Cuando, donde y Como diga el amor- SINRIN

Capitulo 39

- ¡Esto es vida! –Sowon estaba disfrutando de una hermosa tarde de sol tirada en una colchoneta inflable dentro de la piscina, con una copa de champagne en la mano - ¡NO! Es mejor que la vida misma... esto es el cielo.

- A Sowonnie le encanta que yo me disfrace de mucama – comentó al paso Eunha . Estaban tan relajadas que ninguna se esforzó en contestar el comentario de la bailarina.

Después del almuerzo, una herida Yerin se había encargado de limpiar la piscina y ahora su novia y sus amigas estaban disfrutando del agua limpia, mientras ella y su pequeña estaban terminando con las cuatrimotos.

- ¡Amo a tu novia B! En serio... Es más brindo por la bienvenida del bomboncito a nuestras vidas – La abogada levantó su copa, el resto la imitó.

- Yo brindo por el Señor y la Señora Sung  que llenaron la heladera de alcohol – Yuju ya iba por su tercera copita, menos mal que se había decidido por quedarse en una de las reposeras de afuera junto con Umji.

Esta última fue la siguiente en levantar su copa – Yo brindo porque esta noche cada una de nosotras tenga lo que se merece – la doctora estaba ansiosa por probar los colchones de las habitaciones.

- ¿Puedes dejar de mirarla así? vas a hacer que nos vuelva a ensuciar el agua – Advertía Sowon a Sinb que desde una de las colchonetas de agua no dejaba de mirar como Yerin le enseñaba a manejar la ya arreglada cuatrimoto a su hija – Demasiado con que te convencimos que te cambiaras el bikini – muy difícil había sido tranquilizar a la pelinegra  cuando vio que su novia se disponía a tomar sol con sus amigas nuevamente en su bikini blanco. Si Yuju no llegaba a tiempo para sostenerla todas sabían que iban a tener que sacar el botiquín de nuevo. Por lo tanto sabiamente, y con varios ruegos de sus amigas, Sinb se cambio su bikini y no se sacó el vestido hasta llegar al agua y asegurarse de que Eunbi y las motos tenían suficientemente ocupada a su novia.

- No puedo evitarlo – se defendió la fotógrafa – Me tiene hipnotizada – agregó mientras bebía un sorbo de su copa.

- ¿Ya podemos mirarla nosotras también? – preguntó Eunha

- Ustedes se dan vuelta y yo que convenzo a mi hija para que esta noche duerma con sus tías – con eso no se juega Eunha

- Ni te atrevas a mirarla cariño – Nada iba a echarle a perder su noche a la Abogada

- ¡MIRA MAMA! ¡PUEDO MANEJARLA! – Eunbi rodeaba la piscina con la moto y se frenaba justo a la vista de su madre - ¡YA SE FRENAR! – menos mal.

- ¡Muy bien cariño! Pero dile a tu madre que no quiero que manejes sin casco – alguna de las dos tenía que ser la madre aguafiestas – Y dile que la Amo – volvían los mensajitos.

Al rato volvieron a sentir el ruido de la moto cerca de ellas. La pequeña se subió el casco de la cabeza – Dice mami que ella te ama más ... Y también dice que te subas los tirantes del bikini – la pequeña no dió lugar a contestación y siguió probando su juguete nuevo.

- ¿Cómo demonios alcanzó a verlos desde allá? – Sinb levantó la mano y la sacudió hacía su novia como diciendo "Ni pienses que voy a dejar que se me marquen los tirantes"

- ¡Sinb! – la retaron sus amigas al ver como Yerin dejaba lo que estaba haciendo para caminar con furia hacia la piscina.

- No pudiste verla tranquila... tenías que despertar a la bestia –Sowon odiaba que le interrumpieran su bronceado - Díganle adiós al agua limpia y vayamos buscando un lugar para refugiarnos... ¡YUJU  TRAE EL BOTIQUIN! – gritó indignada Sowon.

La deportista llegaba a la orilla de la piscina - Ven aquí – le ordenó a Sinb

- ¡Oblígame! – le replicó