El conocerse en la universidad los llevo a unos bellos años de noviazgo. Ahora, HyunWoo y KiHyun por fin han. sellado su amor a través del matrimonio. Sus días se volvieron acaramelados, como ligeramente amargos. Sin embargo lograban mantener esa ca...
El hijo mayor de los Son se encontraba en el pasillo jugando con el autito que sus abuelitos le habían regalado. Le encantaba sentarse en el y andar por toda la casa haciendo soniditos de auto. Obvio, llevaba siempre al señor Esponjoso.
Como el verano estaba comenzando y hacía calor, KiHyun le había dado un helado de paleta sabor naranja luego del almuerzo. Su boquita se encontraba teñida de naranjo y algo manchada en las comisuras.
Su mami se encontraba ocupado en esa habitación con aparatos extraños y muchos papeles, donde el no debía entrar sin permiso de KiHyun.
Pero esa tarde se le tenía permitido, por lo que no dudo en entrar con su autito y acercarse hasta su mami Ki. Este estaba concentrado escribiendo en una hoja de papel, aunque detuvo todo para dejar un besito en el cabello de su hijo, limpiar su boquita y desviar su vista hasta el corralito del bebé, para luego seguir lo que sea que estaba haciendo.
Como no quería molestar a su mami, dirigió su autito hacia el corralito donde estaba su hermanito recién despertando de su siesta, sin dejar de comer su helado. Por entre los barrotes lo vio sonreirle adormilado y extenderle las manitos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-MinHyukkie.- Metió su manito desocupada por entre las barras de colores y acarició la mejilla del menor. Como había aprendido a gatear, con sus recientes siete meses, se acercó a su hermano hasta quedar frente a los barrotes. MinHyuk le extendía sus manitos, abriéndolas y cerrándolas. HoSeok pensó que quería tomar su mano, pero luego comprendió que su hermanito quería su helado.- No, Minmonggie, es mía. Los bebitos no comen helados.- Negó con su cabeza y alejó su paletita del alcance del menor, para luego comerse el último trocito que le quedaba.
MinHyuk formó un puchero y balbuceo molesto, pataleando. Como HoSeok sabía que su hermanito comenzaría a hacer un berrinche de grititos como los de los delfines, movió sus piernitas lo más rápido que pudo para salir de la habitación.
Al llegar a la sala se bajó de su carrito e hizo como que jugaba con unos autitos justo cuando el bebé empezaba a chillar.
Al poco rato salió KiHyun con un berrinchudo MinHyuk en brazos y se dirigió hacia su habitación.
HoSeok lo observó de reojo y en silencio para no ser delatado. Cuando ya hubo pasado su mami, se subió a su autito y se fue tras su progenitor.
Al entrar en la habitación pudo ver a su papá cambiandole el pañal a su hermanito, quien se había calmado con su chupete y su peluche de cachorro.
-HoSeok, cariño. Cuando terminé con esos papeles iremos a pasear, ¿Quieres?- KiHyun sonrió al ver la mueca de emoción en su hijo. Sabía que al niño le encantaba salir a jugar en los diversos juegos que habían en una plaza cercana.
