Capitulo 38: La deshonra de la lealtad

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(General Pov)

(Neserdnia, puerto de la capital, Termina)

Nuevo día, nuevo intento de remediar los errores del pasado. Esos fueron los pensamientos de Adira quien justamente desde incluso una hora antes de que saliera el sol se encontraba esperando en el barco lista para partir. Ya había dejado a Hector a su suerte en el pasado, no cometería ese error, no más.

Adira: No sabe cuánto agradezco lo que esta haciendo por mi y por mi hermano en armas, Héctor. General Viper ¿seguro que con solo dos de los Devas bastara? -pregunto observando a Karsh y a Zoah, uno a cada lado del general, listos para partir.

En ese viaje particular irían la propia Adira que es quien sabia en donde se encontraban Héctor así como la Masamune. Y como apoyo irían tanto el general Viper como sus dos Devas más fuertes. Debido no solo a que les habían solicitado ayuda, sino que además, la Masamune había sido una mancha en la historia de Neserdnia durante mucho tiempo, era hora de ponerle fin de una vez.

Viper: Nada que agradecer, este asunto nos concierne tanto como a usted -declaro con seriedad- además, ah esta misión llevare a mis Devas más veteranos. Ya que los otros dos son muy jóvenes para esto... sin mencionar que ya esa espada le ha hecho el suficiente daño a Glenn -dijo en lo que Adira asintió.

Para luego solo subir al barco para verificar que todo estuviera en su lugar

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Para luego solo subir al barco para verificar que todo estuviera en su lugar. Velas desplegadas y sujetas, un curso ya establecido, cielo despejado con poca probabilidad de tormenta. Si, era un día perfecto para navegar. Nada podía arruinarlo... nada, excepto cierto grupo de adolescentes que se acercaban al barco también.

Adira: ¿Qué hacen aquí? ¿Cómo nos encontraron? -pregunto al grupo conformado por Varian, Hugo, Cassandra y Glenn. Siendo el joven de la raya azul en el cabello el que da un paso al frente.

Mirándolo con esa mirada llena de decisión y de determinación aun con su apariencia mansa y que incluso parecía que una simple ráfaga de viento podía mandarlo a volar... en cierto modo el parecido con Quirin era impresionante, aun cuando no había ningún lazo sanguíneo que los uniera.

Si, sabia del secreto de la verdadera herencia del así llamado hijo de su hermano Quirin desde que ella exigió a Quirin la verdad acerca de ese niño cuando la nombraron su madrina. Siendo algo en lo que nunca metió mano por el sencillo hecho de que no era de su incumbencia.

Varian: Luccia me dijo la hora de partida... También vamos -dijo llamando la atención del grupo de expedición en general que dejaron de hacer lo que estaban haciendo.

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Enredados: El lado oscuro del solDonde viven las historias. Descúbrelo ahora