𝓞𝓝𝓔𝓢𝓗𝓞𝓣 // 𝖑𝖆 𝖘𝖔𝖈𝖎𝖊𝖉𝖆𝖉 𝖉𝖊 𝖑𝖆 𝖓𝖎𝖊𝖛𝖊

Rafael Federman

Primero que nada, a alguien más le parecen super bonitas las Stories de Ema? Bueno, segundo me he estado escuchando viento helado en bucle, recordad stremear Porái y viento helado.

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𝒪𝒸𝑒𝒶𝓃 𝐸𝓎𝑒𝓈

El sonido de las olas chocando con las rocas, o la marea tranquila de las tres de la tarde, así describiría Tania el color de los ojos de Rafael, bonitos como el mar, hipnotizantes como la tranquilidad de sentarte en la arena y observar el balanceo ligero de las olas.

Para Tania, Rafael era todo eso, y sus ojos para ella solo expresaban y mostraban con claridad la bondad de su alma.

Rafael por su parte veía a Tania como una compañera, ella era periodista y ocupaba algún que otro espacio en podcasts famosos además de haber hecho alguna que otra obra de teatro, el chico no sabía de la admiración de la chica a pesar de que esta le realizaba alguna que otra alabanza. Sin embargo, Tania sentía algo más que admiración por el chico, actualmente lo podrían llamar atracción.

El día era uno normal, Tania se había levantado había tomado unos cereales para desayunar y se dedicaba a escribir el guion de un podcast al cual había sido invitada, de pronto su teléfono sonó, inmediatamente una sonrisa se postro en su rostro.

-Bueno? -Dijo mientras aceptaba la llamada-.

-Tania? Soy Rafael-Dijo una voz masculina al otro lado de la línea-.

-Rafa, dime, ¿qué pasó? -Pregunto la chica-.

-Me han invitado al programa tuyo el viernes, ¿vas a estar vos o estará la otra chica? -Le pregunto directamente el chico-.

Antes de contestar la pregunta del chico que le llamaba la atención, Tania comprobó el calendario dándose cuenta de que efectivamente aquel viernes trabajaba en el programe de entrevistas más viral en la actualidad: - Si Rafa, el viernes me toca laburar a mi-.

-Dale, así nos vemos, ¿irás un poco antes como siempre? -Le pregunto otra vez-.

-Claro-Contestó Tania con seguridad-.

-Bueno ya nos veremos y vamos a por un café-Finalizo Rafael-.

-Eso es todo? -Pregunto esta vez la chica-.

-No, que tengas un lindo día-Le respondió el ojiazul riendo-.

-Vos igual-.

Rafael cortó la llamada sonriendo para si mismo, no sabía del todo porque la había llamado, era solo una chica que lo había entrevistado un par de veces, y bueno una buena actriz había visto una de sus obras y su actuación había sido sublime. Aún así no podía dejar de sonreír o de sentirse nervioso cuando alguien de su alrededor mencionaba el nombre de la chica. Creía en parte que se sentía atraído hacia la chica, y no le daba vergüenza admitir que le gustaba la idea de conocerla más aún si eso implicaba mil entrevistas más.

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A ver se que esto a sido corto, muy corto, pero hay posibilidad de parte 2.

Y se me empiezan a acabar las ideas, solo un poco, así que si tenéis algún pedido o sugerencia tenéis los comentarios abiertos. Votad y si queréis podéis pasaros por mi Twitter que lo tenéis en la bio.