—¡Mira quién llama! ¡Si es el desagradecido de mi nieto que no quiere verme desde navidades!
Mi abuela siempre tan amable y amorosa. Aunque yo también estaría enfadado si desapareciera como una bomba de humo de repente y no diera señales de vida en cuatro meses. Pero solo por ver a Evelyn y Sophie aguantándose la risa, merece la pena pasar un poco de vergüenza por sus reproches.
Después de toda la mañana fuera del apartamento, habíamos conseguido comprar mucha ropa premamá para Evelyn y un cambio de vestuario para Sophie. Quien, a diferencia de mi maravillosa novia, no me puso ninguna objeción para que le pagara la ropa. Me ha divertido la pequeña riña que le dio Evelyn a su hermana mientras yo aprovechaba el momento para pagar todo.
También entramos en una tienda de bebés porque insistí demasiado para mirar varias cosas como el carrito de bebé o la cuna. Por desgracia, pese a que tenía ganas de comprar media tienda, Evelyn me dijo que tenía que esperar a ver qué nos regalaban en el baby shower que planeaba hacer en unos días.
Me hizo mucha gracia porque era como una manera de decirme que dejara de gastar y de ahorrar, pero decidí hacerle caso por el momento porque tenía un poco de razón en el fondo.
Y, tal y como hablamos la noche anterior, Evelyn no tardó en decirme que llamara a mi abuela para invitarla a ella y a mi padre a cenar y poder decirles la buena noticia.
Aunque también me hizo un poco de chantaje emocional, diciéndome que estaba segura de que se alegraría de escuchar mi voz por teléfono después de tanto tiempo sin verme. De ahí el comentario sarcástico de mi abuela nada más descolgar la llamada.
—Hola, abuela —le dije, mandando callar a mi novia y cuñada en el proceso—. Ya veo que estás bien, si tienes fuerzas para ser sarcástica.
—Mira quién fue a hablar, el señor "no puedo ir a cenar porque tengo turno en el hospital" —dijo mi abuela, a lo que Evelyn arqueó una ceja al ver que utilizaba una excusa tan pobre. Aunque ya lo sabía—. ¿Qué quieres?
—Pues... Evelyn y yo queríamos invitaros a cenar mañana, a ti y a papá —dijo Axel, lo cual hizo que se escuchara la celebración de la reina emérita al otro lado del teléfono—. ¿Te va bien o sigues molesta por no poder verte antes?
Unos segundos de silencio, antes de escuchar la voz de mi abuela mucho más fuerte que antes.
—¿¡Está mi nieta política contigo!? ¡Quiero oírla y asegurarme de que no te ha dejado como ya creíamos que había pasado!
Evelyn no tardó en reírse, antes de saludar a mi abuela:
—Hola, abuela. Aquí estoy, resistiendo a este payaso —bromeó Evelyn, haciendo que mi abuela se echara a reír bastante feliz—. ¿Podemos contar con usted mañana? Siento mucho no haber podido ir en Navidades...
—A ti te lo perdono todo, querida, no te preocupes —que se note el favoritismo, claro que sí—. ¡Mañana estaré allí, tengo muchas ganas de que nos pongamos al día! ¡Y se lo diré a mi yerno, hasta mañana!
Dicho esto, colgó la llamada dejándonos a Sophie y a mí boquiabiertos por la sorpresa mientras Evelyn sonreía antes de dirigirse a la nevera y comerse unas fresas.
—Bueno, pues ya está. No ha sido para tanto —dijo Evelyn con una sonrisa—. Hay que comprar más fresas, y lo de la cena de mañana. Axel, cariño, ¿puedes ir tú después de comer a comprar, por favor?
Solo con lo de "cariño", sabía que Evelyn era consciente de que iría hasta el infierno por ella.
Ida y vuelta.
—Claro, yo voy. Pero si aparezco con varios biberones y chupetes...
—Te la corto, ¿me he expresado con claridad? —dijo Evelyn con un tono bastante dulce antes de seguir comiéndose las fresas, a lo que asentí. Realmente da mucho miedo cuando utiliza ese tono tan tranquilo para amenazarme— Perfecto, voy a cocinar.
![](https://img.wattpad.com/cover/365984490-288-k717886.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Un amor por casualidad
Storie d'amoreÉl es la persona más despreocupada del mundo. Ella la que tiene demasiadas responsabilidades. ¿Qué pasaría si te dijeran que a veces las personas más diferentes entre sí también son las más compatibles entre ellas? Como hasta el más estúpido de los...