Sólo tú. [Segunda Temporada: Mía, sólo Mía]

6. ¿desde cuándo?

Min-ah

Eun-woo me saca del salón y me lleva a un cuarto diferente. Empieza a apretarme la mano de tal manera que empieza a lastimarme.

-Eun suéltame, ¡me lastimas!
-¡¿Me puedes decir qué carajo hace ese imbécil aquí?!
-¿y cómo demonios iba a saber que vendrían?. Te recuerdo que tengo más de un año que no hablo con ellos.
-Pero tampoco te vi quitándote cuando te jalo para bailar.
-¿y qué esperabas?, ¿Qué hiciera una escena frente de los psicólogos más reconocidos del mundo?
-No quiero que le vuelvas a hablar.
-¿Perdón?
-Ya te dije, no te quiero ver cerca de él o sino...
-¿O sino qué?, ¡tú no eres nadie para decirme a quien le hablo o no!
-¡Soy tu novio!
-¡Pero no soy de tu propiedad! Así que no te atrevas a prohibirme nada...
-Min-ah yo...

En eso entra una persona
-Señor Cha, su padre lo está buscando.
-Anda, no hagas esperar a tu padre. Le digo.
-Esto no se queda así. No te muevas de aquí. Y sale de la habitación.

Estoy fúrica, quién se cree para decirme lo que puedo hacer o no. Pero por supuesto que no pienso quedarme aquí. Salgo y empiezo a buscar un lugar. Encuentro una pequeña terraza. "Excelente" pienso, necesito aclarar mi mente. "Esto no puede estarme pasando"

Jungkook está aquí, yo juraba que era historia pasada, pero no puedo negar que me sentí desmayar cuando lo tuve entre mis brazos, es como si el tiempo no hubiera pasado entre nosotros, sentí como si hubiera sido ayer que estaba abrazándolo por última vez en ese maldito aeropuerto. ¿Por qué todavía tiene ese efecto en mí?

De pronto llega a mi mente el recuerdo de la última noche que hablamos: Cuando llegué a Stanford, las cosas estuvieron bien por casi seis meses, nos acostumbramos a horarios ya que la diferencia es de 6 horas.

Conocíamos los horarios del otro y aprovechábamos cada momento, hacíamos citas, veíamos películas juntos, pedíamos la misma comida, incluso disfrutábamos de tener intimidad a través de la computadora.

Los entrenamientos se volvieron más frecuentes y ya no era tan fácil compaginar los horarios, pero siempre veíamos la manera. En una ocasión, Jungkook me marcó por video. Yo estaba estudiando con Eun en un salón, había unas cosas que no entendía y se ofreció a ayudarme. Cuando empecé a hablar con él, se notaba que había tenido un mal día, estaba serio y cortante.

En un momento de la plática Eun se acercó y quito uno de los audífonos. Me dijo algo sobre nuestro profesor de patología y comencé a reírme. Jungkook, al ver la escena, se puso como loco. Empezó a gritar que por qué lo engañaba, que si no veía todo lo que hacía por mí y por Tae y que mientras él hacía un gran esfuerzo yo le respondía riéndome y coqueteando con hombres.

A partir de ese momento todo fue muy mal, sus mensajes eran cada vez menos y más cortos. Terminábamos peleando y siempre era lo mismo. El juraba que yo estaba con alguien más.

Yo ya no sabía de qué manera darle confianza, hacerle ver que él era el único en mi vida y que no me importaba nadie más. Pero todo era inútil. 

A ellos les empezó a ir muy bien, en cuestión de 8 meses, él y mi hermano lograron subir dos divisiones, y aunque sabía que ellos estaban teniendo éxito,  no entendía proque actuaba conmigo de esa manera. 

Un día, la página de Stanford publicó una fotografía de Eun-woo y yo. Estábamos haciendo una investigación importante para el psiquiátrico. En cuanto se publicó Jungkook me habló como loco, estaba tomado. Las palabras que me dijo, me siguen atormentado hasta ahora.

-¿Qué carajo Min-ah?

-¿qué pasa amor?

-¿ahora sí soy tu amor?¿por qué sigues viéndote con ese imbécil?