Acomodo mi cabello húmedo detrás de mis orejas al tiempo que me siento en mi cama, después de todo termine por quedarme a dormir en la academia lo que me permitía poder levantarme un poco más tarde.
Termino de subir el cierre de mis botines al tiempo que veo a Sabrina pasar por fuera de la habitación, rápidamente me levanto de la cama y corro al pasillo.
—Sarina! —llamo su atención a medida que me acerco a ella. En el momento que llego a su lado noto su expresión cansada y como pequeñas manchas decoraban su piel bajo los ojos —¿Que te ocurrió? ¿Esta todo bien?
—las hermanas extrañas... —suelta cansada mientras acomoda su cabello.
—¿Te están acosando? —pregunto haciendo que asienta levemente —ve a arreglarte, las clases comenzarán en unos minutos. Nos vemos en el receso en el pentágono.
Me mira un poco confundida mientras asiente levemente y simplemente se aleja por el pasillo. Sin más vuelvo a mi habitación para terminar de arreglarme y tomar mis cosas para dirigirme al salón de herbologia en donde me siento junto a Eve. Acomodo las hierbas en mi mesa mientras pienso en una forma de maldecir o al menos asustar a las hermanas extrañas, para nadie era un secreto que ellas se dedicaban a torturar y espantar a los recién llegados a la academia, lo hicieron conmigo, pero ahora era diferente, no dejaría que acosaran a alguien de mi familia.
Golpeteo mis dedos en la mesa cuando escucho los tacones de la maestra ingresar al salón para comenzar a escribir en el pizarrón a medida que explica la importancia de cada hierva.
—¿Crees que es mejor una maldición de gusanos en el cerebro o un buen susto? —pregunto mirando a Eve junto a mi.
—depende —murmura concentrada en su cuaderno —¿A quien quieres maldecir?
—a las hermanas extrañas, están acosando a Sabrina.
—ambas sabíamos que pasaría —me mira de reojo.
—si, pero no viste a Sabrina —murmuro mirándola seriamente —realmente se veía mal.
—entonces escogería el susto. La maldición se la quitarán muy rápido, pero un buen susto es algo que disfrutarás o mejor dicho... Disfrutaremos.
Me regala una sonrisa maliciosa haciendo que rápidamente se la devuelva. Dirijo mi concentración al pizarrón a medida que comienzo a hacer pequeñas pócimas siguiendo las instrucciones de la maestra.
[...]
Camino a lo largo del bosque siendo acompañada por Eve y los fantasmas de los niños asesinados por las hermanas extrañas. Luego de una pequeña discusión intentando pensar como asustar al trío de brujas, Quentin apareció haciendo que una idea cruzará por nuestras mentes.
Nos detenemos junto a unos arbustos viendo a lo lejos como las hermanas extrañas llevaban a Sabrina con una soga alrededor del cuello, su plan parecía ser colgarla del mismo árbol en el cual las trece de Greendale murieron años atrás. En el momento que vemos a Prudence lanzar la soga sobre una de las ramas mas altas todos nos tomamos las manos y comenzamos a caminar hacia ellas.
—ligera como pluma, tiesa como tabla —repetimos una y otra vez al unísono.
En cosa de segundos los cuerpos de las tres brujas comienzan a flotar en el aire para luego comenzar a retorcerse en busca de un poco de oxígeno. Una pequeña sonrisa aparece en mi rostro al ver la expresión de terror en sus rostros.
Sin más presiono las manos de Eve y Quentin haciendo que el cántico se detenga y las hermanas extrañas caigan de golpe al suelo mientras tosen en busca de recuperar el aire perdido.
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𝐅𝐀𝐘𝐄 →ɴɪᴄʜᴏʟᴀs sᴄʀᴀᴛᴄʜ
Fiksi Penggemar𝑯𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂 𝒃𝒂𝒔𝒂𝒅𝒂 𝒆𝒏 𝒍𝒂 𝒔𝒆𝒓𝒊𝒆 𝒆𝒍 𝒎𝒖𝒏𝒅𝒐 𝒐𝒄𝒖𝒍𝒕𝒐 𝒅𝒆 𝑺𝒂𝒃𝒓𝒊𝒏𝒂.