XXIII

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Extermination—Capítulo veintitrés.

El gran reloj por fin llegó a cero y la princesa del infierno estaba encerrada en su habitación, Delilah no podía hacer nada que no fuera asustarse por los gritos que se escuchaban fuera del hotel, por más lejano que estuvieran de los hechos aún s...

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El gran reloj por fin llegó a cero y la princesa del infierno estaba encerrada en su habitación, Delilah no podía hacer nada que no fuera asustarse por los gritos que se escuchaban fuera del hotel, por más lejano que estuvieran de los hechos aún se escuchaba.

—Uno, Dos, Tres... Con Charlie y Vaggie son cinco. —Delilah comenzó a contar a quienes estaban en la sala: Husk, Angel y Alastor, sin contar a la princesa y Vaggie que se hallaban en su habitación. —Conmigo seis... Seis, ¡Seis! ¡¿Dónde está Niffty!? —Pregunto alarmada mirando a sus alrededores.

—Del, ya relájate, debe de estar en algún rincón del hotel. —Le dijo Husk algo enojado, era la quinta vez en una hora que ella los contaba.

—Que tal si salió. —Delilah se encogió en su asiento saltando levemente ante los sonidos de afuera.

—Para ser una de las criaturas más poderosas del infierno es muy cobarde. —Susurro Angel.

—Mujer, colocaste maderas en todas las puertas y ventanas, además de un jodido campo de fuerza alrededor del hotel. —Husk le miro enojado.

—Tal vez no sirva de nada. —Susurro Delilah. —¡Niffty! —Llamo a la pelirroja pero está no aparecía.

—¿Que no sirve de nada? Solo falta que nos coloques campanas en el cuello, linda. —Se burló Angel.

—Campanas, no sería mala idea. —Murmuro pensativa la rubia, por su lado Husk miro mal a Angel. —¡Niffty! —Delilah amplio su sonrisa al ver a la pequeña, por su lado Niffty corría buscando bichos por lo que Delilah tuvo una idea.

—No puedo creer que hayas guardado eso. —Angel le miro con cierto asco mientras Delilah sostenía un jarrón lleno de bichos aún vivos.

—Al menos sirve de algo. —Aclaro tomando un puñado de ellos para luego lanzarlo al suelo a sus pies, así Niffty se mantenía donde ella pudiera verla.

—¿Que rayos fue lo que te sucedió? —Le pregunto Husk ya fastidiado. —No te recordaba asi.

Delilah no le miro tan solo miro el suelo dónde estaba Niffty, no había hablado directamente con Husk o con alguna persona sobre lo que había sido de sus vidas y prefería no hacerlo.

—Esta será una mañana muy larga. —Murmuro con aburrimiento Husk a lo que Ángel se acercó a el de manera provocativa.

—Yo podría hacer que fuera más lenta... —Coloco su dedo el pecho del gato. —O rápida, puedo adaptarme. —Susurro.

Husk simplemente lo apartó de el gruñendo, Delilah por su lado les miro unos segundos antes de entrecerrar sus ojos y luego sonreir en grande... Su pequeña mente procesaba en que tal se vería ese par juntos y tal vez no se verían mal.

 Su pequeña mente procesaba en que tal se vería ese par juntos y tal vez no se verían mal

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𝙀𝙧𝙧ø𝙧 𝘾𝙚𝙡𝙚𝙨†𝙞𝙖𝙡→Alastor←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora