¡Monstruos contra mi!

Descansa soldado

Dato extra: el rey Taimer de la tierra se llama Lutum

— No Eneria, esto, lo vale todo, y ya te explicaré el porqué… —

Quod baja la voz y empieza a explicarme con cautela y cuidado en un momento donde los militares están distraídos.

Jamás he explicado lo que ví allí; ese día que me desperté y observé esos videos, estaba demasiado impresionada, era muy temprano para recibir esa clase de sustos, pero eso ya da lo mismo en este momento.

Los videos de Argos fallaban, el suelo temblaba junto con la cámara que proyectaba una imagen de los pasillos de Rex-Dex, hasta que en un corto instante se capta una imagen inquietante del rey Taimer de la tierra con la cara destrozada y lágrimas de ácido que caen por sus ojos. Lutum normalmente es muchísimo más grande de lo que debería ser realmente, naturalmente su cuerpo no debería entrar por esos pasillos.

El audio del video corrompía mis tímpanos, debido al fallo de las grabaciones me sobresaltaron los distorsionados y agudos gritos que soltaba el monstruo, al principio creía que podía ir a la policía y denunciar el trato que recibía Lutum, ya que está prohibido torturar Taimers, pero luego me dí cuenta de que aunque lo hiciera, eso no funciona para nada, ya que las empresas de Rex-Dex y G.G.Revolution son tan poderosas que pueden evadir tranquilamente la autoridad con cosas como los Taimers,  pero Quod me hizo darme cuenta de un detalle que podría arreglarlo todo…

— Eneria, si te fijas bien atentamente aquí al costado están los gemelos dueños de G.G.Revolution, ellos son los encargados de Lutum y al ser ese el día donde atraparos supuestamente a los culpables del delito de robar su fórmula nadie podía acceder a ese lugar salvo los militares, es como que alguien acceda a una escena del crimen, es demasiado sospechoso.

Mis ojos se abren como platos, eso… es cierto, no tiene sentido de que se haya accedido a esa hora, y además de eso, se supone que el rey Taimer de tierra debía de estar en la empresa G.G.Revolution.

— Eso significa que tenemos evidencia para denunciarlos y hacer una investigación más profunda de lo que hacen los gemelos. — digo con ilusión.

— ¡Exactamente! — dice sonriente mientras sus ojos se iluminan.

Me levanto felizmente para saltar de la alegría, pero, no sé exactamente qué pasó con mi cuerpo en ese momento, parece que me levante demasiado rápido, o tal vez por el cansancio, o tal vez las dos cosas juntas, no lo sé, solo sé que me desmaye, lo último que recuerdo es un golpe seco en mi cabeza contra el suelo de la camioneta policiaca.

…

Abro los ojos despacio lentamente, me duele la cabeza como nunca, siento que estoy en movimiento.

— Ahh. — suelto en susurros.

Estoy intentando concienciarme de lo que pasa a mi alrededor.

— Shh, tranquila Eneria, descansa soldado, lo has hecho  muy bien. — Abro los ojos de golpe y me pongo de un rojo intenso, Quod me está llevando en brazos a mi departamento.

Una pequeña brisa acompaña su pelo, me mira fijamente, sus ojos tienen un brillo particular, reflejando la luz de las farolas de la base madre, con un paso decisivo, solo oigo sus escucha sus botas subiendo las escaleras de la residencia y el viento golpeando contra su rostro, me sonríe.

— ¿Qué haces? — pregunto mientras intento bajar, pero él no me lo permite.

— Te desmayaste en medio del camión, te tuve que llevar a cuesta desde que llegamos aquí — dice susurrando —. Tenía la esperanza de que te quedaras dormida para que así pudieras descansar.

Continué intentando forcejear, hasta que me di cuenta que si me soltaba no podría caminar bien y caería de redondo en tierra, no valía la pena, así que me deje abrazar con vergüenza.

— El director quiere hablar con nosotros dentro de un par de horas aprovecha para descansar.— dice tan suavemente que casi me quedo dormida otra vez, su voz es muy linda, tanto como para dedicarse a leer cuentos a niños pequeños, una voz tan linda que no preste nada de atención a lo que decía y solo a como lo decía.

— ¿Escuchaste Eneria? — me vuelve a preguntar y yo abro los ojos de golpe.

— Para qué quiere vernos el direc… ohh– Mi cabeza contesta sola esa pregunta con una respuesta corta <<porque tienes un maldito red flag>> —

— Creo que ya sabes la respuesta. — dice con una sonrisa algo triste y con sus ojos mirando directamente a los míos, Dios, ¿Porque estas escaleras son tan jodidamente largas?

Cuando al fin llegamos a mi departamento estoy esperando a que él me bajara, pero no parecía dispuesto a hacerlo, así que simplemente puse mi huella digital en el pomo de la puerta para así poder entrar.

Mi departamento es pequeño, como el de todos los militares, en lo único que cambian las unas con las otras es en la decoración y en cómo está acomodada cada cosa, la mía simplemente está desacomodada.

La vergüenza que siento es increible, pero igualmente no tengo fuerzas suficientes para hacer nada, lo miro un momento a los ojos él continúa con la misma expresión que antes, interpreto que está poco sorprendido.

Pasea por los pasillos de mi departamento hasta llegar a mi cuarto, donde se detiene en la puerta.

— ¿Te dejo dentro o prefieres que te deje aquí? — dice algo avergonzado.

— Realmente creo que ya has visto la peor parte. — digo mientras señalo con el dedo pulgar la entrada de casa

— Está bien. — dice algo incómodo para luego pasar y dejarme rápidamente encima de mi cama, luego de eso camina hacia la puerta, pero se detiene y se voltea — descansa, luego nos preocupamos por ese red flag.

Sale de la habitación y escucho sus pasos cada vez más lejanos, me acuesto en la cama sacando todo el aliento que me queda en el pecho mientras escucho como la puerta de la entrada se cierra lentamente.

— Gracias Quod. — Esa fue mi última frase antes de quedarme dormida…

adelanto del siguiente capítulo:

— No me parece justo que me metan en la cárcel, ¡no hice ningún mal!,

— ¡¿El allanamiento y dejar inconsciente a empleados no te parece motivo de red flag?!,

— Yo solo estaba haciendo mi trabajo, nadie está haciendo nada para meter en la cárcel a los verdaderos criminales, si nadie hace nada lo haré yo,

— Recuerda tu lugar eneria, eres una militar en entrenamiento, no tienes ese derecho todavía, además el sistema es más delicado de lo que crees, no es tan fácil sacar y meter a la carcel ha quien uno se le plazca, si no sabes, no opines!…