Dos meses después - Casa HwangYerin estaba en la sala de su casa acostada en el sillón, con su nieta sentada en su estómago y apoyada en las piernas alzadas de la pelinegra . Mientras Sinb, las miraba desde la entrada de la sala sin hacer ruido para no interrumpir ese momento.
- ¿De quién es esta naricita? – Yerin alzaba su mano y con su dedo dibujaba la nariz de Hanaeul - ¿Y estos ojitos? – ahora recorría el párpado de la bebé - ¿Y estos cachetitos? – Con ambas manos agarraba el rostro de la pequeña - ¿Son todos de la abuela cierto? – jugó Yerin
- Hanaeul balbuceaba cosas sin parar
- Tienes razón – dijo Yerin – le podríamos dejar algo a tu otra abuela, después de todo ella es la dueña de la belleza que heredaron ustedes... deberíamos darle una orejita aunque sea – poco generosa con su mujer. Hanaeul se dejó caer en el pecho de su abuela y mientras le babeaba la playera, jugaba con las partes del rostro de la deportista.
- Soy tan irresistible que me quieres comer a besos – le dijo a la bebe – Lo mismo que le pasa a tu abuela Sinb, no puede dejar de tocarme ni de darme besos... hay veces que me tengo que venir a este sillón para que deje de acosarme... - mentía
Sinb no aguanto y tuvo que intervenir - ¿Acaso le estás mintiendo a nuestra nieta? – la castaña caminó hasta el sillón y se sentó en la otra punta entrecruzando sus piernas con las de su esposa. Apenas Hanaeul vio a su otra abuela trató de gatear por el cuerpo de la pelinegra para llegar a la castaña, Yerin la tuvo que ayudar con su manos.
- Ratita traicionera junior, me cambias por un buen par de pier...
- ¡Yerin! – Sinb pensaba que Hanaeul era muy pequeña para escuchar las ocurrencias de su esposa
- Un buen par de ojos – terminó la frase incorporándose en el sillón para llegar a la boca de su mujer – y los labios más ricos del mundo – la besó. Hanaeul sentada en las piernas de la castaña no quería que se distrajeran entre ellas asique se colgó del cuello de su abuela.
- ¿Hablaste con Eunbi? – Le preguntó la pelinegra logrando que su esposa asintiera - ¿Ya están instaladas en el hotel? – Eunbi y Minji habían decidido hacer un viaje romántico por Europa.
- Si... aunque extraña mucho a Hanaeul – contestó besando la cabecita de su nieta – Minji dice que apenas recibió la foto que le mandamos de Hanaeul durmiendo entre nosotras se empezó a llorar y comenzó a decir que era una mala madre por no llevarla con ellas – contó riendo.
Yerin rió con ellas – Vamos a ver si sigue pensando lo mismo después del sexo europeo. ¿Recuerdas nuestro viaje a Europa? Al segundo día ni nos acordábamos que teníamos hijas... Tu hasta quisiste abandonarlas y quedarnos a vivir en Italia – le refrescó la memoria a su esposa.
- No es cierto – Yerin la miró
- Hanaeul dile a tu abuela Sinb, que si miente le va a crecer la nariz como a Pinocho – Yerin apretó la nariz de su nieta.
- Por lo menos esta vez usaste el cuento infantil – Yerin le solía contar a Sinb, la historia de una pinocha, que cuando mentía en vez de crecerle una nariz, le crecía un miembro entre sus piernas. De más está decir que en la cama Yerin actuaba de pinocha y Sinb era la esposa que la hacía mentir.
- Con Hanaeul si, pero si quieres esta noche te cuento "pinocha" a ti – la ovejita estaba hecha un sándwich entre sus abuelas.
- Quiero ir a despertar a las chicas – confesó Sinb nerviosa
- Tu lo que quieres es saber porque Yewon entró de esa forma anoche en casa – Después de dejar a Bomi en su departamento, Yewon había vuelto a su casa y había entrado enfurecida. Se fue a su cuarto, no sin antes pasar por el de sus madres y tirarle un zapatazo a Yerin al grito de "todo esto es tú culpa"
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Cuando, donde y Como diga el amor- SINRIN
أدب الهواةJung Yerin es una aclamada jugadora de básquet que es elegida para jugar en la WNBA, con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en Seul sin saber que un encontronazo con una rubia mandona le va a cambiar la vida. Esta historia NO me pertene...