ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴠᴇɪɴᴛɪᴛʀᴇs

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El día había pasado en total tranquilidad, hoy es la última noche de las Lupercales y en vez de pasar la tarde en una bañera con sales para perfumar mi piel como cualquier bruja en este momento, me encuentro en la librería del señor Cerberus por pedido de tía Hilda que al parecer necesitaba algo de ayuda atendiendo a los mortales. Abro la puerta sintiendo el sonido de la pequeña campana resonar en el lugar, algunas personas se giran a observarme pero otras me ignoran completamente a medida que camino entre los estantes de cómics.

—¡Aquí cariño! —tía Hilda alza su mano desde el otro lado del mostrador.

Camino hacia ella a pedida que meto mis manos en los bolsillos de mi chaqueta.

—¿Necesitas ayuda con eso? —pregunto al ver cómo se esfuerza en levantar una caja de cómics.

—estoy bien —le resta importancia al tiempo que me mira con una pequeña sonrisa —y dime... ¿Cómo estuvo la primera noche de las Lupercales con Nick?

Desvío la mirada un segundo intentando pensar en las mejores palabras para resumir todo lo que ocurrió anoche. Comenzando con que tuvimos que irnos del bosque hasta que apareció Amalia arruinando la noche por completo.

—algo extraña —murmuro sacando una de mis manos de mi bolsillo para jugar con los pequeños llaveros en el mostrador —nos fuimos del bosque por unos aullidos de lobo, y cuando estábamos en casa su familiar apareció de la nada.

—¿Aullidos? ¿Az fue al bosque otra vez? —me mira confundida.

—no fue Az —niego levemente —era Amalia, la familiar de Nick que al parecer está algo celosa por mi relación con él.

—¿Su familiar es un lobo? —pregunta haciendo que asienta levemente.

Noto como piensa en algo, su semblante cambia a uno completamente serio pero rápidamente sonríe levemente en un intento de pasar desapercibida.

—¿Tu relación con Nick va en serio?

—por mi parte si... —respondo algo confundida —¿Porqué lo preguntas?

—no es nada.

—tía Hilda —la miro fijamente.

—solo preguntaba cariño —le resta importancia.

La veo tomar la caja de cómics entre sus manos al tiempo que rodea el mostrador en dirección a los estantes. Rápidamente me paro frente a ella deteniéndola al tiempo que la miro seriamente.

—no te moverás, ¿Cierto? —pregunta mirándome.

—ni un centímetro.

—de acuerdo... —suelta un suspiro al tiempo que deja la caja nuevamente en el mostrador —hay una especie de profecía... Hay algunos que creen que cuando dos brujos tienen un familiar de una misma especie...

—¿Que? —pregunto cuando se queda en silencio.

—estan destinados.

En segundos comienzo a reír al tiempo que doy un paso atrás dándole espacio para que siga su camino, pero en cambio permanece frente a mi en total silencio.

—esto no es una de tus novelas tía Hilda —le digo con una sonrisa en el rostro.

—quizás esa es la razón por la que el familiar de Nick apareció.

—su familiar apareció por otra razón, no por una profecía que apareció en un libro de novelas románticas.

Sin más tomo la caja de cómics por ella y me dirijo a los estantes para comenzar a ordenarlos.

𝐅𝐀𝐘𝐄 →ɴɪᴄʜᴏʟᴀs sᴄʀᴀᴛᴄʜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora