Capítulo 5 : Hogwarts, hogar de asesinos en ciernes (aparentemente)

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Remus Lupin estaba emocionado, preocupado y exhausto. Había pasado la noche anterior aullando a la luna y arañando su propia piel. Con suerte, si había que creer en las palabras de Albus, sería el último mes que tendría para hacerlo. Albus dijo que habló con Severus, quien sorprendentemente aceptó prepararle la poción matalobos todos los meses a partir de ahora. Esta fue una innegable bendición de venir a enseñar en Hogwarts, ya que la poción matalobos recién aprobada era demasiado cara para que él pudiera pagarla.

Abordó el Expreso de Hogwarts, un par de horas antes que incluso los primeros estudiantes, y sonrió con tristeza cuando sus propios recuerdos de la infancia volvieron a él. Desde su primer año nunca había viajado en tren sin James, Peter y...

Bueno, este viaje sería marcadamente diferente de todos modos.

Eligió viajar en un compartimiento en la parte trasera, creyendo que podría dormir más en una sección de estudiantes que con el conversador revisor. Dejó su maletín en el área de almacenamiento encima de su banco y se puso lo más cómodo que pudo.

En sólo cinco horas estaría regresando a Hogwarts. No como estudiante con sus amigos, sino como profesor, solo. Necesitaría descansar un poco.

—¿Quién supones que es?—susurró una voz, sacando a Remus de su sueño.

—Profesor RJ Lupin—dijo una voz femenina—Baja la voz, Ronald, está durmiendo.

Remus habría sonreído divertido si no hubiera fingido quedarse dormido. El lobo que llevaba dentro podía oír perfectamente. Le sorprendió que fuera necesario que los chicos susurraran para despertarlo en lugar de abrir la puerta del compartimento.

—¿Cómo sabes todo?— preguntó la primera voz, con clara exasperación en su tono.

—Ella leyó su maletín, obviamente—dijo un hombre que parecía elegante—¿Quieres sentarte a mi lado, Hermione?

—Sí, por supuesto—dijo suavemente la chica que identificó a Remus, aparentemente Hermione.

—¿Crees que es el nuevo profesor de Defensa?—preguntó otra voz masculina elegante en voz baja.

—Lo es— dijo otra voz masculina, ésta mucho más áspera que las demás—Pero espera hasta que llegue Luna. Tengo que decirles algo a ustedes.

—Tiene tantas cicatrices como tú, amigo—dijo la primera voz riendo.

Remus tenía curiosidad por saber qué niño estaba cubierto de tantas cicatrices como un hombre lobo adulto. ¿Podría Dumbledore haber traído nuevamente a un niño con licantropía? Inhaló con cuidado y se sintió decepcionado y aliviado al no oler otro lobo en el compartimento.

Escuchó mientras sonaba como si al menos siete, posiblemente ocho, estudiantes entraran al compartimento.

—Él está en tu lugar—dijo una nueva voz femenina—¿Quieres que lo despierte y vea si se mueve?

—No es posible—resopló el chico que dijo que estaba esperando a alguien llamado Luna—Me sentaré aquí.

—Aquí habrá mucha gente con él—refunfuñó la voz que alguien había llamado Ronald.

—Duro—dijo la voz de un chico arrastrando las palabras—Aprieta Weasley, déjame sentarme a tu lado.

Los estudiantes en el compartimiento susurraron, discutieron y arrastraron los pies hasta que Remus pudo sentir que todos se habían calmado.

—Voy a ir a buscar a Luna, tal vez ella no sepa que queremos que se siente con nosotros—dijo el chico que había mencionado a Luna antes.

—Iré—ofreció de inmediato el chico que Remus ahora está seguro es el hijo menor de Molly Weasley, Ronald Weasley—Quédate aquí, Harry.

Veritaserum//parte 3 de Harry Potter y Siete Años de Caos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora