Ese pavo es mio

32.-Ying

EXTRA

Con 8 meses de embarazo pero un vientre tan enorme como para un elefante, Ying viajaba en una camioneta blindada, iba rumbo a la oficina de su esposo, las empleadas eran malas con el, lo trataban mal ellas tomaban sus cosas sin permiso, lo pellizcaban muy duro cuando lo ayudaban a bañarse y hablaban a sus espaldas.

Según el todo por que le tenían envidia de que el era el esposo y la joya más preciada de Jin Zixuan, aunque en realidad eran sólo suposiciones suyas, pero sus hormonas descontroladas no le dejaban pensar de manera adecuada, el chófer tenía la orden de llevar al doncel a donde sea que el le pidiera, solo debía avisar a los guardias para que los acompañaran a donde sea que ese loco doncel quisiera ir.

En el vehículo Ying viajaba con su asistente personal, su enfermera y un montón de cosas que cargaba a todos lados:

Mochila regalo de Guangsan para su yerno pues solía pedir cosas inconseguibles en algunos lugares por lo que optaron con tener una mochila con algunos ingredientes, bocadillos o golosinas que eran difíciles de conseguir en cualquier lugar.

Peluche para abrazar regalo de Yibo pues el paso por ese periodo al inicio de su embarazo ahora que si bebe tenía dos meses de nacido ya no le daba ansiedad el estar lejos de sus esposos, de hecho ahora tenía que correr a esos pegajosos hombres para que lo dejarán por lo menos ir al baño solo.

La manta fue un obsequio de su esposo, según el por qué en realidad fue una de las sirvientas que se la sedio al ver cómo el muy embarazado chico peleaba con el hijo de la muchacha por tenerla, el niño lloro mucho ese día, Zixuan le dijo que le conseguiría una igual pero el doncel no paraba de llorar así que la asistente doméstica hablo con su hijo para que se la regalaran al embarazado el niño muy maduro después de hablar con su madre accedió.

Obviamente Zixuan le dio esa y otras más a la sirviente para que se las entregara a su hijo, además de que la nombro como la niñera de su embarazado doncel, cosa que Ying no supo por qué de lo contrario no hubiera permitido semejante situación, el doncel era demaciado posesivo con su pavo.

Al llegar a la empresa los asistentes de seguridad ayudaron al joven a bajar del vehículo, cargaron la mayoría de cosas que Ying siempre llevaba consigo, subió a la sala de reuniones con su séquito de seguridad detrás de el, al llegar a la puerta, la secretaria lógicamente le abrió la puerta pues tenía la orden de dejarlo pasar aunque la junta, reunión o visita fuera de mucha importancia.

Ziyuan alcanzo a su mar de hormonas a media sala, lo cargo con mucho cuidado, dejó a sus asistentes a cargo de la junta, entro a una habíatacion que había acondicionado en su oficina para estos momentos, Wei Ying iba abrazado a el como una garrapata.

Soy molesto???, te causó problemas????, te has aburrido de mi???, ya no soy atractivo???, tu, tuuu ya no eres feliz conmigo??? Decía el doncel en un susurro lloroso, mi amor como crees, noo yo te amo, solo es el embarazo, veras que en cuanto nuestro bebé nazca todo volverá a la normalidad repetia Zixuan acariciando la espalda de su esposo.

El era tan fragil, tan retorcido e ingenuo a la ves, sabía que Wei Ying tenía un trastorno de personalidad que le hacía tener algunas tendencias autodestructivas lo suspo desde que lo pidió como su prometido, por eso pidió a un especialista que analizará su comportamiento, la universidad donde lo había matriculado era solo una pantalla para que la doctora encargada del diagnostico lo tubiera todo listo antes de casarse.

Efectivamente el problema de personalidad de Wei Ying tenía origen en su gestación, su madre dominante golpeaba a su papá doncel, durante su embarazo, de hecho el nacimiento del niño se adelanto debido a una brutal paliza que Chanze recibió de su esposa.

Después de eso lo mantuvieron medicado, asistía a terapias disfrazadas de ayuda académica, deportivas y de esparcimiento, lo que lo hicieron estar mejorando pero desafortunadamente al embarazarse tuvieron que suspender la medicación por lo que sus traumas, complejos y tendencias estaban descontroladas.

Pero para el, todo eso solo lo hacía amarlo más, su hermosos chico, su delicado esposo, la muy dañada madre de sus futuros hijos, el no dejaría que sufriera más se lo había prometido a su suegro, Wei Chanze fue el que le encargo su felicidad ese último día en que le pidio que no permitiera que el chico arruinará su felicidad ahora que lo había conseguido.

Después de ayudar a su esposo a dormir lo arropó con la delicada cobija, le coloco al lado su enorme conejito y salió de la habitación no sin antes encender la cámara de vigilancia que habían instalado para tenerlo muy bien cuidado, en la puerta le dio la recomendación a la nana y a la enfermera de que se mantuvieran listas para cualquier contingencia.

Para algunos podría parecer exagerado pero para el mantener estable a ese doncel era la única razón de su existencia, al menos mientras sus demonios internos estaban sueltos en su cabeza.