Capítulo 33

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Jhon

-¿Está todo listo?

-Si

Charlotte sigue detrás de mi como un chicle y sinceramente me estoy hartando de ella. Tiene que aprender a soltar, saber que se ve ridícula haciendo eso.
Una chica jamás debe rogarle a un hombre, pero como hombre que soy amo que me rueguen. No es que los interese este tipo de chicas sino que son las que van a dar atención siempre y cuando quiera.
Theodor camina a mi lado por los pasillos de la mansión mientras a lo lejos está Jasper entrenando con Marcelo, su entrenador personal.
Todavía recuerdo como mi madre le dió amparo cuando sus padres lo dejaron en nuestra puerta. Nunca he escuchado del hermano de mi padre pero se que no quería al bastardo de su hijo.
Comienza la práctica de tiro y falla como de costumbre. No sabe manejar una pistola no mucho menos una ametralladora. Se destaca mejor en la práctica con arco y flecha, pero en defensa personal es un asco, como todo lo que hace.

-No entiendo porque tu padre quiere darle casa a ese bastardo. Ni siquiera sabe si tiene mamá viva.

-No lo sé, pero solo es una carga tras otra, solo sabe atraer problemas no resolverlos.

-Oye, déjame preguntarte, la entrega en Rusia, el que lo atraparán, ¿lo planteaste? ¿Tienes algo que ver?

-Por supuesto que no

-Fingire que te creo

Seguimos caminando hasta la sala de investigación. Liam es experto y siempre tiene hombres en dónde los necesitamos.

-Finalmente perdió a la criatura. Debo decir que salió muy planeado, de hecho porque querías que perdiera al bebé. Se que eres un psicópata pero ¿Porque te importa un simple bebé?

-Son mis asuntos, tu eres la servidumbre, debes obedecer sin hacer preguntas.

-Como digas.

-Las flores fueron entregadas Jhon- informó Theodor.

-Bien hecho, al parecer en esta casa solo tu sirves.

-Sisi, ya dejen los halagos, tenemos problemas más graves- interrumpió Liam

-Habla Kennedy

-Bueno, me pediste que estuviera al pendiente de Renée, y lo hice, pero observé algo sospechoso en Spenser. Según investigué después de salir del hospital y dejar la nota que pediste. Ha mandado a sus hombres a vigilar la casa de Renée. Y a estado al pendiente de su vida las últimas tres semanas.

-¡¿Que?!- el sonido de la mesa al crujir con el golpe de mis manos hizo estruendo en toda la habitación- ¡¿Que estás insinuando, maldita cucaracha?! ¡¿Crees que Renée tiene algo con el imbécile ese?!

-No, claro que no, simplemente estoy diciendo que el está muy pendiente de ella, y su trabajo solo era mandar un simple papel.

-¡Me encargaré de eso cuánto antes! Maldito bastardo

-Jhon recuerda que tenemos grandes negocios con los Jackson. El vínculo no puede romperse, son muy importantes si queremos mantener el lazo con la magia italiana. Tenemos un acuerdo, ¿recuerdas?

-Si ya se, no me repitas las cosas. Pero ¡¿porque el hija de puta ese está investigando a Renée?! ¿Que carajo cree que intenta hacer?

-No lo sé, pero no es el mayor de nuestros problemas.- trata de tocar mis hombros pero se lo impido

-Tu amada policía nos hizo perder un gran cargamento, del que estaba a cargo Jasper.

¡Maldita sea!

-El proveedor está furioso y no quiere tener más negocios con nosotros. Además de que había más de dos millones en esa inversión.

Definitivamente he metido las mil patas

-¿Quien es el proveedor?

-Demyan Foley

Si, la cagué

Foley, Joule y yo solíamos ser muy unidos cuando teníamos ocho años, nuestros padres eran amigos y socios así que tendríamos que vernos muy seguido. El punto es que el estaba enamorado de Joule, vivía haciendo promesas, dándole flores, obsequios y demás, y yo solo le di un cuervo de regalo el día de su cumpleaños. Sin embargo parece que el ser humano funciona de una forma muy rara, nos enamoramos de quién nos ignora y rechazamos a quien está siempre ahí.

Siempre quise a Joule pero no un cariño de novios, más bien de hermanos, pero ella nunca lo vió así, me prefería incluso cuando yo la quería lejos. Y supongo que eso fue poco a poco enojando a Demyan hasta el punto de odiarme.

-¿Que haremos?

-Contacta a Foley, quiero una reunión con el.

-Entendido

-Y Theodor, manda a llamar a Jackson, necesito aclarar unas cuantas cosas con el

-Como digas

La pantalla muestra su habitación, el agua retruena en las ventanas y todo está desordenado. Ni que quisiera tanto a ese médico de segunda. Lleva horas llorando, ni siquiera lo quiere, me quiere a mi, a mi, solo yo estoy en su corazón. No hay lugar para nadie más porque es mía. Mirarla a diario se ha vuelto mi actividad favorita, lástima que tenga que atender otros asuntos

-Que buenos han sido estos días aquí, mi familia está muy agradecida con ustedes por la celebración que se hará en fin de año- tratando de ser amable como siempre, eso aburre

-Tomas las cosas muy alegre, Jackson.

-¿Porque no habría de hacerlo? Es casi año nuevo

-Y eso que, le dan demasiada importancia, los días van a seguir, la celebración de año nuevo es algo absurdo.

-Ugh don cascarrabias. Para que me mandaste a llamar. ¿Ha pasado algo con la mercancía de Pakistán?

-No, debo decir que eres un gran socio, eficiente y carismático para negociar- digo y se sienta en una de las sillas frente a mi escritorio

-Entonces, ¿que ha pasado?

-Renée Sthibensson Carter

-Si, la chica a la que me pediste que le entregara la carta no?

-Exacto, amo tu inteligencia. ¿Quiero saber porque estabas vigilando su casa en los últimos días?

-Pues me preocupé por ella, es bonita y su familia es increíble, ví que sufría mucho con la perdida del bebé y con lo de su marido, supuse que necesitaría apoyo.

-Que lindo, eres un amor de persona- el sarcasmo abunda

Me mira atónito, sin saber el monstruo que tiene delante, tomo su barbilla y lo miro fijo a los ojos.

-Jhon...

-Shh, ¿sabes que pasa cuando se meten con algo que es mío?-sacude la cabeza en señal de negación- el miedo siempre ha sido un enemigo mortal

La navaja que siempre traigo en una de las mangas de mi traje toca la piel de su pecho, y el que traiga la camisa blanca semi abierta ayuda mucho. Si piel se eriza con cada toque de la fría hoja blanca

-Te voy a ser claro, le tocas un solo cabello a Renée y te saco los ojos. No me molestaría ver gusanos en tu cara, comiendo tu carne y tus órganos pudriendose poco a poco mientras escucho música clásica- la hoja atraviesa las fibras de su pecho y los gritos son inevitables.

-¡Maldito loco!

Me aparto de el, organizando mi cabello hacia atrás, el sudor toma mi frente y lamo la hoja llena de su sangre carmesí.

-Eres un psicópata

-Los halagos no te servirán de nada conmigo. ¡Largo!

Casi arrastrándose desaparece entre las puertas corredizas y observo el niñato que es.

Hola! No me odien por no actualizar, la verdad es que no he tenido tiempo para actualizar. Pero aquí está el capítulo 33 que os guste
Besitos
A.H

Abraza mi Oscuridad - Tomo 1 ©[Matices Tóxicos]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora