Cuando, donde y Como diga el amor- SINRIN

Capitulo 50

En el salón contratado  – Dos semanas para la boda

Sinb, y todas sus damas de honor y las de Yerin estaban ultimando detalles para la boda. Habían citado a los encargados de las flores, los del catering, música, decoración, e inclusive la señora Lisa había ido para coordinar sus esfuerzos en el pastel de bodas con los demás contratados.

- NO, NO, NO Y NO –Sowon se enojaba con los encargados de la decoración - ¿Cuántas veces les dijo Sinb que no queremos un escenario con una banda? Esto no es un baile de graduación es una boda...

- La boda de la que están hablando todos los medios – agregó Umji

- Como ya le explicamos Señorita Kim, es necesario tener una banda para los momentos en que la música del DJ no es la adecuada – explicó el musico.

- ¿Disculpe? – Sinb se paraba de su asiento, tenía su actitud de perra en estado pasivo debido a la vigilancia que Eunha  estaba haciendo sobre ella. Pero ya se había cansado – Déjeme entender una cosa...

- Se los advertí – dijo Sowon

- ¿Usted, el musico que me cobró miles de wones...?

- Por no decir millones – agregó Umji

- ¡Exacto! – Aseguró Sinb – millones de wones por poner su estúpida música en mi boda...

- Discul... - el hombre se trató de defender

- ¡SILENCIO! – lo hizo callar la rubia

- Esa es la Sinb que yo quería ver – alentó la Abogada

- YA MISMO QUIERO QUE TODOS USTEDES SAQUEN SUS INUTILES TABLETS Y ANOTEN LO SIGUIENTE – cada uno de los encargados se dispuso a escribir – "NOSOTROS SOMO SIMPLES EMPLEADOS QUE HACEMOS LO QUE LA SEÑORITA HWANG ...

- Y sus Damas de Honor – Joy se había contagiado de las otras

- Y SUS DAMAS DE HONOR DIGAN. NO CUESTIONO. NO PREGUNTO. SOLO HAGO" – dictó.

- PORQUE PARA ESO ME PAGAN –Sowon los hacía escribir también.

- Señora Lisa no la veo anotando – Increíblemente Jihyo también se unía a las militares de sus amigas. La señora la miró, murmuró algo por lo bajo y anotó.

- SI A ALGUIEN NO LES GUSTAN LAS DISPOSICIONES DE SINB – gritó Umji– PUEDE MARCHARSE AHORA MISMO – esperaron a ver si había movimiento.

- ¡Perfecto! – Dijó Sinb al percibir que ninguno de los contratados se iba – Ahora cada una de nosotras va a decir lo que ustedes tienen que hacer ¿entendido? – preguntó.

- Creo yo que la Señorita Hwang les preguntó algo – presionó Sowon.

- ¡Entendido! - Dijeron a coro.

- Bien – aceptó la fotógrafa – Joy comienza tú – ordenó amablemente

- Hemos decidido que queremos cambiar el menú Coreano por uno Italiano – dijo mirando a las personas que estaban en el salón representando el catering – y que los vinos sean de Francia en vez de España.

- Pero eso no se puede cambiar a dos seman...

- ¿Vio esa puerta? – Le señaló Sinb – Por allí puede salir si sigue quejándose – le dijo a la mujer que había osado a hablar.

- Sigo yo – dijo Umji sacando sus anotaciones – En cuanto al salón creemos...

- No creemos, estamos seguras – corrigió Sowon,  que era una experta en el arte de hacer sentir mal a una persona.