I'm With You. [Thomas Sangster]

Epílogo.

Caminé por el césped con mis hijos junto a mí.

-Mami, yo quiero poner las flores esta vez. -Me dijo Anna y yo sonreí.

-Aquí tienes, cariño. -Le dije entregándole el ramo de jazmines.

Continuamos caminando, el lugar estaba siempre vacío un jueves por la mañana.

-Llegamos. -Dijo Lucas y los tres nos quedamos quietos viendo hacia la lápida que decía:

Thomas Brodie-Sangster 1990 - 2030

Un hombre que fue querido y amado por su familia y amigos

Anna depositó los jazmines junto a la lápida y luego volvió a llorar junto a mí.

Thomas y yo habíamos tenido a Lucas en el 2016 y a Anna en el 2025, eso quiere decir que Thomas murió cuando ellos tenían 14 (Lucas) y 5 (Anna) años. Hoy se cumplen dos años de su muerte y Lucas, con sus 16 años, no quiere llorar conmigo y su hermana presentes, pero aun así se le caen algunas lágrimas; y Anna, con sus 7 años, llora como si no hubiese un mañana. A mí aún me cuesta recuperarme. Me niego a tirar sus cosas y, a la vez, me niego a verlas. Thomas fue una persona demasiado importante para mí y el aceptar el hecho de que ya se ha ido es muy difícil.

-Ven, Anna. -Dice Lucas y la toma de su mano -Vayamos a caminar y dejemos a mamá a solas un rato. -Dicho esto, ambos comenzaron a irse y yo me senté frente a la tumba de Thomas.

-¿Sabes algo? Esto me está costando más de lo que creí. -Dije mirando hacia la lápida sin obtener una de las tan famosas sonrisas Sangster -Te extraño demasiado. -Dije y luego dejé que varias lágrimas saliesen de mis ojos -¿Cómo recuperarse luego de perder a alguien que es tan importante para ti? -Dije y luego hice una pausa para llorar.

Estaba nublado el día que Thomas murió. Recuerdo sentir que alguien tosía fuertemente mientras yo dormía (por la mañana), así que me levanté y ahí lo vi, Thomas tosiendo demasiada sangre. Ese instante fue como volver al pasado por medio segundo para luego correr a llamar a una ambulancia, pero para cuando los doctores llegaron no pudieron hacer nada, ya que Thomas había muerto desangrado. Yo, minutos antes de la llegada de los médicos, estaba ahí, sin saber qué hacer, quería que esa tos cesara, pero nunca lo hizo. Lo peor de todo esto es que mis últimas palabras hacia él fueron: "Recuerda apagar la luz cuando vienes a la cama", antes de que Thomas entrase al baño a ducharse, la noche anterior. Recuerdo que yo planeaba quedarme despierta y darle las buenas noches, pero nunca lo logré.

-Me encantaría poder contarte mi día y cómo van los chicos, pero es inútil ya que no hay nadie escuchándome... Es extraña esta sensación de soledad, sin sentir tus bromas ni nada... Pero es lindo pretender que estás aquí y escuchas cada una de mis palabras. -Dije y luego hice una pausa notando que los niños se acercaban -Te amo, Thomas, siempre estaré contigo.

-¡Mami, mami, mira lo que encontramos Lucas y yo! -Gritaba Anna mientras se acercaba a mí corriendo. -¿No es hermoso? -Preguntó ella mostrándome un trébol. -Lucas dice que es un trébol, pero para mí es un árbol pequeño.

-Así es, cariño, es un árbol pequeño. -Dije y Lucas sonrió mientras negaba con su cabeza.

-Tiempo de irnos, hijos. -Dije.

-Adiós, papi. -Dijo Anna y se acercó a la tumba para luego darse un beso en la mano y, con esta, tocar la lápida.

-Adiós, papá. -Dijo Lucas en un susurro que logré escuchar y luego ambos vinieron junto a mí y los tres comenzamos a salir del cementerio.

Thomas Sangster siempre va a ser importante para mí y perderlo no estaba en mis planes, pero que siga adelante es lo que él hubiese querido y así va a ser.