La luz del medio día colándose por el ventanal despertó a Sanji. Abrió los ojos lentamente aún sin moverse intentando recordar la noche anterior. Su cabeza daba vueltas y el ambiente viciado del lugar le dificultaba respirar. Al girar el rostro pudo ver sobre la enorme cama en la que se encontraba los cuerpos desnudos de varias personas que aún dormían profundamente. No tenía todos los detalles de la noche pero sin duda había sabido aprovecharla. Se incorporó lentamente y buscó por el lugar con la mirada alguna pista de donde se encontraba. No tardó demasiado en reconocer el espacio como una de las habitaciones privadas de su lupanar favorito.
Se levantó de la cama tratando de no despertar a nadie y buscó sus ropas. En cuanto las localizó se vistió rápido y salió del lugar ataviado con su habitual atuendo de incógnito.Las calles de la capital del reino del Germa se encontraban tan abarrotadas como siempre. Los comerciantes gritaban en cada esquina reclamando la atención de los posibles clientes, las tabernas a rebosar casi a cualquier hora del día y músicos callejeros animaban el ambiente mientras los campesinos bailaban al son de la música en las plazas. El bullicio habitual de su amada ciudad le encantaba. Siempre había algo con lo que entretenerse en el día a día, especialmente si contabas con un bolsillo acaudalado como el suyo.
Caminó entre la gente calle arriba, alejándose del puerto y la plaza principal hasta llegar a las puertas del palacio tras una larga caminata. En cuanto los guardias de la entrada le vieron abrieron las puertas. Pasó rápidamente hacia el interior por la puerta de servicio para evitar ser visto por alguno de sus familiares y se dirigió a su recámara con la intención de asearse. Por desgracia para él al abrir la puerta pudo ver a su hermana sentada sobre su cama. Le miraba de forma reprobatoria con los brazos cruzados sobre el pecho y gesto serio.
- He pasado toda la mañana buscándote ¿Dónde estabas? Hasta mandé a la guardia real a la ciudad para que te trajeran
- Buenos días a ti también Reiju
- Querrás decir buenas tardes
- Imagino que no llevas todo el día buscándome únicamente para recriminarme así que dime ¿Qué necesitas?
- Yo nada, es padre quien te busca. Quiere hablar contigo
- No creo que sea nada interesante entonces - comentó cansado empezando a desvestirse
- Date prisa y aséate antes de ir a verle que ya le has hecho esperar bastante. Sabes que odia que ignoren sus órdenes
- ¿Y qué no? Es como si se hubiese propuesto erradicar la felicidad y la diversión allá por donde pasa
Como respuesta Reiju resopló mientras se levantaba de la cama y salía de la habitación. Sabía que su hermana no aprobaba su estilo de vida pero no entendía por qué era al único que molestaba con sus remilgos morales, al fin y al cabo sus hermanos tampoco es que hiciesen mucho. El mayor y heredero al trono Ichiji se pasaba largas semanas de cacería, Niji dedicaba la mitad del día en acudir como espectador a ejecuciones públicas y la otra mitad en burdeles. Yonji, el menor de todos los hermanos iba alternando en unirse a las juergas de los mayores según la semana. Los pasatiempos de sus hermanos no le parecía que aportasen gran prestigio a la casa Vinsmoke ni a la corona pero por lo visto Reiju solo tenía problemas con él.
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EL REINO DE LAS SOMBRAS (Zosan/Sanzo + 18)
FanfictionFantasy AU Judge Vinsmoke ambiciona dominar las tierras pertenecientes al rey del Reino de las sombras Roronoa Zoro. Sanji Vinsmoke, uno de los príncipes del imperio del Germa se ve enredado en un matrimonio por conveniencia orquestado por su padre...