Cuando, donde y Como diga el amor- SINRIN

Capitulo 48

En una pastelería de Seul – último día de abstinencia

- ¿Qué te parece este unnie? – Sinb le daba una cucharada de su pastel de boda. En realidad eran varias muestras de pasteles que las chicas estaban probando  para decidir uno para la boda.

- ¡Guacala! ¡Detesto las avellanas! – La Abogada se asqueaba - Me gusta más el que está comiendo Eunha. ¡OIGA! – llamó a la persona que las estaba atendiendo. Era un hombre joven de porte serio.

- ¿Puede traernos más de ese pastel? – señaló el pedazo que estaba comiendo la bailarina.

- ¿El de mousse de chocolate blanco con relleno de cajun? – las chicas se miraron – Si ese – afirmó la Abogada – Y un café negro para mi – agregó Sowon.

- Un latte para mi – pidió Sinb

- Yo quiero leche con chocolate – levantó la mano la bailarina.

- Disculpe pero nosotros no servimos café ni el resto. Esto no es un café – se excusó el hombre.

Sinb y Sowon se miraron.

- ¿Usted está queriendo decir que venimos a este lugar a elegir el pastel de la boda de nada más y nada menos de Hwang Sinb y  Jung Yerin y usted nos dice que no nos van a servir café? – Habían activado su modo prepotente - ¿Acaso tiene idea de cuantas pastelerías nos han molestado para tener la exclusiva tarea de hacer el pastel de esta boda? – le dijo firmemente

- Seguramente usted no tiene idea de lo que está haciendo, por eso voy a evitar llamar a su superior y hacerlo echar. Pero no pienso darles el gusto de tener su pastel en mi boda – protestó con esa mirada de superior - tal vez en otra pastelería nos atiendan como se debe – dijo la fotógrafa y agarrando su cartera se levantó

- ¿Puedo llevarme mi pastel? – a la bailarina le había gustado.

- Un momento por favor – Una señora mayor aparecía – Sabrán disculpar a mi chico, el es nuevo aquí. Deja, yo las voy a seguir atendiendo – se dirigió al joven – Mi nombre es Lisa ¿En que puedo ayudarla Señorita Hwang ? – La mujer la reconocía.

- Bueno estoy segura de que como ya lo habrá leído en todas las revistas, me caso en unos meses y mi madre insistió en que pasara por este lugar para probar sus pasteles – contó.

- Si, si. Su boda con la señorita Jung es conocida por nosotros. De haber sabido que venían las habría atendido yo desde un principio. Sepan disculparnos – La mujer quería esa venta como sea.

- Disculpas aceptadas señora Lisa. Mis amigas y yo queríamos una bebida para acompañar las muestras que estábamos probando – explico.

La mujer les aseguró que en unos minutos llegaban el café, el latte y la chocolatada, acompañadas por más muestras de pasteles para los clientes VIP - ¡Dios! Adoro cuando nos tratan así. Estoy segura de que el chico mañana está buscando trabajo – A veces la Abogada no tenía piedad.

- ¿Viste la cara que tenía cuando escuchó mi apellido? – Sinb se reía a la par de Sowon.

- Si Yennie se entera de que ustedes dos están abusando de los empleados las mata. Y como dama de honor de mi Yennie –Sowon no quería recordarlo – tengo el deber de contárselo – las amenazó Eunha .

Las otras dos la miraron. Cuando la bailarina le contó a la pelinegra  que Sowon y Sinb habían hecho llorar a la mitad de los empleados del catering, Yerin amenazó con raptar a Sinb y llevársela a Las Vegas para casarse en una capilla de mala muerte, de esas temáticas que son un imán de turistas y se aseguró de decirles que si seguían maltratando gente la luna de miel iba a ser en algún pueblo cercano.