Someplace

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—¡Esa mujer!....¿Como fue capaz de hacer algo así?¿Poner la vida de su propio hijo en riesgo solo para que me separe de él?

Cada palabra que salía de su suegro le hacían tener arcadas.

Aquella vil mujer creo un plan solo para que su hijo logrará separarse de ella, mando a golpearlo y pidió que fuera en la cabeza, debía olvidar todo ,a todos incluso si aquello hacia que los olvidará a ellos, solo para que JungMi no fuera parte de su familia.

—Cuando me enteré...quise terminar todo de raíz pero no tenía pruebas, no hay nada que sirva para incriminarla ,es por eso que trate de hablar con Jungkook y contarle todo pero su madre...no se cómo lo hace pero siempre marca en el momento exacto.

—Entonces...

—Si me permites...déjame ayudarte, ahora que estás en la empresa será más sencillo para ambos, trata lo como antes, como cuando se conocieron por primera vez, demuestra le quien eres con acciones pero siempre debes estar pendientes de todas ellas, no serán buenas contigo y tratarán de sabotear todo.

JungMi lo miró, parecía realmente arrepentido pero aún no era momento de confiar plenamente en él, no le diría aún sobre su hijo, debía esperar un poco más para eso.

—Lo haré...iré en contra de ella solo para que la verdad se revelé, el necesita saber la verdad y la clase de mujer que tiene por madre.

Ese día ella se fue a casa asegurando se de que su plan iniciaría en el primer momento en que él regresará a la empresa, volvería a ser esa dulce mujer que solo tenía ojos para su esposo.

Una semana paso, y después de mucho esperar él apareció, no estaba solo Karina iba a su lado preguntando si era necesario regresar tan pronto, Jungkook lucia fastidiado por su insistencia en no estar ahí.

—Por favor...podemos irnos unos días más ,pasarla en tu habitación y disfrutar del otro.

Esas palabras lograron su cometido, pero JungMi no se dejaría vencer por aquellas mujeres incluso si sabía que su esposo estaba tocando a otra mujer.

—Guarda silencio, estamos en la empresa.

—Y eso que, todos saben que somos pareja, sería extraño si no nos tocaramos.

—¿Karina puedes parar? A mí no me gusta que mi vida privada esté en boca de otros.

Y con eso la hizo callar, su voz dulce se había perdido, era una persona diferente a la que se enamoro pero lo entendía.

—No quiero que digas nada , eso que escuchaste se mantiene aquí ¿Lo entiendes?

Dalia hablo dejando en claro aquello, JungMi asintió sin levantar su rostro, eso le había afectado,era claro, pero ni así su decisión de tenerlo de vuelta cambió.

Después de un rato Karina salió de la oficina de Jungkook,estaba molesta y era fácil notarlo.

Con la excusa de entregar documentos,ella se levantó para ir con él, entro a su oficina viendo lo sobar sus cienes por el estrés.

—¿Se encuentra bien señor?

Alzo su rostro y se concentró en su computadora —¿Sucede algo?

—No, bueno, solo venía a entregar le esto, necesita su firma...señor, se que no es de mi incumbencia pero si necesita alguna vez hablar tenga por seguro de que puede confiar en mi, se que a veces lo unico que necesitamos a alguien que nos escuche, incluso sin decir nada solo...poder expresar todo lo que no podemos decir.

Después de eso ella se retiró dejando pensando, él sentía mucha presión, su madre, Karina, la sociedad y el trabajo, no se creía capaz de lograr seguir pero debía hacerlo, simplemente por qué quería recordar a su esposa, quería poder hablarle a su retrato sin sentirla ajena, ese era su objetivo poder recordar sus sentimientos por ella, ver algo más en sus recuerdos y por fin darle un punto final a su historia.