Daphne cerró la puerta de su habitación con una mezcla de nerviosismo y excitación. Con un chasquido de sus dedos, la habitación se llenó de un suave resplandor cálido. Se dirigió a la ventana, observando la el maravilloso día soleado que había fuera. La magia en el aire parecía reflejar la tormenta de emociones que bullía en su interior.
Decidió que necesitaba hablar con alguien de confianza sobre todo lo que había sucedido. Sin dudarlo, se colocó frente al espejo mágico de su tocador y pronunció el nombre de Calliope.
—Calliope, ¿puedes hablar ahora?
La imagen de Calliope, con su cabello ondulado y sus ojos llenos de curiosidad, apareció en el espejo.
—¡Daphne! Claro, puedo hablar. ¿Qué sucede?Daphne soltó un suspiro antes de comenzar a relatar los eventos de las últimas horas.
—Calliope, no sé por dónde empezar. Anoche, Farah y yo...Calliope la interrumpió con una sonrisa juguetona.
—Oh, por la expresión en tu rostro, diría que algo interesante sucedió. ¿Cómo estuvo la cita romántica con Farah?Daphne esbozó una sonrisa tímida, recordando la noche que había compartido con Farah.
—Bueno, no fue exactamente un cita romántica. Fue... inesperado. Tomamos un poco más de lo debido, y al final, terminamos pasando la noche juntas.Calliope arqueó una ceja, intrigada.
—¿Pasaron la noche juntas? ¿Qué tan interesante se puso?Daphne rió nerviosa.
—Bueno, aquí viene la parte interesante. Siento que debo confesarte algo más. Anoche tomé más de lo que planeaba, y, bueno, la manera en que me insinué a Farah fue un poco... descarada.
—¡Oh, Daphne! Cuéntame todo.
—Bueno, fue como si mis inhibiciones se desvanecieran. Hubo risas, confesiones, y sí, incluso algunas insinuaciones bastante directas. Nos acostamos y...
—Parece que fue una noche bastante divertida.
—Lo fue, pero ahora me siento un poco avergonzada por la cantidad de alcohol que tomé. Espero que Farah no piense que soy así todo el tiempo.
—Seguro que Farah te conoce lo suficiente para saber que fue una ocasión excepcional. Además, parece que las cosas resultaron mas que bien.
—Esta mañana, nos confesamos. Calliope, le dije que la quería. Ella también siente algo por mí. Fue hermoso, pero...
—Pero... ¿hay un problema?Daphne asintió, preocupada por cómo su historia encajaría en el mundo que ambas ocupaban.
—Somos la reina de Domino y la directora de Alfea, Calliope. Nuestras posiciones son complicadas, y no sé cómo enfrentar las expectativas y responsabilidades que conllevan.Calliope reflexionó por un momento antes de responder.
—Daphne, el amor puede superar muchas barreras, incluso las más inusuales. Tienen algo real entre ustedes, y eso es lo que importa. Pero, por supuesto, hay desafíos. ¿Estás dispuesta a enfrentarlos?Daphne miró fijamente el espejo, con determinación en sus ojos.
—Sí, Calliope. Estoy dispuesta a luchar por esto, por Farah. Pero necesitaba hablar contigo, necesitaba tu sabiduría y apoyo.Calliope asintió con una sonrisa comprensiva.
—Entiendo. Estoy aquí para ti, Daphne. Ahora, cuéntame más sobre Farah. ¿Cómo reaccionó ella a tus confesiones?El resplandor mágico de la habitación parecía bailar al ritmo de la historia que Daphne compartía con Calliope. A medida que profundizaba en sus sentimientos y las complejidades de la relación con Farah, el reflejo de Calliope mostraba una combinación de interés, comprensión y, sobre todo, apoyo.
—Calliope, realmente me pregunto cómo podemos manejar esto. Hay tantas cosas en juego: el reino de Domino, Alfea, nuestra responsabilidad... pero al mismo tiempo, no puedo ignorar lo que siento por Farah.
ESTÁS LEYENDO
DAPHNE (Farah Dowling)
RomanceTras la desaparición del rey Oritel, la reina Marion y la princesa menor, Bloom. El reino de Domino quedó en manos de la hija mayor de los reyes, Daphne.