32. Elastic Heart (Maratón 2/3)

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Mike

Nunca había experimentado esto en mi vida y no solo me refiero al celo, cuando Melek me tocó, él era el que tenía todo el control y todo se sentía salvaje, en cambio, Noah no tiene miedo darme el control, es suave, intenso, pero cada movimiento es tortuosamente delicado, como si tratara de darme el máximo placer sin lastimarme.

Me sentía importante en sus brazos, pero sobre todo dominante y nunca imaginé que podía sentirme así.

- ¿Quieres que descansemos? - preguntó Noah aun con la voz agitada.

Dejo besos en mi hombro mientras se recuperaba del reciente orgasmo, no podía ver su rostro, habíamos bajado a buscar agua y terminamos en el sofá, yo sentado de espaldas sobre su erección, encargado de dirigir el ritmo de las penetraciones.

- Sí...- quite sus manos de mi cadera para evitar que saliera de mí- Ni se te ocurra, quédate así- le exigí.

Era tan primitivo y posesivo exigir tal cosa, pero no me gustaba como me sentía cuando salía de mí. Lo quería ahí, debía estar ahí, todos mis instintos me gritaban que su pene era mío.

- ¿Dónde quedó mi inocente Mike? - se burló de mí mientras acariciaba mi pecho y luego bajaba una de sus manos a mi pene.

- Sí, quieres recuperar a ese chico, tocándome no lo lograrás- apoyé mi cabeza en su hombro, pegando por completo mi espalda a su pecho.

Esta posición me gustaba mucho, podía elegir el ángulo en el que quería que me penetrara, podía moverme a mi antojo y él tendría que dejarse.

- Es difícil, contenerme. Con este cuerpo que tienes...- subió sus manos a pezones y los pellizco mientras dejaba besos en mis hombros y cuello.

Moví mi cuello para dejar que hiciera lo que quería.

- ¿Te gusta? - pase una de mis manos por sus hombros y con mis dedos comencé acariciar su cabello antes de jalar de él y levantar mis caderas para su pene saliera un poco de mí.

Inmediatamente, baje mis caderas para comerme todo su pene, su gemido de satisfacción me hizo sonreír con superioridad. No sé si era el celo o si siempre fui así, pero me sentía seguro de mí mismo, de mi cuerpo y de mis movimientos.

--Eres es exactamente lo que necesitaba...- trató de contener sus gemidos ante mis repentinas embestidas. -Pero, necesitamos comer algo; ya casi llevamos dos días así- Con firmeza, agarró mis caderas para detener mis movimientos.

Gruñí molesto, yo quería seguir.

- Estoy lleno- agarre su mano y la coloque en mi vientre- Tú me estás llenando.

Noah sonrió con malicia cuando entendió a qué me refería.

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Lucas

No quiero parecer presumido, pero tengo al mejor novio del mundo. No solo logró que arrestaran a esas personas malas del bar, sino que también consiguió que su amigo Nix acogiera a los niños afectados y los ubicara en un lugar seguro, con todo lo necesario para que puedan seguir con sus vidas, vidas que esos enfermos les arrebataron.

Y las sorpresas no terminan ahí. Para mi cumpleaños, me regaló un viaje de dos días, todo pagado, para que lo pase con mi mejor amigo y con él. Además, Noah me dio permiso para faltar al trabajo. Curiosamente, cuando llamé a Mike para pedir permiso, él contestó, agitado, y me dijo que sí. Creo que estaba haciendo ejercicio, y seguramente Mike estaba ocupado con los niños y no pudo atender la llamada.

- Mira lo que conseguí- Connor llamó mi atención.

Estamos viajando en primera fila, nos trajeron una deliciosa comida, pero la bebida no parecía combinar con esta, así que Connor se había levantado para conseguir algo de buena calidad.

THE GUILTY PLEASURE (CUARTO LIBRO DE LA SAGA AES)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora