𝐀𝐃𝐎𝐏 || 𝙺𝚊𝚒𝚂𝚘𝚘

ADOP. 26

Pov JongIn:

Giré lentamente la llave, apagando el motor y cesando por fin el ronroneo de este.

Suspiré pesadamente, dirigiendo mi mirada a un lado mío, viendo con mi revoltijo de emociones la expresión de KyungSoo, quien parecía perdido en sus pensamientos pesimista a juzgar por sus expresiones preocupadas y tristes.

-Oye...-lo llamé con delicadeza, tratando de que salga de su ensoñación sin provocarle un susto- llegamos-informé con una pequeña sonrisa que el menor no me devolvió, haciéndome tragar pesadamente al ver el arrepentimiento y la duda en los ojos de este.

-JongIn...-me llamó esta vez él, con aquel tono de voz que partiría el alma de cualquiera y arrugaría hasta el corazon de la persona más dura y insensible- ¿Que ocurre si mi bebé...?

No lo dejé terminar su pregunta, sabiendo perfectamente cuál era su miedo ademas del repudio que sentía con la idea de que vuelvan a poner las manos en él de manera tan íntima como lo era con su embarazo.

-Todo estará bien...-dije con seguridad a pesar de estar muriendo de miedo por mis propias dudas, recordando todas aquellas anécdotas triste y traumáticas por parte de padres que pasaron por la misma situación- ya veras que tu cachorro estará bien y que además tanto tu como él...-expresé con voz lenta y rasposa, dirigiendo mi mirada por unos segundos a su abultado vientre- están y estarán muy sanos.

KyungSoo nuevamente se quedó callado, viéndome otra vez con aquellos ojos que por alguna razón sentía que intentaban analizarme y sacarme hasta la última maldita verdad.

Suspiró pesadamente y inflo sus mejillas inconscientemente, sacandome sin querer un sonrisa.

-Andando, el director Siwon debe de estar esperándonos adentro- dije antes de quitarme el cinturón y acercarme a KyungSoo para quitarle el de él. Pero cuando subí la mirada mi cabeza casi choca con la de KyungSoo, quien estaba observando de cerca como quitaba el cinturón de la traba, haciendo que nuestras narices se rozara y nuestros ojos se encontraran demasiado cerca, pudiendo sentir la respiración de KyungSoo chocar directamente contra mis labios, los cuales estaba semiabiertos al igual que los de él.

KyungSoo era definitivamente hermoso, y mentiría si dijera que lo único que tenía ganas de hacer era besarlo hasta que mi aliento se fuera en ello y mis pulmones se desgasten por la falta de oxígeno.

Pero no podía...

No era el momento, no era la situación indicada y simplemente KyungSoo no era el omega que tenía que besar...

Simplemente no podía hacerle eso a KyungSoo...

"No queremos llegar tarde..."

Fue lo único que logré pronunciar antes de relamer mis labios y cerrar los ojos con fuerza para luego alejarme de KyungSoo y salir por fin del auto, rodeando este para poder ayudar a KyungSoo con la puerta.

Miré a unos cuantos metros la entrada del hospital, sintiendo nuevamente esa sensación que traía muy inquieto y incómodo a mi lobo desde la mañana.

Suspiré y miré al cielo, pidiéndole a quien sea que esté ahí arriba que nada de lo que temía se hiciera realidad.

***

Todo había pasado tan rápido...

Al entrar por la puerta fuimos recibidos por el Alfa Choi, quien portaba esa sonrisa que solo lograba inquietarme y provocarme cierta incomodidad.

Como si estuviera escondiendo algo detrás de aquella sonrisa de dientes perfectamente blancos...

Choi ya había agendado una cita con el obstetra y aparentemente solo estaban esperando a que arribará con KyungSoo en la recepción.