Thirty-eight

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Capítulo 38. "La mirada".

Narrador omnisciente:

El tiempo había pasado más rápido de lo que todos esperaban. Nadie se movía, parecían estatuas en su posición, tan solo esperaban la llegada de los reyes y su séquito de fieles seguidores. Alec era quien más sufría por la espera, a pesar de que cierta vampira rubia pensara lo contrario.

Xaden se encontraba dormido en una habitación, siendo custodiado por Rosalie junto con su compañero, Esme y un par de lobos que habían sido convocados a la tarea por Sam. A pesar de que no era el plan inicial de Carlisle, los lobos también se encontraban presentes, pues el resto de la familia había considerado conveniente su presencia.

- Esta tensión es demasiado exasperante - susurró Alma a su prometido, pero todos los presentes la habían escuchado.

- Están a nada de llegar - dijo Alice mirando a todos los presentes.

Con el comentario de Alice, la mayoría de quienes se encontraban en el jardín tomaron una posición más firme, estando a la expectativa de cualquier movimiento, hasta que Alice se tensó, estaba teniendo una visión. Edward de inmediato volteó a verla sorprendido.

- No creo que sea una buena idea - soltó Edward sin apartar la vista de su hermana, leyendo también sus pensamientos.

- Lo has visto - dijo Alice mostrando su incredulidad - Creo que podríamos tener una ventaja.

- ¿De qué diablos están hablando? - preguntó Alma con notable desesperación.

- Alice ha visto algo nuevo - respondió Edward.

- ¿Ah sí? No me digas - dijo Alma con ironía, estando más ansiosa que cualquiera de los presentes.

Sam Uley colocó sus brazos alrededor de su prometida, con el objetivo de transmitirle seguridad.

- Jane encontrará a su destinado - explicó Alice mirando con cierto nerviosismo a Alec.

Alec estaba más que sorprendido, pero aún con consternación, se mostraba impasible, con una mirada que no reflejaba más que aburrimiento; el único que era consciente de sus emociones era Jasper, al igual que Edward, quien había leído sus pensamientos.

- ¿Y eso en qué nos beneficiaría? - preguntó Alma, más confundida que antes.

- Su destinado no es cualquier persona - dijo Edward con un tono de voz relajado que denotaba cierta burla implícita.

- Es Liam, el amigo de Dani - añadió Alice mirando a Alma.

- Eso podría cambiar algo, ¿no es así? - preguntó Bella moviéndose con ansiedad. Pues, aunque su conversión a vampira la había ayudado a ser más coordinada, su constante nerviosismo parecía no haber desaparecido.

- ¿Lo haría? - preguntó Carlisle a Alice - ¿Esto nos daría algún tipo de ventaja?

- En mi visión, pasaban un par de días después de hoy. Jane lo encontraba en el pueblo y cuando conocía su relación con Dani... se arrepentía de haberle dado la espalda a su hermano - explicó Alice viendo con pena al Vulturi presente.

Alec nunca culparía a Jane por escoger a los Vulturi antes que a él, pues era lo que conocía, es lo único que de alguna manera tiene ahora, pero eso no significaba que no le doliera escuchar que no era la primera opción de su hermana.

- Jane solo estará con ellos porque sabe que regresarás a Italia una vez que esto termine - dijo Edward de alguna forma consolando al vampiro italiano.

- ¿Y si la llamamos ahora? - dijo Alma llamando la atención de todos - Si está aquí, o llega de "improviso", ¿Jane estaría con nosotros?

- ¿De qué serviría tener a un vampiro más de nuestra parte? - preguntó el alfa con cierto disgusto reflejado en su voz.

Lazos inmortales | Alec VulturiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora