Papi Oso & Mami Ki. × ShowKi.

Sobre primer día, merienda especial y un cachorro emocionado.

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-¿Qué haces aquí?

El moreno dió un salto en medio de la cocina vagamente iluminada, casi haciendo un desastre en el mesón con lo que estaba haciendo. Se volteó para encontrarse con la pequeña figura de su esposo en el marco de la puerta. Se veía adormilado, su cabello todo desordenado mientras restregaba uno de sus ojos. HyunWoo casi se derrite por la ternura, su menor era simplemente adorable.

- Me has asustado, casi muero de un infarto, KiHyun.- Ignoró su pregunta, dramatizando más de la cuenta la situación solo porque quería hacer reír al contrario.

- Eres un tonto.- Se terminó por reír por sus ocurrencias. No tardó en ser envuelto por los brazos ajenos. Incluso fue cargado hasta ser sentado sobre la mesa.- ¿No deberías estar en el trabajo?

- Hoy no tengo que ir a la empresa.- Contestó con simpleza, dejando pequeños besos en los labios ajenos sin dejar de sostenerlos entre sus brazos.

- ¿Por qué no me lo dijiste antes?- KiHyun parecía indignado, pero no detuvo los besos del moreno.

- Quería sorprenderte y que fueramos juntos a dejar a MinHyuk en su primer día.- Explicó, sus manos habían abandonado su cintura para poder acariciar las abultadas mejillas del más bajo.

KiHyun hizo una mueca sorprendida, el realmente no se esperaba eso. Tampoco esa mirada embobada que le daba su esposo, como si intentara decirle cuando lo amaba a través de sus ojos. Le gustaba eso, pero a veces le avergonzaba y lo hacía sentir tímido.

- Es un lindo detalle.- Susurró cohibido, teniendo que bajar su mirada hacia sus manos en su regazo. HyunWoo soltó una risita por su actuar.

- Eres tan adorable, Kiki.- El mencionado iba a protestar por su comentario burlesco, pero el alto lo evitó uniendo sus labios en un lento beso.

KiHyun era demasiado débil ante el moreno, mucho más si usaba como armas sus besos. Enredó sus brazos en su cuello para tenerlo más cerca y sus piernas hicieron lo mismo en su cintura. HyunWoo lo volvió a cargar con facilidad, un brazo rodeando su torso, mientras la otra acomodaba sus piernas.

- Aún es temprano, podemos estar un rato más en la cama.- Cortó el beso para hablar, mas continuó dejando un camino de besos en todo su cuello que hacían suspirar al menor. KiHyun quería decirle que si, que lo llevara a donde fuera, pero que siguiera besándolo por favor. Pero algo en el mesón donde antes el moreno estaba le llamó la atención.

-¿Qué estabas haciendo, amor?- Sus ojos se paseaban curiosos por las cosas que habían sobre el mesón. El moreno lo volvió a depositar sobre la mesa para prestar atención a lo que señalaba.

- Quería preparar las meriendas de los niños en sus loncheras así como tu lo haces.- Se alejó para enseñarle una de las pequeñas loncheras que hizo. En un compartimiento tenía trocitos de manzana y plátano, en otro un poco más grande había lo que parecían ser dos ositos hechos de arroz y otros condimentos. Por último habían rollitos de queso y jamón. Todo estaba adornado con los mondadientes decorativos que el menor compraba especialmente para sus hijos, eso hacía que sus comidas fueran más lindas y les encantaba.

KiHyun veía enternecido cada detalle en la merienda que su esposo preparó para sus hijos, su pecho se llenó de una calidez abrasadora. Ese hombre era tan buen padre y esposo, y lo mejor es que podía regodearse con que era solo suyo. HyunWoo era su esposo y el padre de sus hijos, y nada iba a cambiar eso.

- Te quedaron muy bonitas, a los niños les va a encantar.- Entrelazó sus manos para volver a atraerlo a él. HyunWoo dejó la lonchera sobre el mesón antes de complacer a su esposo.