Fourteen

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Capítulo 14. "Ropa de diseñador".

Estar con Jane no fue tan incómodo como llegué a suponer. Se mostró un poco desinteresada en platicar conmigo, e incluso estuvo a la defensiva la mayor parte del tiempo, pero no fue tan desagradable. La verdad es que yo hablaba más que ella, pero no tuve problemas con ello.

Terminamos de escoger lo que ambas necesitábamos en Sephora. Al final, tuve que pedir ayuda a una trabajadora, porque no conocía los tonos correctos para mi piel en ciertas marcas, pero no fue la misma chica que al principio nos quiso "ayudar".

Al salir de la tienda, Jane y yo buscamos a Alec y Félix. Jane detuvo el paso y me miró seriamente.

- Mira, escucha. Sé que eres la destinada de mi hermano y todo eso, pero vi cómo tu rechazo le afecta a él - dijo, pareciendo molesta - Y debo aclarar que, si lo llegas a destrozar de cualquier manera, yo lo haré contigo. ¿Entendido?

Ok, tal vez Alice y Edward no exageraban. Jane realmente intimidaba. Solo asentí, sintiendo un poco de pánico.

- Los chicos están por aquí - dijo, comenzando a caminar hacia la derecha.

Caminamos unos metros y cuando llegamos a donde estaban sentados, Alec se acercó a mí y me quitó la bolsa que estaba cargando.

- ¿Veremos más tiendas? - preguntó Alec, mirando a Jane.

- Sí, la humana necesita ropa - respondió Jane, mirando a Alec.

Félix se acercó a Jane y le murmuró algo cerca de su rostro. Jane frunció el ceño y asintió.

- Tendrás que ir tú con la humana. Félix y yo iremos al castillo a resolver un asunto - dijo Jane a Alec, pareciendo un poco molesta.

Jane y Félix comenzaron a caminar hacia la salida y yo volví a ver a Alec, un poco incómoda.

- No es necesario que vayamos a ver más tiendas. Podemos ir al castillo ahora - dije, viendo cómo Alec fruncía el ceño.

- Jane dijo que necesitabas ropa.

- Sí, pero no es muy necesario. Alice me envió algunas cosas y Jane ya me había comprado algunas otras. No creo que necesitase más - respondí.

- ¿No quieres estar sola conmigo? - preguntó, pareciendo incómodo.

No era realmente por eso. Aún creía que no necesitaba ropa de diseñador, era mucho para mí, pero no quería decírselo.

- No es por eso - respondí sinceramente - Es solo que, ¿no te aburrirás?

Alec solo negó con la cabeza y, aunque un par de veces pareció que iba a decir algo, no dijo nada.

- Muy bien - dije, no muy convencida - ¿A dónde vamos primero? No conozco el lugar.

- Ven, esta tienda tiene las mejores marcas - dijo, guiándome con su mano sobre mi espalda.

Al entrar en la tienda, se acercó una señora que aparentaba unos cuarenta años. Estaba muy bien conservada y sus movimientos la hacían ver muy elegante. Parece que conocía a Alec, porque, aunque estaban hablando en italiano, mencionaba el apellido de Alec varias veces.

- Ven, alguien vendrá a ayudarnos - dijo Alec, todavía con su mano en mi espalda, guiándome hacia una zona donde había sillas muy elegantes.

- ¿Come posso aiutarla, signor Vulturi? - dijo una chica mirando a Alec.

- Ho bisogno che tu la aiuti a cercare i vestiti - respondió Alec, pareciendo indiferente.

- ¿É la sua ragazza? - parecía que la chica le estaba preguntando algo a Alec.

Lazos inmortales | Alec VulturiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora