CRYMUA | Tomatitos y otras formas de encontrar a tu destino

Capítulo 1: Sé pacífica

Y ahí estaban, detrás de una pantalla, aparentemente a salvo pero con la mirada de un millón de personas encima de ellos... Edward y Yeri.

Los nervios a flor de piel y el estrés apoderándose de sus cuerpos. ¿Cómo habían llegado ahí? Por más que lo pensaran nada tenía sentido, eran de mundos diferentes, con personalidades diferentes, gustos diferentes... Es que incluso tenían nacionalidad diferente pero, ¿cómo es que estaban ahí juntos? Era una locura.

Se miraron un momento y entonces lo supieron... No podía ser otra cosa, era el destino.

Existen historias poco confiables sobre el destino, el hilo rojo, las vidas pasadas, las almas gemelas, las llamas gemelas, blah blah blah, muchas cosas difíciles de creer y claro, imposibles de comprobar, pero si existía realmente una unión mágica, era la de "crymua", las posibilidades de que esos dos se conocieran eran menores al uno por ciento y se encagaron de que se hiciera realidad.

La primera vez que Edward supo sobre Yeri Mua fue bastante común, es decir, ¿qué tanto impacto podría causarle una chica de internet metida en polémicas nada agradables?

- ¡Já! Otra vez metida en polémicas ésta chica... - Mencionó Edward con diversión mientras veía su celular y descansaba sobre el sofá de su mejor amigo.

- ¿Quién? - Preguntó Pipe sin interés particular, mientras se encargaba de preparar palomitas de maíz en la cocina.

- La "Yeri Mua".

- No inventes, ves puras pendejadas.

- Me da contenido, voy a hablar de ella en mi próximo stream.

- Ya wey, suéltala, ni te topa. ¿Vas a querer palomitas o me las como yo solo?

- Espera, guardo el vídeo.

- A ver... - Pipe se sentó a su lado y miró la pantalla. Lo único que pudo ver antes de que Edward bloqueara la pantalla fue no uno, sino varios vídeos de Yeri Mua. El ojiazul definitivamente tenía una extraña obsesión con criticar a la diva de internet pero decidió ignorar eso pensando que tal vez, era el último intento de su amigo por conseguir seguidores en su canal.

No les había ido tan bien últimamente y planeaban alejarse de redes sociales si no mejoraban esos números en la pantalla. La gente se creía que era fácil ser streamer pero la verdad era que no. Cada día se esforzaban por encontrar nuevas formas de entretener a sus seguidores y a pesar de ello, sus números continuaban bajando mientras que, streamers famosos que continuaban con el mismo contenido, ganaban más y más seguidores. Era frustrante.

Mientras tanto, la vida de la mencionada "diva de internet" continuaba en un constante torbellino, con decepciones amorosas, infidelidades, inseguridad, desesperación...

La vida de Yeri tampoco era nada fácil, al contrario, todos los días debía lidiar con la mala fama que se había creado en redes, ¿y qué culpa tenía ella? Los seres humanos cometen errores, tienen traumas difíciles de superar y claro, también hieren a otros como consecuencia de sus propias heridas sin sanar. Eso cualquiera lo puede entender, ¿cierto? O eso es lo que se espera, sin embargo, en el mundo de internet no era así.

¿Una adolescente sufriendo maltrato por parte de un adulto varios años mayor? Ah, seguro que se lo merecía.

¿Estaba cegada por el amor? No creo, se ve que es una chica fácil.

¿Se aprovechaban de ella por su dinero? Bueno, debería agradecer que alguien le have caso.

Las personas, especialmente los "fans" y los "seguidores" que se ocultan detrás de una pantalla y tienen un teclado a su disposición pueden llegar a ser verdaderos monstruos con las chicas como ella, que teniendo una corta edad tuvo que vivir lo que muchos a una edad mayor no se pueden siquiera imaginar. Y ahí estaba ella, saliendo de otra polémica, aceptando su error y comenzandp de cero, con ayuda psicológica y psiquiatrica, planeando el lanzamiento de su primer canción oficial.

Por supuesto, de vez en cuando se recostaba sobre su cama rosa de princesa y miraba en la pantalla de su celular a un chico ojiazul que se hacía llamar Cry, hablando y hablando sobre ella, criticando, siendo parte de tantos otros que la juzgaban sin conocer toda la historia.

A veces, pequeñas gotitas saladas rodaban por sus mejillas, tomaba aire y cerraba los ojos para conciliar el sueño. Sabía que ya no podía seguir metiéndose en problemas y recordó que, tomarse de forma personal las críticas de otros, sólo le haría más daño.

Luego de lanzar su canción, mientras realizaba un vídeo en vivo, una de sus tantas seguidores fieles le mencionó el tema sobre el chico ojiazul.

Tan sólo ver "xCry" en la pantalla, sintió que el calor la invadía. Una sola palabra mal dicha y seguro que perdería seguidores una vez más, claro que no podía permitirse eso en pleno lanzamiento de su canción, así que se tranquilizó y tomó aire para hablar del tema de la forma más pacífica posible.

- Hay muchachito en internet que todo el tiempo hace vídeos hablando de mí, no sé si algún día había tocado el tema. El muchado pues está carita, está guapito, cae bien. - <Eso, Yeri, halaga al idiota ese para que no sospechen.> Pensó y continuó. - Éste muchacho dijo que la canción de Chupón estaba horrible, horrible en todos los aspectos, ni un solo comentario positivo al respecto a la canción. Lo que más me llamó la atención fue que dijo que la canción JAMÁS iba a sonar en un antro. ¿Y saben qué es lo más loco? Está sonando en los antros. ¿Saben? Ésta es la parte bonita de tener haters, que a veces te motivan a seguir echándole ganas. Él puede decir lo que sea, pero el público dirá.

Ese mismo día, fue a dormir con la esperanza de haber terminado con ese tema, que aunque había intentado ignorar, algo lo mantenía ahí, interfiriendo con su apenas escasa paz mental.

Había tantos que la critiban... Eso era cierto pero, ese chico se había metido con una espina en el dedo. Era un chicle en el zapato que no la soltaba, no la dejaba ir, no la dejaba continuar con su vida normal. Era extraño porque incluso sus propias fans lo mencionaban sin parar.

Después de algunos días, sin dejar de ver comentarios mencionando a ese chico, no pudo más con la curiosidad y lo buscó en redes. Se encontró con algo muy extraño... El chico había reaccionando a un clip de ella hablando sobre él y claro, encontró varios clips de Edward.

- ¿Le caigo bien?

- No soy tu hater, todo lo contrario, no, claro, su lover tampoco pero yo soy... Yo soy Cry.

- ¿Me lo parece a mí o no se lo ha tomado personal? ¿Qué está pasando? Atácame. ¿Qué es ésto? Ésto está siendo muy friendly, eh.

Yeri no pudo contener su sonrisa al mirar esos vídeos, ¿ese chico estaba loco? ¿Esperaba que ella lo atacara? Bueno... Tan loco tampoco estaba porque ganas de atacarlo no le hacían falta hace algunos días, pero ver su reacción sin duda la ayudó a ver que ser pacífica había sido la mejor elección.

Vio algunos comentarios bromenado sobre el típico meme de "Que vivan los novios" o "Un aplauso para ésta pareja que está enamorada". Le causaban tanta risa que se retorcía en su cama mientras continuaba viendo vídeos y claro, no durmió casi nada esa noche.

Por otro lado, Edward también veía todo el desastre que habían causado en tiktok. Se le veía apático a la situación, pero luego, volvió a ver el vídeo de Yeri hablando sobre él, estando a solas, sin la presión de sus seguidores por parecer cool o frívolo... Y también dejó escapar una pequeña sonrisa.

- ¿Guapito, dijo? - Susurró para sí mismo. - Estás loca.

Bloqueó la pantalla de su celular y dirigió la mirada al techo.

¿La había juzgado mal?