Capitulo 40: Nuevas esperanzas

8 1 0
                                    

Robert

-¿Una llamada?- dice José, con los ojos saliendo de su cara
-Una llamada...- digo sorprendido, la verdad es muy poco creíble.
-¡Dime por favor que tienes todo!- escucho los pequeños pasos apresurados de mi compañero.
-¡Corre!- se escucha la puerta asotarse al salir de la estación.

Buscamos su dirección, tocamos pero no había nadie y eso me desilusionó un poco, pero al enterarnos que el jefe volvió, nos devolvimos a la estación.

Escuchamos decir mientras tomamos algo de agua por el cansancio:
-Explícame- escucho seco, este hombre no tiene paciencia.
- La llamada fue alrededor de las 3 de la tarde; horas del secuestro, investigué desde los contactos a sus asistencias y no presentó ninguna, tuvo inconvenientes con los familiares años antes por medio de una academia de danza en el que asistía la niña, luego de esa denuncia simplemente sacaron a Abbi-
-No tienes suficiente para sentenciarlo pero si para deternerlo como sospechoso-

(Gracias a Dios)

Veo su media sonrisa y eso es afirmación suficiente, empecé a investigar y todo me está concordando, solo falta unir unos clavos y podré solicitar su detención.

Tomo café como loco, no he dormido en 20 horas y deseo darme un baño y dormir, pero solo falta un poco para...

RING RING...

(No puede ser)

-¿Sonya?- digo algo confundido.
- ¡Dime qué es verdad! Dímelo por favor- escucho muy claro por el otro lado de la llamada.
-Estoy en proceso...- no me gusta esto.

Escucho un llanto muy fuerte al otro lado del teléfono y me desespera un poco, necesito seguir investigando pero debo tener paciencia, no me alegra la idea de que ella vuelva a tener esperanza, a mi parecer es una madre que no tuvo muchas ganas de seguir buscando a su hija y me sorprende su idea de que la encuentre, apuesto a que ella no cree que esté viva.

Suena un poco inmoral porque no soy muy sensible en la idea de una muerte pero esta mujer me sorprende, que retome esperanzas a pesar de que se fue de vacaciones creyendo que su hija murió, bueno algo debe de tener como para aceptar a mi primo y aún así dormir con el siendo su amante, supongo...

Solo escucho como cuelga porque no le respondí otra pregunta, rápidamente apago el teléfono, necesito terminar con esto.

- Déjame recapitular- escucho José al entrar a mi oficina- a esa niña la inscribieron en una danza, un lugar lleno de instructores que velan por la seguridad y salud de esas niñas en mayoría ¿Cómo pudieron acosarla?-
- En la denuncia mencionaron que fue saliendo de esa academia- digo sin pensar, recordando todo lo que busqué y lo lejos que había estado.
- Ok, pero ¿No sé supone que ella la debían buscar en ese lugar?-
- Estoy casi seguro que la intetaron agarrar con Sonya al lado-
- ¿Su madre? ¿No es raro?-
-Puede ocurrir- (siempre existe una posibilidad)
-Entiendo....- dice pensando en la situación.
-Ahora que lo recuerdo...- busco el expediente- este tipejo tenía un historial criminal...- cambio la hoja y la consigo- tiene varias denuncias y lo arrestaron por violencia intrafamiliar-
-¿Tiene pareja?- dice perplejo.
- Tiene familia- lo corrijo.

Solo escuché la taza chocar sin quebrarse con la mesa, está molesto pero tampoco me importa mucho. Al ver las horas de la llamada era alrededor de la hora de la salida de Abbi, puede que alguien lo ayudara a saber cuándo saldría, pudo haber Sido un amigo de su trabajo, este hombre trabajaba de guardia en un club no muy lejos de aquí.

                                 Sonya

-Mi hija- digo con esperanza -¿Cómo puede ser posible que yo la haya abandonado?- me recuesto contra la pared dejándome caer al suelo -Mientras yo gozaba de playas y fiestas, mi hija estaba sufriendo- tapo mi cara con mis manos. -¿Cómo puede dejar que algo así sucediera?- quiebro en llanto al pensar lo mala madre que he sido.

Justamente entra mi esposo a la habitación donde nos quedamos, al verme en el suelo llorando corre a levantarme.

-¿Qué te pasa amor?- me pregunta muy angustiado.

Con las lágrimas en los ojos y el nudo en la garganta mis palabras se estancan, evitando poder hablar, solo le muestro el teléfono dejandole ver la llamada con Robert, el rápidamente entiende por donde va la cosa y simplemente me abraza.

-Ya ya amor, sé que es difícil de aceptar, pero ya habíamos hablado de esto, debemos olvidarla- dice sobándome la cabeza.
Sus palabras me frustran aún más -No... ella está viva todavia- digo entre llantos y gritos.
-No... ya no lo está-
-Él me lo dijo, dijo que ya saben quien fue el que la secuestró- espero que entienda un poco lo que le digo.
Despues de unos segundos de silencio él responde -¿Y?-
Su palabra me enfurece -¿!Y!? ¿!COMO QUE "Y"!? ENCONTRARON AL SECUESTRADOR DE TU HIJA Y ESO ES LO ÚNICO QUE DICES!?- grito muy enfada mirándolo con frustración.
-Y... ¿Y que harás cuando lo veas?-
-!MATARLO! !ES UN INSENSIBLE! !NOS QUITO A NUESTRA HIJA!-
-¿Ya se te olvidó amor?- hace tiempo tuviste esta misma conversación conmigo... pero yo estaba en tu posición- él me abraza aun más fuerte -No sirve para nada matarlo por lo que ha hecho, sé que él estado no le hará lo que merece, pero la vida si- Golpeo repetidamente su pecho -Sabes que la vida es buena para darte lo que mereces, así que por favor, no lo hagas-

Dejo de golpearlo para llorar en su pecho sintiéndome enfadada, segura y angustiada.

Después de unas horas nos acostamos en la cama, él me abraza como de costumbre y yo solo agarro su brazo que me entrelaza, sé que no debo relajarme pero lo más seguro es que mi hija ya... Ya no esté... Y tengo que aceptarlo, no puedo hacer nada al respecto.

-Si la hubiera cuidado mejor- digo entre murmullos.
-¿Qué?- Dice mi amado.
-Si la hubiera cuidado mejor, esto no hubiera pasado- aumento un poco la voz.
-No, no fue tu culpa- lo escucho entre susurros, tiene sueño.
-Pero si- soy interrumpida por él.
-No, ya deja de culparte, si fue tu culpa, también fue la mía, era nuestra hija... Mi gran amor... nuestro gran amor, lastimosamente fallamos como padres y esto fue nuestro castigo, se que no es fácil de aceptar pero ella no va a volver más, ya no está con vida y no hay nada que podamos hacer, tenemos que poner de ambas partes para poder superar esto- me abraza cada vez más y más fuerte.

Se que no tiene mucho sentido, pero los abrazas son una cosa del otro mundo, es algo que te ayuda en todo sentido, un simple abrazo te puede hacer sentir segura, te ayuda con tu estado mental y te da la confianza y esperanza para seguir... un simple abraza de esa persona que amas... es todo lo que necesitas para vivir.

Perdí mi niñez y no se porqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora