❝Su Majestad❞ ❲moonsun❳

˚. ⚜️˚○◦˚ chapter twenty-two ˚◦○˚ ⚜️ .˚

—Su Majestad. —llamó un guardia observando a la rubia correr en dirección al baño. —Am, pasen, ahora regresa la reina.

ByulYi y Seokjin entrando a la habitación escuchando como YongSun devolvía su estómago. Ambos se miraron aun preocupados por la salud de la mujer que pronto sería coronada como la reina de Seúl de manera oficial, al menos hasta que se esclarezca su situación de salud.

YongSun salió del baño con la cara ligeramente mojada, entonces alzó la vista para observar a ambos militares con la cabeza gacha.

—Su Majestad. —ambos se inclinaron ante ella. YongSun se sintió avergonzada ante su aspecto, caminó con velocidad hacia el closet para tomar una bata blanca y cubrirse, solamente estaba vestida con un camisón semitransparente. — ¿Cómo se siente? Bueno, es una pregunta algo estúpida.

—No se preocupe, general Kim. —sonrió ligeramente YongSun caminando para regresar a su cama. —Estoy peor que ayer, pero no podemos curar nada sin antes saber qué tengo y tendremos los resultados en unos días. —explicó YongSun mientras se cubría con las sábanas. —Les he llamado porque necesito que me mantengan informada sobre todos los preparativos de la coronación, el Consejo ha decidido que sea dentro de un mes. Hay muchas cosas que hacer.

—Como usted ordene, Su Majestad.

—También quiero que me digan cuándo se van mis tíos y... mi tía. —ambos generales de miraron, intentaban tirarse la bolita nuevamente, ByulYi perdió.

—La familia de su madre está empacando, hoy por la tarde, después de la comida, se marchan de regreso a casa. —YongSun enarcó una ceja. —En cambio, su tía y su prima, han decidió quedarse un tiempo más, ya que... el duque Kim Soohyun viene en camino.

—Vaya. —fue lo único que soltó YongSun mientras miraba hacia otro lado sintiendo un coraje crecer lentamente. — ¿Y quién les dio el permiso de quedarse y de, además, aceptar la venida de... del duque Kim Soohyun?

—La reina abuela, Su Majestad. —YongSun aspiró ampliamente el aire para acumularlo en sus pulmones, en su cabeza había un debate breve.

—Díganle a un guardia que busque a mi abuela y que le informe que la reina Kim desea reunirse urgentemente con ella. —la mirada de YongSun era tan afilada como cuchillos listos para ser lanzados.

Ambos generales asintieron, esperando cualquier otra orden de la reina. Ella sonrió.

—Puede retirarse, general Kim. —el castaño asintió lentamente mirando un segundo a ByulYi y después salió de la habitación. —Tengo una misión para usted, general Moon. —la voz de YongSun se volvió más suave, ella se levantó de la cama quitándose la bata blanca. ByulYi sintió sus manos temblar con ligereza cuando YongSun se acercó a ella, pudo oler su perfume y eso la comenzaba a poner más nerviosa de lo que ya estaba, deseaba sentir la cercanía de su amada. —Aléjese de manera permanente de las princesas Taehee y Taeyeon.

ByulYi nuevamente recordó aquel ataque de celos que YongSun tuvo cuando, en su época de Oficial, le prohibió acercarse a HyunA y de cualquier mujer que la mirara. Sintió como su corazón latió con fuerza y no pudo sonreír ligeramente, pero ver el rostro tan serio de YongSun hizo que ByulYi bajara de su nube para mirarla con respeto.

—Como usted ordene, Su Majestad. —asintió la general, la reina YongSun se acercó aún más, las delgadas manos de la rubia se asentaron en la corbata de la general quien elevó ligeramente su mentón mientras fingía ignorar la mirada tan pesada de YongSun.

—No te quiero cerca de ellas. —susurró YongSun con un tono autoritario. —No estaremos con las cosas claras después de... todo lo que pasó en Jeju, aun así, no voy a permitir que ella te ande manoseando.