I'm With You. [Thomas Sangster]

18.

Thomas se había ido a llevar sus cosas al edificio de ‘Vogue’, pero yo no lo acompañé. Seguía algo enfadada con él por no querer contarme qué mierda eran esos papeles. Aunque estar enfadada con él no me hacía sentir bien, pero no me quería mostrarme débil, ya que Thomas no se mostraba de esa forma.

—Mi hermanito es algo idiota a veces, no hace falta que te sientas mal por su culpa. – Me dijo Angus.

Me encontraba llorando en el sofá con una botella de cerveza al lado mío. Usualmente no bebo bebidas alcohólicas, pero cuando me siento terrible por algo, suelo hacerlo.

—No molestes, idiota.- Le dije.

Angus silbó.

—Cuidado con ese lenguaje, princesa.- Me dijo y luego se sentó a mi lado agarrando mi cerveza —Thomas no suele enfadarse por demasiado tiempo, siempre se vuelve a mejorar.- Dijo e intentó beber de mi cerveza pero yo se la saqué de la mano.

Lo que menos necesitaba en ese momento era al idiota de Angus intentando hacerme sentir mejor con respecto a mi relación con Thomas, es decir, ¿acaso ese alcohólico sabe algo sobre el amor? ¿Sabe algo sobre cómo mejorar a una chica que no necesita que la mejoren? No, apuesto a que no lo sabe.

—Mira, ¿sabes algo? Lo único que quiero de ti en este momento es que te vallas, pero supongo que no lo harás ya que estás estancado en esta casa sin ganas algunas de irte y la verdad que eso hace que quiera arrancarte tus pelotas y tirarlas a la basura, ya que ambos sabemos que no sería una gran pérdida.

—Vuelve al punto, por favor. – Me dijo Angus interrumpiéndome.

—Mi punto aquí es… Quiero que me des los papeles que Thomas no quiso que viera.

Angus rio y negó con la cabeza.

—No, muñeca, no lo haré.

—¡Oh, vamos!- Dije golpeando el sofá —¿Por qué no?

—Porque, lindura, – Dijo suspirando —es un tema propio de Thomas, es obvio que yo sé de qué se trata ese tema, pero depende de mi hermanito decírtelo o no y, por el bien de su pareja, le conviene mantener el pico cerrado.

Yo lo miré entrecerrando mis ojos. ¿De qué hablaba? ¿”Por el bien de su pareja”? Nuestra pareja estaría mejor si Thomas se dignara a hablar conmigo, que sepa que me puede confiar todo lo que quiera.

—Eres un imbécil, al igual que tu hermano.- Dije levantándome del sofá con mi cerveza en mano. Me acerqué a la puerta de entrada para salir de la casa, pero antes dije: —Ah, y, - Angus se volteó para verme —deberías de decidirte por un solo apodo.

—¿Eh? – Dijo.

—Me has dicho: “princesa”, “muñeca” y “lindura” y, sinceramente, ninguno me gusta, pero si tengo que estar soportando que me digas esos tres apodos todos los días, preferiría que escojas uno y que utilices ese.

Angus me miró sonriendo.

—Si te digo: “princesa” Thomas se enfadará conmigo, así que ese no. No puedo decirte: “lindura” porque mi hermanito te llama: “linda”… así que te diré: “muñeca”. – Dijo Angus y luego me guiñó un ojo.

—Eres tan idiota.- Dije.

—¡Hey! Tú misma dijiste que me decida por uno solo.

—Lo sé, pero sigues siendo un completo idiota. – Dije y luego salí de la casa.

(…)

Luego de caminar sin algún tipo de rumbo, llegué al parque en donde estuve con Thomas luego de una de nuestras citas. Me acerqué y me senté detrás del arbusto donde nos habíamos sentado a charlar, y dejé mi botella de cerveza, vacía, junto a mí.