Distintos (Laliter)

Capítulo 33

LALI

Cuando uno vive la vida los peores días son esos en los que te sentís vulnerable, y desde LA perdida no volví a ser la misma, pasé por el proceso en el que me hice la fuerte, la que no estaba tan mal, pero eso no duró mucho, entonces pasé a sentir y permitirme ser vulnerable, hablar con Peter en su momento me hizo bien y recordé que yo no estaba sola, él estaba atravesando la misma mierda conmigo, ambos estábamos destruidos, en vida.
Arranqué terapia por varios motivos: la pérdida de mi bebita, mi mala relación con mi papá y para trabajar en volver a ser la que era, no quería descuidar mi noviazgo con Peter.
-¿Tenes miedo de que tu novio se canse de esperarte a que estes bien para volver a intimar?-mi terapeuta me hizo la pregunta del tema que me "preocupaba" bastante.
-Es.. es una de las cosas que de vez en cuando se me viene a la cabeza-admití- pero después esa especie de "inseguridad" se me va porque lo noto.. lo noto poco interesado en el asunto, y eso irrumpe en mis pensamientos.. porque quiero que vuelva a desearme, pero yo no estoy de ánimo, y él tampoco está de ánimo...-hice una pausa- y en el medio de todos los pensamientos que me pesan, se me viene la absurda idea de que tal vez sí tiene la necesidad de hacerlo con alguien, y que tal vez lo esté haciendo con otra persona, porque conmigo no pude
Mi terapeuta se quedó mirándome seria.
-¿Hablas con él?
Negué con la cabeza y después asentí.
-Lo justo y suficiente, está con mucho trabajo y yo estoy desempleada, viviendo de los ahorros que junté hasta ahora y de Peter, ¡y odio depender de alguien!-me enojé con mi misma.
-Tenes que hablar con él, trabajar en tus inseguridades, no te estoy diciendo que no estas trabajando en eso, porque me lo mencionaste, lo admitiste..-me miró firmemente- pero no te pierdas la oportunidad de también ser sincera con él y abrirte..
-Él no es una persona que acostumbre a abrirse-se lo advertí a mi terapeuta- no tengo idea de cómo pueda llegar a reaccionar si le hablo de mis mambos
-Es tu novio y es tu prometido Mariana, va a escucharte, y seguro va a intentar que salgan juntos de esto-mi terapeuta asintió con la cabeza- por algo te comprometiste con él, ¿no?
-¿Y si sólo me dijo "sí" a casarnos para hacer lo que realmente hacen las parejas que van a formar una familia? ¿Y si sólo me dijo sí porque estaba embarazada?-se me formó un puchero.
Se me escaparon unas lagrimitas y mi terapeuta me contuvo, me dijo palabras esperanzadoras, y me recomendó que no me guarde todos los demonios para mi misma, que hablar a veces es la clave para mantener a flote una relación, y terminé diciéndole que lo pensaba intentar.

PETER

Pasaron dos meses, mi vida consiste en ir a trabajar, volver, prepararle a Lali la cena y el almuerzo del día siguiente.
Me volví un adicto al trabajo, agarraba cada trabajo que hiciera falta para olvidarme del dolor, pero eso me alejaba de Lali, así que los fines de semana intentaba compensarlo.
En el restaurante el dueño contrató a una cocinera amateur, que sólo tenía hechos unos cursos y era una apasionada por el arte culinario, y evité contárselo a Lali para que tampoco tuviera en la cabeza posibles fantasmas.
Volví a mi casa porque olvidé mi celular y al hacerlo Lali lo tenía en la mano, estaba pálida y con sus ojos llorosos.
-¡¿Quién es María Laura?!-fue directo al grano- es linda eh-me mostró la foto de perfil-¡ya sé que es compañera de laburo tuyo Peter! No deja de mandarte mensajitos con emojis, ¡¿acaso es una criatura de dieciséis años Peter?!-se alteró y eso fue suficiente, no pensaba soportar que se hiciera toda una telenovela en la cabeza.
-Mariana-la llamé por el nombre- es mi compañera de laburo, sólo compañera de laburo, mi jefe la contrató hace poco
-Yo también fui tu compañera de laburo, y que digamos antes de mi...-Lali no pudo seguir porque la besé, ella forcejeó para que me aparte y me miró enojada-¡no vas a solucionar tus cagadas así!
-¡No te cagué tonta! ¡¿Me ves con ánimo de cagarte?!-le hablé mal, cabreado, completamente enojado y dolido.
-Entonces, si yo estuviese todavía embarazada, ¡¿me habrías cagado con esa?! Ahora no tenes ganas de cagarme, pero en otra circunstancia
Puse mi mano sobre su boca, no quería escucharla.
Internamente me estaba haciendo mierda su desconfianza, le juré que antes de hacerle mal me mataría a mi mismo, pero sigue creyendo que puedo volver a ser ese Peter que no tenía tacto y descarta a las mujeres cómo a las prendas de ropa.
-¡SÍ MARIANA!-le respondí en caliente e inmediatamente me arrepentí, estaba por decirle que NO porque ni en pedo iba a cagarla y ella se sacó en anillo de compromiso y lo tiró al suelo, yo me agaché para agarrarlo y se lo mostré en la cara- acabas de hacer algo muy doloroso
-¡VOS ME HICISTE ALGO MUY DOLOROSO!-me gritó en la cara y los ojos de me llenaron de lágrimas- sos un hijo de puta Peter-bajó el tono de voz porque se quebró.
-¿Podemos hablar?-intenté mostrarme calmo, tenía que ser el razonable, Lali negó con la cabeza y miró hacia un costado- ¿realmente me estas dejando?
-¡Dijiste que te cogerías a OTRA?!-enfatizó en el "otra", inmediatamente me sentí una mierda-¡y sé que lo harías porque no podes hacerlo conmigo!
-¡¿Sos idiota?!-volví a perder el control, me enojé mal y ella tuvo que mirarme porque le agarré la cara con las manos-¡hablé en caliente Lali! ¡Me fui de boca! ¡Estaba y estoy enojado! ¡Y dolido, y perdido! ¡Y la puta madre estoy perdiéndome! No me gusta la persona que estoy siendo en este momento-se me quebró la voz- y si lo que queres es sacarte un "peso" de encima tomá-me saqué el anillo de compromiso y se lo di- podes guardarlo... porque ni drogado me casaría con otra persona que sea vos.. y para que te sientas "segura" y dejes de dudar te dejo mi anillo de compromiso para que lo guardes, porque todavía tengo la esperanza de que cuando vos te sientas mejor y yo me sienta mejor quiero que pienses y vuelvas a realmente sentir esa promesa que nos hicimos sí es para siempre... a pesar de la pérdida de nuestra hija, mis mierdas y tus mierdas-la miré fijo y después besé su frente de manera fugaz- tengo que irme a trabajar, nos vemos más tarde
Me aparté y caminé hasta atravesar la puerta, una vez en mi auto comencé a llorar en silencio.

En el restaurante Laura notó que yo no estaba bien.
-¿Estas mal por lo de tu bebé? ¿No pasó mucho tiempo?
La miré mal.
-Van a pasar cinco años y voy a seguir sintiéndome mal, ¡las cosas no se superan de un día al otro, menos algo así de importante!-solté un suspiro- es por eso, pero esta vez más que nada por mi mujer..
-¿Tu mujer? No sabía que estabas casado, vi que tenías una alianza pero de compromiso-Laura buscó ver la alianza y se sorprendió-¿te separaste?
-¿La verdad? No sé..-me sinceré- que tenga lo que tenga ser, el de arriba-señalé el techo- siempre me la puso difícil, y seguro está disfrutando que sufra por todo lo que sufrieron las mujeres que pasaron fugazmente por mi vida
-¿Las mujeres que pasaron? Pero si sos un amor de persona Peter, no te imagino mujeriego..-Laura elevó sus cejas.
-No siempre fui cómo me conociste, y bueno... tengo la esperanza de solucionar nuestros asuntos con Lali, aunque ahora no quiera verle la cara-me angustié- y aunque ella tampoco quiera verme la cara..
-Entonces, ¿pensas volver a apostar a una relación que actualmente te esta haciendo mal?-Laura se cruzó de brazos.
-Pienso apostar hasta mi última gota de aliento por el amor que sentí por Lali... y que muy en el fondo sigo sintiendo, ahora no puedo sentirlo con intensidad porque estoy dolido, estoy abombado, mareado... estoy hecho mierda, y necesito estar bien para amarla cómo se merece
-Y ella también necesita estar bien para amarte cómo lo mereces-Laura esbozó una sonrisa amistosa y le sonreí cómo pude.
De un momento a otro la cara de Laura fue de pánico, giré mi cabeza y la vi a Lali, parada, toda arreglada, hermosa y ahora con la boca entreabierta.
Me empujó cuando quise acercarme a ella y se fue, salió de la cocina.
Mis compañeros de trabajo murmuraron cosas entre ellos y el dueño me dio permiso para irme, salí corriendo detrás de Lali.

LALI

Lo peor que podía pasar definitivamente estaba pasando, Peter estaba sonriéndole a la tarada y la tarada estaba haciéndose la mosquita muerta, yo corrí para no quedarme siendo la patética boluda.
-¡LALI!-lo escuché a Peter llamarme desesperado y escuché un ruido fuertísimo, el sonido de un auto frenando y chocando contra algo fuerte me puso en estado de alerta.
Volteé deseando que no sea lo que estaba pensando y lo vi a Peter inconsciente, golpeado, sangrando.
-¡Qué alguien llame a urgencias!-grité y me agaché, Peter tenía sus ojitos entre abiertos-¡no te duermas! ¡No los cierres!-se lo pedí desesperada- te amo Peter, soy una idiota.. pero una idiota que te ama y..
Me puse a llorar cuando cerró sus ojos, hizo un ademán de querer responderme pero no pudo.
El tipo que chocó a Peter fue el que llamó a urgencias, y lo acompañé en la ambulancia, no quería soltarlo de la mano, no pensaba soltarlo de la mano.
Recordé que tenía los anillos en el bolsillo de mis jeans, y encontré el de él, se lo puse en uno de sus dedos.
-Me prometiste algo idiota-le hablé al oído siendo vulnerable- yo tampoco quiero casarme con otra persona que no seas vos, ¡te amo idiota! ¡Ahora abrí tus hermosos ojos verdes y mirame! ¡Despertate ahora o en la guardia! ¡Pero despertate!-me puse a llorar-¡Peter dale! ¡No me hagas enojar más!
Todo el viaje en la ambulancia se me hizo eterno, sabía que Peter estaba respirando, pero tal vez no abría sus ojos por el dolor que estaba sintiendo.
Llegamos al hospital, lo atendieron, y poco a poco fue recobrando color en su cara, escuché a los médicos hablar y no me permitieron verlo por mucho tiempo, le hicieron radiografías y después al quirófano.
Lo vi dormido en su propia habitación recién después de tres largas horas.
-Hola..-le hablé en voz baja al verlo abrir sus ojitos- estas bien-suspiré aliviada.
-¿Qué me hicieron?
-Te operaron de las dos piernas... te chocaron, un auto te chocó, estabas corriendo para alcanzarme-se me quebró la voz y mi respiración se aceleró.
-Ok... ¿y vos que clase de ángel sos?-me miró firmemente a los ojos y sentí que iba a morirme.    
-¿No me recordas?-empecé a híper ventilar.
-Mmm..-se quedó pensativo y me mordí las uñas de una de mis manos.