Amor & Odio [Railo]

Capítulo 4: ¿Puedo confiar?

Alo

Hago todo los posible por actuar normal, pero el miedo que siento de volver a clases me mata por completo las ganas de cualquier cosa. Hoy junto a mi padre y mi hermana se supone que iremos a nuestras reuniones con la iglesia, que por muy extraño que suene me encanta ir allí, puedo hablar libremente de lo que siento y de lo que me sucede cada día.

Hay un chico que se llama Andrés, él es con el que más siento confianza para hablar, no nos conocemos desde hace mucho tiempo, pero es muy bueno conmigo, de hecho el también estudia en el mismo instituto solo que está en un año menos, dónde debería está yo solo que me adelantaron un año más en sexto grado a séptimo. Lo bueno es que podré verlo en el receso y no me sentiré tan sola junto a él y otra cosa que me llama es que también es muy lindo y no sé... Bueno tonterías mías. Ayer le conté sobre lo que sucedió hace unos días con la chica de cabello crespo (eso sí evitado lo que ví en el salón) y me apoyo demasiado, diciéndome que hará todo lo posible por protegerme, y eso me agradó demasiado, por así decirlo.

Ya que mi papá tuvo que ir al trabajo desde temprano tengo la opción de irme a pie o tomar el autobus y creo que tomaré la opción de irme a pie, me vendrá bien respirar aire fresco. Mientras voy por las calles se viene a la mente mi mamá y no puedo evitar sentir como mi corazón se apachurra y ese sentimiento de vacío se planta en mi pecho. Ya han pasado 8 años desde que murió y hay momentos en los que siento como si hubiera sido ayer; ella vivió enferma mucho tiempo y ya era muy duro verla así, mi papá y ella hacían de todo para que no la viéramos tan decaída, pero con el tiempo era cada vez más difícil ocultarlo. Llegó el día en el que estábamos cenando y de la nada ella se desvaneció contra la mesa alterandonos por completo, estuvo varias semanas en el hospital hasta que ya no pudo resistir más y nos dejó... Desde entonces todo se torno muy gris en mi vida, sobre todo en la de mi papá, él realmente la amaba. Ahora todo está tomando un poco más de color en nuestras vidas y tengo que mantenerlo así.

Después de respirar profundamente y dejar que parte del dolor se vaya sigo mi camino hacia el instituto pensando en como esquivar a toda costa a la chica pelirroja. Esta semana la evité por completo y no sé cómo, cada vez que me veía me escondía, comía mi desayuno en un lugar bien perdido del instituto que me enseñó Gabriela al notar las actitudes de esa chica y en las clases evitaba mirarla. Ahora que pertenezco en concejo estudiantil me da mucho miedo encontrarmela a todo momento, lo que obviamente sucederá. Por lo que me contaron algunos son muy pocas las veces que Rainelis o Rai, casi no asiste a las reuniones, solo está en las importantes y las de emergencia y esa información me llenó el alma.

Cuando llegue voy directamente al salón de química que es la primera clase, soy de las primeras en llegar así que solo hay unos cuantos sentados hablando tranquilamente. La clase marcho normal, entre fórmulas químicas, charlas y apuntes, al igual que con las demás. No compartí ninguna con la peliroja así que pude estar tranquila en todas clases. Ya en el pequeño receso que nos dan antes de que finalicen las clases del día me encuentro con Andrés hablando de si salir mañana después de clases a un lugar de comida rápida que está muy cerca de aquí, dice que es un establecimiento increíble y al estar muy cerca del instituto siempre hay más estudiantes que otras personas, haciendo que el ambiente juvenil (sino odias a las personas claro) te pueda gustar mucho. Yo soy introvertida, pero ese factor no me fastidia demasiado.

- ¿Y como es la pasta de allí? - pregunto dandole un mordisco a mi manzana.

- Nunca la he pedido, pero mis amigos dicen que es deliciosa. Yo prefiero pedir pizza o pollo frito, son mi fascinación. Entonces ¿Sí irás?

- Tengo que probar esa pasta así que sí jajaja

- ¡Bien! Qué sea una cita - sonríe.

- Una que-

- ¡Alondra! - giro mi cuerpo y veo a una chica castaña llamarme acercándose a nosotros - Tu eres Alondra ¿No?

- Sí ¿Pasa algo? - frunzo el ceño.

- Sí, al parecer hay un daño en la fachada del instituto, por la zona de atrás de la cancha de básquet y tenemos que ir a ver qué tan grande es e informarlo para que lo arreglen, asi después hablas con tú noviecito, vamos

- ¿Qué? No, no, él no el no es mi novio - digo apenada levantándome.

- Bueno no importa vamos

- Hablamos después ¿Okey? - me despido de Andrés.

- Okey, cuídate mucho

Por este tipo de cosas podemos faltar a clases o al menos a parte de ella entonces no preocupo demasiado. Cada vez veo a menos gente y es agradable caminar sin tantos gritos y charlas de quien tiene más tetas que la otra o cual de los chicos del instituto es más lindo. Cuando vamos llegando a la cancha de básquet la chica con la vengo me dice que necesita ir al baño, pero me muestra por donde debo ir para ver el problema, y que dónde vea a nuestro grupo del concejo ahí es, así que empiezo a caminar hacia allí.

Cuando llego a un punto en el que no hay más camino miro hacia los lados y no veo a nadie por ningún lado, miro extrañada y me preguntó si me metí por dónde no era o si la chica se equivocó, no sé. De repente escucho varios pasos acercase y al girame veo a la pelirroja con dos chicas, todas con las manos cruzadas menos menos Rainelis, Rai digo, Rai. Después de unos segundos ella le hace varias señas a las chicas lo que hace que ellas se vayan y su expresión que antes era de su típica arrogancia ahora es de enojo y allí en ese momento lo único que puedo sentir miedo.

- Ay lentes... yo solo te pedí una cosa - pone sus manos detrás de su espalda y camina de un lado a otro - solo una una mínima cosita - se detiene y me mira - ¡Una puta cosa! ¿¿Y no pudiste cumplirla??

- Pero ¿Qué, qué hice? - digo dando un paso hacia atrás asustada por la forma en la gritó - Yo no he hecho nada, te lo juro

- ¿Ah no? - niego con la cabeza - Entonces por qué - se cerca - Por qué carajos hoy viene unos de los profesores y me dice "Hay rumores de que agrediste a una estudiante" rumores dice, Hm, obviamente alguien le contó y estamos muy solitas ese día así que dime ¡Maldita sapa de mierda! ¿Que voy a hacer contigo?

- No, no, te prometo que no dije nada, es imposible. Yo no-

Sin dejar que termine de hablar un fuerte golpe cae en mi estómago haciéndome inclinar hacia abajo por el dolor, luego cuando iba a mirarla una patada cada en mi nuca haciendo que caiga a suelo quejandome del dolor.

- ¡No sabes cuándo odio que no hagan lo que digo! - una patada más, esta cae en mi espalda - Era tan fácil... Pero ¡No!

Ahora cae en mi golpe concreto, justo en mi rostro dejándome completamente mareada y sin fuerzas. Lo único que puedo ver es a la pelirroja ponerse su labial para después alejarse, mientras que todo a mi alrededor se va oscureciendo. Maldición...

Por haberme tardado tanto con el anterior :)

Natix 🌼