En Rex-Dex... otra vez

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— Mira el plan es…—

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— Mira el plan es…—

···

— Hola, hola, ¿se escucha bien? Cambio — pregunto al walkie talkie. Estoy en el techo de la empresa Rex-Dex, mirando constantemente a los lados, procurando que nadie me detecte.

— Si, te escucho Eneria, deja que te de algo de información fresca que he encontrado en las noticias — contesta Quod el cual se encuentra viendo la pantalla de su reloj que proyecta las noticias del país — luego del incordio sobre el robo de una fórmula tan importante a G.G.Revolution, esta denuncio a la empresa entera por fraude. Así que Rex-Dex está en la ruina, G.G.Revolution aparentemente se aprovechó de su situación y compró por completo las escrituras del edificio. Tenemos que ir con cuidado, hay mucho personal ahora mismo por culpa de los traslados de equipamiento y …

Quod continúa advirtiendo de los peligros de la misión, eso me empieza a aburrir un poco, así que me rasco el ojo para poder permanecer despierta y atenta, pero al hacerlo sin querer me suelto del techo del que estoy sostenida, haciendo que mi cuerpo se deslice hacia atrás, ¡por poco caigo al vacío!, de no ser que me agarro con fuerzas y escalo rápidamente para ponerme de vuelta donde estaba.

Realmente no era broma con lo que decía Quod referente a que tengo que dormir.

— ¿Todo bien Eneria? — Pregunta desconcertado mi superior.

— AH, si, si, solo… resbalé un poco… tranquilo, lo tengo todo controlado— respondo con nerviosismo y el corazón aun en la garganta, si no fuera por mi instinto, no vivo para contarlo… igualmente no quiero contarlo (eso fue muy vergonzoso).

—Entonces manos a la obra, cambio y fuera —dice Quod para finalizar.

Miro a mi alrededor, está a oscuras. Dejo el walkie talkie en mi bolsillo delantero para luego enganchar un grappling hook, el cual se engancha perfectamente en un fierro, permitiendome bajar por la cuerda hasta una ventana de una habitación vacía que se sitúa en el piso donde tengo que estar.

Forcejeo un poco la cerradura de la ventana con mi fuerza y la logro abrir.

— Estoy dentro. Cambio— digo sacándome el walkie talkie del bolsillo.

— Genial, yo también — escucho sonar desde el otro lado del aparato con entusiasmo – ahora solo queda aferrarnos al plan y todo saldrá bien. Cambio y fuera.

Cuando finaliza nuevamente la llamada mis ojos cubren la habitación. No vería nada si no fuera gracias a las luces de las ciudades, parece que estoy en la habitación de algún investigador, no hay nada interesante aquí.

Escucho pasos en los pasillos así que me escondo detrás de la puerta, la cual está cerrada. Debo ir a la sala de investigación de la madre de Jusilo, Quod y yo llegamos a la conclusión de que allí encontraríamos información de ella.

El sonido de los pasos se desvanecen poco a poco, me decido a mirar por el cerrojo, no hay nadie.

Abro la puerta con sumo cuidado y miro los costados del pasillo. Está despejado. Salgo de la habitación con sigilo y con un par de agujas en mi traje, las cuales me sirven para dormir al instante a quien encuentre, es solo por si viene algún imprevisto.

— Eneria, ya estoy en posición, cambio. — susurra Quod, podría jurar que él está sonriendo ahora mismo.

— Imposible, ha sido demasiado rápido, cambio. — digo con sorpresa y envidia mientras camino lentamente por el pasillo.

— ¿No me crees? Presiona el botón azul del walkie talkie, así se extenderá una pantalla y podrás verme. — Le  hago caso y me sobresalto al ver como una pantalla se extiende.

Desde ella puedo ver a Quod el cual está sentado en una silla muy grande, él saca la lengua y cierra los ojos, yo pongo los mios en blanco, detrás de él puedo dimensionar a un par de cuerpos tirados en el suelo, ahora sí se nota que este chico forma parte del cuerpo militar.

— ¿Ves que es verdad? — comenta él con una sonrisa, pero esta se desvanece en un momento.

— Eneria ¡Cuidado, parece que alguien se acerca a …! — Exclama mirando fijamente las cámaras de seguridad.

No logra acabar la frase porque una puerta se abre a mi costado, dejándome completamente petrificada. De él sale un científico que me mira sorprendido.

— ¡¿Tú quién eres…?!— dice con una cara enojada un señor viejo de barba blanca y barriga exuberante.

Parece que está a punto de llamar a seguridad, entonces agarro al instante una de las agujas que tengo guardadas y se la tiro con brusquedad. Él torpemente lo intenta esquivar, pero no logra evitar que ésta llegue a su cuello.

Lo quita rápidamente, aunque ya es tarde, el líquido, una vez penetrado su cuerpo, no tiene vuelta atrás. Parece que abre la boca para pronunciar alguna palabra, pero su cuerpo se tira hacia atrás, desmayándose.

Para frenar el sonido lo sujeto con dificultad, para luego bajarlo lentamente, luego tiro de sus pies, arrastrándolo dentro de la habitación de la que él intentaba salir hace un momento, para luego agarrar su tarjeta de identificación (la cual cuelga del cuello de todos los empleados), esto me sirve para dejarlo encerrado en su cabina con llave, el efecto del líquido es solo momentáneo y no puedo darme el lujo de correr riesgos.

Miro una cámara que se mueve a mi costado, Quod me está mirando así que tiro un beso a la cámara de broma, escucho como se ríe por el walkie talkie.

Camino con confianza hasta la habitación … La habitación donde la cague por completo… hago una cara seria.

— Eneria, no tengo una muy buena visión de lo que hay en esa habitación, pero creo que está todo en orden. — Comenta él.

— Okay, abreme la puerta, por favor.  — pido con amabilidad.

Él no comenta nada y solo procede a hacer lo que le dije, miro detenidamente como se abre la puerta separándose en dos, colocandose una en cada costado, pero al observar su interior el miedo recorre mi cuerpo…

grappling hook: es una pistola que lanza una cuerda.

grappling hook: es una pistola que lanza una cuerda

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¡Monstruos contra mi! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora