Stobotnik ☕ 00neSshots_

Nice technical gift [💌☕/♥️☕✨]

Debo agradecer a mi amiga Nataly, la cual me ayudó a crear escenarios y detalles para este capítulo. Gracias, y gracias por siempre estar ahí.

No sé que decir de esto, hace mucho tiempo no escribo y hace mucho tiempo no publico, dudo de su calidad, pero al menos es algo mientras reacomodo mi vida.

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Era una tarde increíble para ambos hombres. El detalle de encontrarse junto al otro era presente la mayoría del día, los 365 días del año, y eso siempre causaba en ellos cierta chispa y comodidad. Pero aquella vez, era simplemente perfecto; el doctor, y su gran capacidad de hacer que los magnates lo necesiten, habían acudido a una reunión patéticamente exitosa, inefablemente estupenda.
El agente, aunque siempre fulgurante, brillaba de felicidad al observar a su compañero sonriente de ese modo ladino y egocéntrico que aún así, le seguía encantando.

De hecho, había mucho además de eso. Ya que aquel día era su aniversario de casados. Todo factor se unía para lograr una hermosa tarde junto a su pareja, haciendo que el agente no logre ocultar su radiante sonrisita de niño.

Aunque no era motivo de culminación para su reciente y notable caldeado en el ámbito amoroso, el moreno aún así se mostraba algo curioso al respecto de las actitudes ajenas. El doctor parecía ocultar algo. No era motivo de horror para Stone, él confía en su esposo, más que en nadie de hecho, pero aún así mantenía una mínima inclemencia hacia su para nada inusitada tranquilidad.

El moreno, con un aura próspera de su propia sonrisa chispeante y entrañable, se dedicaba a llevarle su respectivo café del día al señor, quien aún alegre en su modo, trabajaba con fervor en su nuevo invento, como solía suceder, pero esta vez con una pequeña rareza.

- Su latte, doctor - llamó el agente, adentrándose.

El hombre pareció exaltarse, hasta mantener una actitud nerviosa, suceso sumamente extraño para el contrario, quien observaba como su jefe colocaba su cuerpo en frente de la mesa en dónde se llevaba a cabo la más reciente y encubierta de sus creaciones.

Ivo dió un paso firme, arrebatando la taza de las manos ajenas, para tomar un sorbo y dar unos pasos atrás.

Ambos se miraron fijamente por unos segundos, algunas veces deleitándose con la mirada brillante y expresiva del otro, y en otros momentos preguntándose porqué estaban a la mitad de la sala en completo silencio.

- ¿Sucede algo, señor? - inclinó su cabeza, dudoso.

- Nada en específico - asintió, serio.

El agente sonrió levemente. Ivo solo observaba. Era increíble como después de tantos años juntos esa atracción se seguía ejerciendo. Era puro magnetismo.

- ¿Por qué sigues aquí? - cuestionó el mayor algo ido.

- Oh... - desvío su mirada - disculpe - soltó una diminuta carcajada.

Lee parecía con intenciones de retirarse, realizando una muy leve reverencia, hasta incluso de una forma espontánea, sin pensarlo siquiera un minuto.

El doctor observa la espalda de su pareja. Deleitándose.

- Oye - llamó el genio.