El antes del después

Boda de Finnick y Annie

Finnick:

Abro los ojos despacio pero sin despertarme por la alarma, como cuando te despiertas porque has tenido suficiente sueño. Por una vez en semanas. Hoy no hay alarma en nuestro cuarto, uno de los regalos de boda de la presidenta. Lo primero que veo cuando abro los ojos es a Annie a tan solo un palmo de mí, con los ojos ya abiertos, mirándome profundamente. Yo sonrío.

-Hola.-le digo suave.

-Hola.me responde de la misma forma.

-¿Por qué no me has despertado.-le digo acariciando su mejilla.

-No quería despertarte, prefería disfrutar de mirarte.

-Mmm ¿tan guapo soy?-digo abrazándola con una sonrisa pícara.

-Pareces un bebe grande.-me responde.

No puedo evitar soltar una carcajada.

-¿Es eso un cumplido?-pregunto.

Ella sonríe y me da un beso en la nariz.

-¿Cómo es tu vestido?-le pregunto curioso.

-Ahhh ¿Quién sabe?-dice haciéndose la interesante.-lo verás luego, ten paciencia.

-No puedo esperar a casarme contigo.-le respondo.

-Tenemos que darle las gracias a Effie y Katniss por ayudarnos a tener trajes de boda en este distrito.-me dice ella ahora estirándose para expulsar el sueño de su cuerpo.

-Definitivamente, los que utilizan en el trece para las bodas son horribles. Quién sabe, quizás cuando acabe toda esta locura podamos devolverle el favor cuando sea su turno.-digo riendo.

-¿Crees que se casaran?-pregunta ella curiosa.

-Quien sabe, lo que importa es que por fin están juntos y felices.-digo pensando en los años que les he visto bailar en esa fina cuerda sin terminar de cruzarla.

-Como nosotros.-dice segura.

-Como nosotros.-confirmo.

Desayunamos y nos despedimos para prepararnos cada uno en una habitación mientras Plutarch manda a todo el mundo de un lado a otro para que preparen la sala donde celebraremos nuestra boda. Todavía quedan unas horas pero ya noto los nervios y la emoción dentro de mi.

-¡Vale! ¡Estás listo!-dice Effie emocionada mientras admira su obra maestra.

Mi traje es una mezcla entre el ascetismo del distrito 13 y los patrones de costura del Capitolio. Según ella se ha basado un poco en algunos de los trajes que se llevaban en las altas universidades del Capitolio utilizando las telas grises del distrito. Ha conseguido que la parte de arriba del traje sea suficientemente rígida de manera que rodea perfectamente mi cuello abriéndose por delante como una chaqueta de traje, dividida en dos telas de dos tonos de grises diferentes. Llevo unos pantalones bastante normales y sin modificaciones pero ha hecho una especie de falda larga con dobleces que va por encima.

-Ahora iré a preparar a Annie. ¡Va a ser una boda espléndida!-dice para después irse casi dando saltitos de alegría.

Haymitch se queda sonriendo a la puerta, después sacude la cabeza y se acerca a mí poniendo sus manos en mis hombros.

-Está claro que ya no tienes 14 años chico.-me dice sonriendo y después me abraza dándome unas palmadas en la espalda.-me alegro mucho por vosotros dos, de verdad, os merecéis ser felices.

Él, junto a Mags, Chaff, Seader y Effie han estado ahí siempre que he necesitado una mano o incluso dos. Siempre cuidándome porque era el más joven de todos y no terminaba de encajar con el resto de los profesionales. Ellos sabían de Annie desde los juegos de ella, y siempre estuvieron apoyándonos.