R E G R E S O |Fanfic Pecados Placenteros|

29

Mi espalda choca contra la fría y mojada pared del baño mientras el agua cae sobre nosotros. Sus besos bajan por mi mandíbula hacia mi cuello, siguiendo hasta mis tetas. Doy gracias a que Dedrick tiene un sueño profundo estos días y que su habitación está alejada de la de su padre.

—Dominick...

Los gemidos con su nombre salen mientras sus embestidas aumentan, sus manos suben y bajan por mi cuerpo, acariciándolo y apretándolo contra el suyo.

¿Cómo fue que llegamos a este momento?

Luego de llegar de la central fuimos al departamento de Dominick porque Dedrick tenía que buscar unas cosas que dejó de la última vez, nos quedamos ahí y vimos unas películas para que se entretuviera luego de no haber ido al colegio hace una semana.

Él se durmió, Dominick lo llevó a la cama. Nosotros nos quedamos viendo una película más por no tener sueño.

Una cosa llevó a la otra.

En un segundo nos estábamos besando y al otro estaba ya en su cama, desnuda y gimiendo bajo su cuerpo.

Tomo su rostro entre mis manos para besarlo, un beso que ahoga mis gemidos haciéndolos menos ruidosos. Mis piernas se aprietan al rededor de su cintura mientras me sigue follando contra la pared. No sé qué horas es, ni cuanto tiempo llevamos así.

Mi nombre sale de sus labios mientras toma mi culo entre sus manos y lo aprieta haciendo que gima sobre sus labios. Echo la cabeza hacia atrás cuando siento la tensión en mi vientre bajo, mis uñas se clavan en sus hombros mientras sus labios bajan por mi cuello.

El orgasmo me hace temblar y gemir fuerte, mis piernas se debilitan pero él las sostiene y me mantiene de ese modo hasta que también se corre. Se pega más a mi si eso es posible, aparta los cabellos que se habían pegado a mi rostro por el agua.

—¿Qué pasa? —murmuro cuando se me queda mirando.

Niega dejando un beso en mi mejilla.

—Eres demasiado hermosa. —dice a mi oído.

Sonrío sintiendo esa sensación en el pecho que sólo él puede provocar en mí.

—Y me imagino que me veo mucho más recién follada. —bromeo besándolo.

—Lo haces.

Nos coloca bajo la ducha y con cuidado me baja al suelo. Creo que ya volví a mi época adolescente enamorada porque no puedo dejar de besarlo y abrazarlo, supongo que me hacía falta estar con él.

Nos damos el baño que se supone nos hubiésemos dado hace media hora atrás. Tomo mi celular para ver la hora antes de acostarnos en la cama mientras seco bien mi cabello, son las tres de la mañana. Y debemos despertar a las seis.

Acostada sobre su pecho y abrazándome con sus brazos dormimos esas tres horas.

Levantarnos de la cama fue de lo peor, pero debíamos ir al trabajo y estar ahí a más tardar las ocho.

Nos bañamos, los vestidos y sólo nos tomamos un café. Dedrick se quedaría con Alex hasta medio día, ya que hoy llegan los abuelos de Dominick a conocer a su bisnieto. Él pasaría por ellos y se llevaría Dedrick.