Blaugrana - Pablo Gavi.

29. Barca vs Bilbao.

|En relación|

— Claro, pero... No lo sé si seguimos mirando hacia allí lo más probable es que te mueras.

— No exageres ¿Para qué seguís con el pantalón si tanto te aprieta?

— Es cómodo. — divagó, acostándose mejor en la cama.

Del otro lado de la línea se podía ver a Pedri buscando confort en las sábanas. Sonrió, Pedri parecía un comedor de gente, parecía un desquiciado con esa barba tab larga.

— Lindas sábanas, Pepi. — le dijo, dejó el celular puesto en la esquina del mesón y se fue a buscar algo en la heladera.

— ¿Qué hacéis despierta si son las dos de la madrugada? — preguntó, se acercó el celular a la frente.

— Hacer algo de comer por que tengo hambre — hizo un puchero — ¿Puedes creer que Alejandro Félix Pedri Richarlison todavía no se manifiesta?

— ¿Como manifestarse?

— No crece, sigo igual... — Janna sacó los pedazos de jamón, comiendolos mientras prendía el agua.

— Qué bien... — Pedri se encogió de hombros.

— Mañana o hoy más tarde, quiero ir al partido ¿vas conmigo?

— Sí, creo que voy con los chicos.

— Yo voy con Vianell.

— ¿Quien es Vianell?

— Una amiga — le sonrió a Pedri y se agachó para alcanzar los platos.

— ¿Amiga? ¿Amiga mujer?

— Sí, mujer..

— Wow... Qué milagro.

Janna entrecerró los ojos en su dirección.

— Los únicos amigos que te conozco son hombres en su mayoría, bueno, en su mayoría no, todos son hombres.

— ¿Y?

— Desde un principio pensé que eras lesbiana...

— ¡Asco! — bramó — Que asco, no me gustaban las mujeres, por Dios.

— Entiéndeme, pasabas todos los días metida en los entrenamientos... Discúlpame pero perdóname. — Ella rodó los ojos mirando otra vez a la pantalla de su celular — Está llamando Ferrán, déjame lo uno en la llamada.

— ¡Come plátano! —vocifereó el gallego entrando a la llamaba.

— ¡Tiburón!

— ¡Banana!

Janna reía al escuchar los gritos de Ferrán por el celular, el tiburón no paraba de cantar, traía puesta una gorra y una cobija de tiburón.

— Esa cobija es linda.

— Tengo miles de estas, puedo regalarte una... Pero no para que folléis encima de ella con Pablo.

— ¿Qué hacéis despierto a esta hora, Ferrán? — Preguntó Pedri, más como un regaño — Mañana tenéis partido, duermeeeeee.

Empezaron a discutir ambos, uno por que tenía que ser responsable y el otro por que tenía complejos de papá regañón.

••••••

— Vamos Vianell, que joda que te pones — exhaló aire por su nariz. — Voy a llegar tarde... Muévete.

— Ya no voy — salió por la puerta de su habitación con la misma pijama que hace tres días. — No voy ¿y si veo a tu amigo? Que vergüenza, yo mejor me quedo.