —Fingió gemir fuerte.

—¿Qué? —Iba a decir algo más pero, el trato de no reírse de mi expresión. Cubriendo mi boca con su mano libre.

—Más rápido, más rápido. —Chillo el disfrutando ver mis caras tratando de zafarme de su agarre. Quitó la mano de mis labios mientras se reía.

—¡Chanyeol! —Le grité desesperada.

Se escuchó el fuerte azote de una puerta, el cual correspondía a mi habitación. Cuando Chanyeol decidió al fin soltar mi brazo empezó a reír con ganas. Mire mi mano y esta se encontraba con las marcas de su agarre. No que me había hecho daño, pero yo solo era fácil de hacer marcas.

—Kinky, —Señaló.

—¿Estás loco? —Pregunté exaltada.

—Me gustaría que hubieras visto su rostro, en serio. —Dijo el mientras volvía a colocar su suéter cuidando no lastimarse. El se paró y quitando su coleta para luego peinarse su pelo nuevamente, dejando parte de su pelo suelto.