Stobotnik ☕ 00neSshots_

Jacuzzi ⛲ [❤️✨☕]

Ambos habían llegado finalmente al hotel. No era cuestión de gusto propio, ni mucho menos habían decidido tomar un descanzo de sus exhaustivas vidas laborales, todo lo contrario, una misión los esperaba con ansias al otro lado del país, obligándolos a tomar estadía completa en la misma habitación, regalo por parte de la enorme agencia.

Un guía un tanto molesto se encargaba de demostrarle a los hombres lo patéticamente materialista que aquellas zonas eran capaces de lucirse.
Ivo se dedicaba a suspirar con histeria, pues en numerosas ocaciones había intentado que el tipo se vaya para finalmente disfrutar las palabras de hipnotizmo lujurioso que su esposo seguramente expresaría ante el establecimiento tan sublime a niveles de ornamento, ya que era de su total agrado, y aquello le generaba ternura indescriptible.

— Y finalmente, señores, nuestra especialidad... — con una emoción frustrante, abrió lentamente la última puerta — espero lo disfruten, si necesitan algo, no duden en llamarme — sonrió.

La vista de ambos se iluminó como diamantes, pues la zona representaba un brillo en particular, digno de un millonario con afán de meritocracia ante las masas. Todo era decorado con estructuras de cristal reluciente, el piso era puramente mármol con algúnos efectos estéticos realizados a propósito, dando una vibra muy fina. El hombre finalmente se retiró, al observar las cómicas expresiones de asombro de sus nuevos clientes.

— Es muy... Hermoso... — sonrió deslumbrado.

— He logrado sincerarme ante su presencia hace ya bastante tiempo... Y he de admitir... Esta zona en específico no es de mi total desagrado... — colocó su mano en su mentón, en una señal de reflexión.

Stone rió de forma tierna.

— Me recuerda a usted... La elegancia sobreexpuesta es una de mis cosas favoritas — inclinó su cabeza de forma infantíl, dedicándole una mirada suave e  irresistible.

— No es posible, agente, que apenas al lograr dos minutos en soledad sus hormonas ya inicien un ataque en contra de mi persona — rodeó sus ojos con egocentrismo, claramente bromeando con su pareja.

Lee soltó otra risita infantíl, haciendo delirar nuevamente al contrario.

— Lo lamento, mi señor... Es inevitable — realizó un falso tono de drama y tristeza exagerados.

El doctor observó con algo de impaciencia, como el contrario recorría la enorme sala, tachándolo de hipócrita pues bien sabía que con su fulgurante porte opacaría por completo el brillo potente de la decoración ambiental.

— Lee... — lo llamó de repente — ven aquí — ordenó.

El mencionado acató el decreto de inmediato, sonriendo nuevamente.

— ¿Si, señor?

— Desearía hacer uso de este estupendo santuario en algunas horas... — le dedicó una mirada fija — ¿Desea acompañarme? — alzó una ceja en seriedad.

Stone ensanchó la comisura de sus labios, aún más. En un leve gesto de positividad y una severa pero disimulada marca personal de seducción, asintió con su cabeza, dejando en claro su respuesta.

— Excelente — sentenció.

×××

Tras desempacar sus pertenencias con fervor hacia el órden, Ivo decidió poner en marcha la propuesta que tanta ansiedad se encontraba generando en ambos.

— Tomaré una ducha... ¿Sería capáz de esperarme allí?... — se impuso firme ante el contrario.

— Por supuesto — colocó sus propias manos tras su cintura — Lo prepararé para usted... Oh, y olvidé mencionarlo... Entre mi equipaje también guardé esa loción que le gusta... — inclinó su cabeza sonriente.