Capítulo 14 : Murciélago, rata y perro

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Durante la Fiesta de Navidad, Severus observó cómo su pupilo se escabullía dentro y se sentaba malhumorado en su asiento de la esquina de la mesa de Slytherin. Potter mordió su comida con su mano izquierda, su mano derecha tenía un leve brillo de glamour. Fue un glamour excelente. Severus dudaba que algún otro profesor pudiera detectarlo.

Por supuesto, ningún otro profesor había arriesgado su vida durante más de un año por su capacidad de identificar el más mínimo cambio en una persona.

No hacía falta ser un genio para reconstruir la desesperación de Potter por ser golpeado por la forma en que ahora comía con la mano incorrecta. Potter había encontrado una manera de obtener las lesiones que tanto deseaba antes. Severus sólo esperaba que fuera un capricho pasajero y no una señal de un problema crónico.

Necesitaba ir a ver al sanador mental nuevamente y descubrir cómo abordar todos estos rápidos cambios que estaban sucediendo en el comportamiento de Potter.

Y a juzgar por el creciente nivel de abatimiento que mostraba su pupilo, necesitaba ir pronto.

Severus se despertó a la mañana siguiente a las cuatro en punto con un pequeño búho gris picoteando frenéticamente directamente en la puerta de su oficina con un solo pergamino atado a su pata.

¿Quién diablos enviaría una carta a esta hora del día?

Le quitó el pergamino a la lechuza y observó desconcertado cómo ésta se alejaba volando de inmediato.

Snape-
Harry está en peligro. Tienes que asegurarte de que esté a salvo DE SÍ MISMO.

Severus no dudó en dirigirse hacia los dormitorios de Slytherin. Sabía que la mayor amenaza para la vida de Potter era el propio niño. No estaba ciego. Si alguien creía que Potter estaba en peligro, entonces Severus comprobaría cómo estaba.

Fue una decisión fácil.

Severus continuó leyendo mientras rápidamente se dirigía al dormitorio.

Yo no era el guardián del secreto. Pettigrew lo era. Tienes que conseguir la rata de Weasley. Si primero necesitas pruebas, pregúntale a Remus cuál era el animago de Pettigrew. Pero consigue. La. Rata. No lo dejes escapar. Pregúntale qué pasó exactamente esa noche de Halloween. No tienes nada que perder.
No lo hagas por mí. Hazlo por Harry. Ya no puede soportar a los dementores.
Ayuda a Harry. Encuentra la rata.
-S.O.B.

Severus miró fijamente el pergamino en shock momentáneo antes de guardarlo con cuidado en su bolsillo.

Potter primero.

Fue directamente al dormitorio de los chicos y se tranquilizó al ver a Potter hecho un ovillo en su cama, profundamente dormido con la señorita Lovegood acurrucada a su lado, a salvo y viva.

Lanzó un hechizo rápido para evaluar los signos vitales de Potter y sintió que sus hombros se relajaban mientras los números que parpadeaban rápidamente le aseguraban el ritmo cardíaco, la presión arterial y la frecuencia respiratoria estables de Potter.

Luego, a pesar de que la lógica le decía que la carta era una broma o un intento desesperado de un hombre desesperado por evadir el beso de los dementores, Severus miró alrededor de la habitación y vio un pequeño bulto gris acurrucado en el pecho de Weasley.

-Stupefy-murmuró mientras aturdía a la rata. Lo levantó por la cola y miró fijamente sus ahora frenéticos y brillantes ojos negros.

-¿Quién eres?-murmuró suavemente.

Severus colocó una protección sobre Potter para alertarlo tan pronto como el niño despertara y se guardó la rata en el bolsillo mientras se dirigía a la oficina de Lupin.

Veritaserum//parte 3 de Harry Potter y Siete Años de Caos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora