seventeen

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Taehyung se movió en su bicicleta para quedar justo junto a Solji. El sostenía una paleta dentro de su boca, sacándola y sosteniéndola entre su dedo indice y pulgar, apuntándola con esta a Solji mientras daba una sonrisa burlona.

—¿Qué? ¿No puedes decir nada al respecto? —Se refirió a Solji, la cual su mirada se hizo neutral y seria al respecto—. Eso es. No debiste decir nada desde un principio. —Le guiñó un ojo y coloco el chupetin en su boca.

—Mejor vámonos. —Dijo Chanyeol tomando mi mano llevándome en dirección contraria.

—Sora. —Llamó la voz de Taehyung. Lo miré y el me sonrió—. Usaré tu número luego. —Aviso para luego empezar a pedalear su bicicleta como ya está acostumbrado.

Y fue ahí donde empezamos a correr nuevamente, intenté no reírme mientras lo hacía, o mi estómago iba a lamentarlo. Chanyeol al igual que yo se reía, mientras corríamos, me di cuenta como resplandor del sol hizo que viera el color real de su pelo. Era un color negro. Un color negro cómodo de esos de los comerciales de tintes. Y era raro porque su tonalidad al principio era castaña.

—¿Que estas mirando? —Preguntó el mirando mi mirada confusa. Reaccione a la realidad y aclare mi garganta.

—Nada. Solo, que...creo que una paloma te cago. —Dije nerviosa. ¿Eso se te pudo ocurrir?

El rió y acarició mi pelo como si fuera un perro.

—Lo hiciste bien. —Dijo el mientras daba una sonrisa.

—¿Eso crees? —Lo miré a los ojos, el de una manera u otra desvío la mirada de mi y empezó a subir la calle. Él se notaba extraño e incómodo.

—¿Quieres dar otra vuelta más o prefieres volver? —Preguntó el, con curiosidad.

—Quiero cortarme el pelo. —Le dije con algo de decisión. El volteó a mirarme.

—¿Por que? —Preguntó el extraño.

—Creo que estoy lista para cerrar este ciclo. —Le respondí—. Usualmente, las mujeres nos cortamos el pelo cuando estamos listad para superar una relación o olvidar a una persona.

—Bien, estas loca. —Dijo negando la cabeza con una cara de confusión—. ¿Crees que eso es posible? Olvidar a alguien solo cortándose el pelo...

—Chanyeol, tu saliste de un espejo. Le vendí mi alma a una cosa de otro mundo, creo que todo es posible. —Admití, sintiendo aceptación al respecto.

—¿Quieres cortarte el pelo? Bien, córtalo. —Asintió, estando de acuerdo.

—Tu también deberías cortarlo. —Le dije.

—¿Por qué? —Preguntó curioso.

—Haz acabado con todas mis gomas. A menos que me compres nuevas... —Le dije con tranquilidad. El se rió y me miró.

—¿Quieres que lo corte? —Preguntó el con normalidad. Parecía como que haría lo que yo le pidiese.

—No tienes que hacerlo, puedes cortarte las puntas y...

—Dame tu propia opinión... —Pidió con normalidad.

—Si, córtalo. Sé menos llamativo si vas a quedarte. —Dije ya, desesperada al respecto.

—No voy a quedarme... —Lo miré rápido al escuchar eso—. No voy quedarme. Justamente me iré cuando Byunhyun se enamore de ti.

En todo el camino, no me había dado cuenta que había llegado al salón de belleza. Apreté mis labios, mientras tomaba la manija en mi mano.

mirror ー p. chanyeolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora