Capitulo 16: El retorno del rey (2/3)

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(Eugene Pov)

Mi nombre es Eugene Fitzherbert. En el pasado tome el sobrenombre de Flynn Rider a partir de un libro de cuentos que era una de mis pocas posiciones del orfanato, los cuentos de Flinnegan Rider. Admito que gran parte de mi vida la viví como un simple ladrón sinvergüenza sin alguna dirección o rumbo, trabajé para los peores, tuve mis amoríos, escape de mi primera prometida, lo normal. Pero algo que siempre pensé, fue que mi vida no pasaría de ser algo que cabría en los estándares de lo ¨normal¨.

Ya que, a pesar de todo lo que he dicho, hecho o vivido. Solo soy un hombre que busca paz y tranquilidad en la vida, ese es mi mayor anhelo. Y, sin embargo, justo ahora estoy en un carruaje que en el exterior esta siendo conducido por un codicioso y mañoso consejero real de la tercera edad. En frente mío tengo a tres prodigios alquimistas con pasados bastante delictivos que me hacen quedar como amateur en comparación de maldad.

Sin mencionar que uno es el hermano menor de mi novia recién descubierto, él otro es un pervertido de closet, y él más pequeño es literalmente una bomba andante. A mi lado tengo a mi antigua rival y némesis con tendencias asesinas que ahora es mi amiga, casi hermana. ¿Y cómo olvidarlo? estoy a cargo de un reino al borde de la quiebra.

Y para la cereza del pastel ¿Cómo en nombre de todos los santos y del cielo olvidar al donador de esperma que me trajo al mundo que estaba cabalgando detrás de nosotros? También con la intención de ir al castillo para hablar conmigo, porque ¡sorpresa! Cass, Varian y Yong se pasaron de lengua y hasta lo invitaron al castillo para ¨hablar con su hijo¨... la historia que se desarrollara a partir de ahora hablara de cómo se desmoronara en pedazos, en frente de mí, la más pequeña pisca de esperanza de mi parte por tener una vida pacifica y tranquila a futuro.

Solo... ¿Por qué?

Eugene: ¡Solo no lo puedo creer! -dije finalmente estallando luego de un buen rato de silencio incomodo

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Eugene: ¡Solo no lo puedo creer! -dije finalmente estallando luego de un buen rato de silencio incomodo.

Cassandra: Si, cuesta creer que sea tan difícil limpiar el hollín de una daga luego de una explosión de nitroglicerina ¿en verdad tenías que usar mis cosas en tus pruebas, Yong? -pregunto al menor que solo jugo con sus dedos apenado mientras ella trataba de quitar la suciedad del arma.

Yong: Perdón, quería confesar que por accidente la heche entre mis cosas cuando salí a hacer mis pruebas ayer que me disté permiso, no me di cuenta de que estaba hasta que todo estalló -dijo a la vez que los otros alquimistas solo arquearon una ceja, pero la verdad no estaba de humor para esto.

Eugene: ¡Esto es en serio! Simplemente no puedo creer que lo invitaran a venir -dije señalando atrás de mí, donde se veía a Edmund cabalgando detrás del carruaje gracias a la ventana trasera de este.

Varian: Pero... es tu padre... -dijo a la vez que yo solo suspire pesadamente- solo no te entiendo... yo daría lo que fuera para tener a mi familia aquí... o tener a mi papá Quirin conmigo, y tu quieres tener al tuyo lo más lejos posible de ti... o al menos es la imagen que me estás dando, y no lo entiendo.

Enredados: El lado oscuro del solDonde viven las historias. Descúbrelo ahora