XII

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Time—Capítulo Doce

Time—Capítulo Doce

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—Adam es un tonto. —Diría Eva sentada en la tierra.

—Lo es, pero llega a ser bueno. —Delilah coloco su mano en el hombro de su amiga.

Eva suspiro sonriendo. —¿El te gusta? Lo más seguro es que tú a él si.

—¿Que? No, es tu esposo. —Ella retiro su mano del hombro de la mujer.

—Lo es, pero no es lo mismo serlo que sentirlo. —Ella sonrió con dulzura. —Es un tonto pero puede ser tu tonto.

—Eva, deja de decir tonterías. —Se cruzó de brazos.

—Le prometiste que encontraría a una mujer que lo entendiera mejor que tú. —Eva se levantó. —Pero creo que esa mujer no existe, ambas sabemos que algo pasa entre ustedes.

Delilah acarició sus manos mirando la tierra en la que estaba sentada, Adam era un tonto y un imbécil, pero era gracioso, la hacia reír ¿Eso era estar enamorada?
Ella no lo sabía, aún así las palabras de Eva le dejaron pensando.

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[...]

Habían pasado ya unos cuantos meses desde que Alastor y Delilah acordaron olvidar lo que habían platicado, obviamente ninguno de los dos lo hicieron, Delilah no podía debido a sus sueños, Alastor debido a su intriga.

Por otro lado Husk no estaba contento con la amistad que parecían tener los dos asesinos, sabía que Alastor ocultaba algo pero Delilah no le creía. Los sentimientos de la muchacha se harían cada vez más fuertes sin que se diera cuenta.

El amor de la mujer llegaba a extremos increíbles, Delilah era capaz de todo por el, si Alastor lo pedía ella mataba, si el lo pedía le inventaba una coartada, Delilah estaba perdida entre sentimientos y eso a Husk le preocupaba.

Ahora mismo Delilah se encontraba limpiando el piso mientras en la radio sonaba la voz de Alastor. Husk cansado de aquella voz apagó la radio.

—¡Ey! Yo estaba escuchando eso. —Delilah se acercó con la intención de encender la radio de nuevo.

—¡No! Ya basta, pareces una maldita niña enamorada. —Le señaló de pies a cabeza.

—¿Y que si lo fuera? —Frunció su ceño en dirección a su amigo.

—Que el no te ama. —Husk golpeó la barra enojado.

—¡Nunca nadie lo hizo! —Ella se acercó tomando a Husk de la camisa. —Se que no me ama, no es el primero, me condenaron a Miles de vidas, yo decido como vivirlas.

𝙀𝙧𝙧ø𝙧 𝘾𝙚𝙡𝙚𝙨†𝙞𝙖𝙡→Alastor←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora