Capitulo 48 su día ha llegado

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Robert

Ya llegó el día, estoy muy emocionado porque quede preso ese machista infeliz, lo habían dejado retenido y ocurrió el juicio, por confesar culpabilidad eso fue un pan comido.

Le sentenciaron 50 años preso sumando la violación y el homicidio, junto con una extraña dirección que se les otorgaron a unos investigadores específicos para buscarla. Mientras yo estoy dando pasos seguidos directo a su celda, feliz y con una sonrisa de oreja a oreja lo observo confundido y solo, en esta cárcel no pueden dejar a los violadores con otros presos, han ocurrido "accidentes".

Al tocar las frías barras lo miro satisfecho, solo lo escucho mientras pronuncia.

-¿Cuándo saldré de aquí?- me dice, rendido y sin muchas energías.
-En cincuenta años ¿No lo recuerdas?- digo fingiendo curiosidad.
Frunce las cejas con confusión - Me dijiste otra cosa, respóndeme la maldita pregunta- se acerca feroz a las barras y yo retrocedo un poco.
-Oye tranquilo-elevo las manos en señal de paz- hubieron personas importantes involucradas en esto, tomara un poco de tiempo aunque no cincuenta años, a tu edad es como una cadena perpetua- digo tranquilo

Él se relaja, pero lo veo un poco extraño, miro algunas lágrimas salir de sus ojos y eso me sorprende pero me da lástima, luego de todo lo que ha hecho y su insensibilidad notable con su esposa e hijas, con Abbi. ¿Cómo puede tener sentimientos está cosa?

(¿Cómo puedes tenerlos tú?) Mi conciencia habla, muevo mi cara para sacar esa incógnita que luego me va a consumir.

-Sé que fuí un infeliz, mi familia me trataba como basura y cuando me siento vulnerable soy igual y mírame, perdí a mi esposa, la mujer que amé por encima de mi madre y a quien encerré y golpeé solo porque sentía que no debía sentir amor por ella, a mis hijos los torturé emocionalmente al igual que yo creyendo que eso era lo correcto, jamás toqué a esa niña, supe quién era, me llegó a atraer pero yo no soy mi padre- dice fuerte, dolido -no me veo haciéndole eso a una niña, menos a una familia y ahora me gané más odio... Quizás es mi karma- al mirarme se dió cuenta que aún no me iba, se le desfiguró la cara pero no puede hacerme nada.
- Piensa bien tus cosas amigo- (aunque no es mi amigo).

Salgo victorioso de ese lugar, que poco a poco te hace sentir encerrado, de tantas puertas que cruzar, tantos guardias que visualizar, jamás llegaré a ese lugar como un preso, me repugna.

Jose

Me levanto de mi cama, no hay nada que hacer, ya no, esto es un cambio muy drástico para mi, después de resolver todo esto decidí simplemente retirarme, me van a dar de baja la próxima semana, así que solo me queda hacer rondas por esta semana.

(Sera fácil, solo no tengo que distraerme)

Tomo mi teléfono y abro el chat de mi exesposa al abrirlo noto todos los mensajes que le he enviado.

-Cierto- Digo aferrandome del teléfono -desde que ella se fué le he estado enviando mensajes cada día de como voy el caso, al fin le puedo decir que todo terminó, que ya podemos seguir-

Le conté que termine el trabajo y el caso, pero lastimosamente como siempre, no responde.

Trato de no desanimarme arreglando la casa con el fin de su llegada (claro, si vienen).

Por alguna razón ciento una tranquilidad al ver todo esto, me siento como si por fin pudiera descansar, como si por fin pudiera tener a mi hija en paz.

O eso creí.

Perdí mi niñez y no se porqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora